Hay pueblos que no son sólo un lugar en el mapa, sino una forma de latir en silencio, una raíz que se hunde honda en la tierra y en el alma de quienes la pisan.
Yo sé del beso que hiere / y del que en el alma flota, / sé del que llega y se queda / y del que se va sin nota.
Poema sobre la vida de Elena/Eleno De Céspedes de Juan José Gallego Tribaldos, que dedica a nuestro compañero Antonio Arenas.