“Cuando trabajo como un hombre, bebo como un hombre, cuando trabajo como un animal, bebo como un animal” (Memorias Alcohólicas, Jack London).
“Cuando trabajo como un hombre, bebo como un hombre, cuando trabajo como un animal, bebo como un animal” (Memorias Alcohólicas, Jack London).
Ese fue el decir más generalizado tras el fallecimiento de Rubalcaba, último mohicano de esa raza de hombres de Estado.
Muchas son las cosas que han cambiado en esos 66 años transcurridos desde tu entrada en la eternidad. Y en la Historia.
No estoy muy seguro, pero tengo para mí, que lo que en mis mocedades se llamaba aparentar hoy se llama postureo.
De toda la vida se ha llamado emigración a eso de dejar tu tierra y salir a buscarte la vida. O el jornal con que pagar con qué mantenerla.
Cuando un granadino piensa en los liberales, el primer nombre que le viene a la cabeza es el de Mariana Pineda.
No es la primera vez que se ha dicho que uno de los errores de las gentes de izquierdas de España ha sido dejar que nos arrebaten la patria los de derechas.
Últimamente no logro ponerme de acuerdo casi ni conmigo mismo.
Creo que la acción que voy a llevar a cabo el 28 de abril se inscribe plenamente en los supuestos que contempla nuestra actual legislación para la legítima defensa.
Tengo amigos de derechas, conservadores, católicos y tradicionales.