La de Pedro es la historia de un amor y entrega incondicionales a la montaña donde creció y donde ha vivido siempre, a la que quiso dedicar toda su vida profesional, como Guarda Mayor.
La de Pedro es la historia de un amor y entrega incondicionales a la montaña donde creció y donde ha vivido siempre, a la que quiso dedicar toda su vida profesional, como Guarda Mayor.
Como otras mujeres antes que ella, Rosa nació en una época difícil de la que, a pesar de las circunstancias que le tocó vivir, guarda muy buenos recuerdos.
José Núñez es el último representante en la Comarca de Alhama de un oficio secular, imprescindible en todas las comunidades rurales hasta hace unas décadas.
Llegamos hoy al final de un año y al comienzo de otro, que es, como suele decirse, igual que un libro en blanco, repleto de páginas por estrenar. ¿Qué nos gustaría escribir en él? ¿Hay algún nuevo ritual que desearíamos incorporar a nuestra vida diaria?
Conocemos un rincón muy especial, de la mano del reconocido fotógrafo de naturaleza Sebastián García Acosta.
Puede que José sea el último pastor que vive como se hacía en los tiempos de nuestros bisabuelos. Renunció a todo, siendo un muchacho, para dedicarse en cuerpo y alma a sus animales. La suya es una historia que merece la pena conocer.
Bautista decía que él era cabrero y no pastor, porque -"ya se sabe, no es lo mismo"- los pastores guardan ovejas, los vaqueros, vacas, y los cabreros como él y su familia, guardan cabras.
Dicen que de casta le viene al galgo. Manuel heredó el oficio -la tercera generación de resineros, tras su padre y su abuelo- antes de ser capaz de decidir por sí mismo.
Aquellos chicos no imaginaban que una de sus travesuras cambiaría para siempre la historia de su comarca; ha pasado más de medio siglo y la aventura que ellos iniciaron, continúa.
El feliz epílogo a dos historias que coincidieron una vez, en tiempo y lugar, y que el rodar de los años hizo caminar por senderos distintos.