Aunque filóloga de pensamiento y sentimiento, soy ante todo amante de la cultura y, más aún, de la historia que tiene que ver con nuestra ciudad, de la que Teodoro Reding fue ilustre hijo adoptivo.
Aunque filóloga de pensamiento y sentimiento, soy ante todo amante de la cultura y, más aún, de la historia que tiene que ver con nuestra ciudad, de la que Teodoro Reding fue ilustre hijo adoptivo.
En “Marinero en tierra”, el poeta expresa su nostalgia del mar de Cádiz en un tono lúdico casi infantil y donde el goce de los sentidos y la alegría estalla hasta el delirio, aunque en ocasiones teñida de nostalgia o de presentimientos.
Nacido en Barcelona en el seno de una familia perteneciente a la alta burguesía catalana, fue sin duda uno de los poetas más importantes de la generación del 50.
Nacido en Hernani (Guipúzcoa) el 11 de marzo de 1911, Gabriel Celaya es uno de los más destacados representantes de la denominada “poesía comprometida”.
En la línea del criticismo social, aunque el tema medular es el misterio del hombre, nos encontramos con “El tragaluz”, una de las más brillantes creaciones de Buero Vallejo en el ámbito de lo trágico.
Valera, viejo y casi ciego, contempla ese paisaje humano y geográfico de su infancia andaluza.
Thomas Lanier Williams, más conocido por el seudónimo Tennessee Williams, nació en Columbus, población del estado de Mississippi, un 26 de marzo de 1911.
El día 6 de mayo de 1826, bajo el efecto de un estremecimiento de la tierra, vio la primera luz una niña que veintisiete años más tarde iba a ser Emperatriz de Francia.
Nacido en Sevilla el 21 de septiembre de 1902, su infancia solitaria dejará marcada huella en “ese hombre interior que siempre fue con él”, revelado en sus páginas autobiográficas. En 1916 escribe sus primeros poemas y en 1919 comienza la carrera de Leyes en la Universidad de Sevilla.
Cuando Mariano José de Larra, conocido bajo el seudónimo de “Fígaro”, cumplió 16 años sufrió, según se dice, un gran choque emocional que ejercerá notable influencia sobre el porvenir del escritor.
El mundo novelístico de Delibes se abre con una grave preocupación, o, mejor obsesión por la muerte, raíces que habría que buscar en el temor por la muerte prematura del padre que tuvo el Delibes niño.