Mariposear es afición que cuadra a quien estudia la philosophia de lo cotidiano, evidentemente.
No es que intente corregir al poeta sevillano que en su poema habla de la soledad de los muertos.
Tengo para mí por cosa cierta, contrastada y demostrada que la risa es una cosa que no conviene tomarse a broma.
No es la genialidad la que mueve mis dedos sobre las teclas, es, más bien, una mezcla de sentimientos.