
No sé exactamente de qué, pero sí sé que la culpa es de las redes sociales, o del wasap, tal vez aún no haya pruebas concretas. Pero ya saldrán.
No sé exactamente de qué, pero sí sé que la culpa es de las redes sociales, o del wasap, tal vez aún no haya pruebas concretas. Pero ya saldrán.
Puede que nosotros (los de clase trabajadora, los de clase media depauperada, los pensionistas, los desahuciados, los dependientes...los damnificados, en suma) no lo veamos, pero España se recupera y crece.
Desde que en mi lejana infancia la señorita Gloria me inició en los misterios de los palotes y su correcto trazado estoy intentando aprender a escribir.
Sorprende el símbolo, supongo que falangista, de las dos espigas y el martillo; sobre todo por la casi obligada asociación con otro símbolo, el de la hoz y el martillo, que con tanto afán persiguió el régimen.
Entre el revuelo mediático de la duquesa muerta, la folclórica entrando en el trullo y los curas pederastas de Granada, están pasando desapercibidas las fechas de la muerte de Franco y el mes en contra de la violencia machista.
No es solo que esta gran chusma y caterva mangase, robase y trincase de varias formas a la vez a base de sueldos, sobresueldos, dietas y sobredietas.
Antonio Cristóbal Ibáñez Encinas, marmolista, natural de Granada y de 43 años; Manuel Sánchez Mesa, domiciliado en Armilla y de 27 años, y Antonio Huertas Remigio, de 21 años y vecino de Maracena.