Se trata de la iniciativa particular del alhameño José Espejo Espejo, quién a través de las redes sociales está buscando a aquellos alhameños cuyas circunstancias les obligaron a emigrar de su tierra.
Se trata de la iniciativa particular del alhameño José Espejo Espejo, quién a través de las redes sociales está buscando a aquellos alhameños cuyas circunstancias les obligaron a emigrar de su tierra.
El encuentro está previsto para el sábado, 28 de marzo, que es el día siguiente al Viernes de Dolores.
El encuentro en esta ocasión será el sábado 27 de diciembre a las diez de la noche, en el restaurante Raya.
Segunda cena de las generaciones del 63-64-65 con motivo del 50 aniversario de los nacidos en 1964, el sábado 23 de agosto.
¡Porque no todos los años se cumple 50! Los del 64 cumplimos 50 años, queremos celebrarlo junto con nuestros amigos y amigas nacidos en el año 63 y 65...
Fueron 23 los voluntarios para conmemorar el aniversario, la cual sin duda alguna, dejo un sabor de boca inmejorable.
Y es que ya iba siendo hora, muchos lo estábamos deseando, hay que volver a recordar los buenos ratos vividos y lo bien que nos lo hemos pasado, y seguir cultivando la amistad.
Volvemos a reunirnos para celebrar los 40 tacos, que desde la última vez ya han pasado casi cuatro años (foto de arriba).
Desde que el sábado 19 de febrero del año 2009 se celebrará el primer encuentro de esta generación, que parece ser que le gusta más el Carnaval que la Navidad, ya se han celebrado cinco encuentros y este 1 de marzo, de este año 2014, vamos a por el sexto.
Hace ya siete años un par de jóvenes nacidos en el 85 propusieron que en lugar de una cena generacional, en un pueblo como el de Alhama con tanto negocio hostelero convendría más organizar un encuentro de TA-PEO ya que este tipo de encuentros salía más rentable y daba la posibilidad de relacionarte con todos los asistentes en un ambiente distendido y no encorsetados en un lugar de una mesa en una cena tradicional en la que solo te relacionas con tus vecinos de sitio.
Tras varios años sin reunirse, la generación del 92 decide irse de tapas para recordar viejos tiempos, contar anécdotas personales de los últimos años vividos, y lo más importante, "liarla parda".