- Detalles
 - Escrito por: Luis Hinojosa Delgado
 - Categoría: Al volver la vista atrás
 

Mañana fría del frío invierno agroneño. En la destartalada casa que hace las veces de escuela, D. Elías, con voz grave y majestuoso porte, dicta a los mayores un párrafo que narra el paso de los israelitas por entre las aguas del mar.
- Detalles
 - Escrito por: Luis Hinojosa Delgado
 - Categoría: Al volver la vista atrás
 

No voy yo todos los días al médico, pero sí, sí voy de vez en cuando. Las recetas de las pastillas del colesterol, las de la tensión, que si ahora me he resfriado… en fin, que los años no pasan en balde. Y hay que ver la de gente que hay siempre en la consulta. Pero que lo mismo hay niños, que jóvenes, que mayores.
- Detalles
 - Escrito por: Luis Hinojosa Delgado
 - Categoría: Al volver la vista atrás
 

Es verdad que esto de la crisis ha afectado también a Sus Majestades, los Reyes Magos de Oriente. Se ven ahora sus camellos con cargas bastante más livianas que las de antaño, a pesar de que, tras su paso por El Corte Inglés, intentan completar el cargamento en instituciones como Cáritas o alguna otra ONG.
- Detalles
 - Escrito por: Luis Hinojosa Delgado
 - Categoría: Al volver la vista atrás
 

Casi con toda seguridad, tú, que ahora mismo estás leyendo estas líneas, conocerás este antiguo villancico popular. Tal vez lo escuchaste cantar a la Coral Ciudad de Alhama (y quizá tuviste ocasión de oír los trinos que nuestro querido compañero Manolo “El Socio” producía con su pipillo); tal vez lo escuchaste de los “tocaores” de Santa Cruz en alguna fría noche navideña; o quizá, hace muchos años, disfrutaste de una “misa del gallo” en el pueblo, en la cual nuestro villancico no podía faltar.
- Detalles
 - Escrito por: Luis Hinojosa Delgado
 - Categoría: Al volver la vista atrás
 

¡Cuántas figuras humanas, familiares en nuestras calles y caminos de los duros años de posguerra (incluidos los cincuenta del pasado siglo), han desaparecido de nuestra querida geografía andaluza! Lo comentaba yo hace poco con mi consuegro Montero (de mi edad, más o menos) en el cumpleaños de nuestro común nieto Pablo.
    
    
        
    
    
        
                    