
A pesar de esta enfermedad que estamos sufriendo, llamada crisis, las compras en estas fechas se disparan, lo cierto es que las consecuencias del consumo excesivo estarán presentes en nuestras casas y en nuestras carteras. El consumo es el motor de nuestras economías, que a la vez es la pescadilla que se muerde la cola, sin consumo no hay demanda, sin demanda no hay venta, sin venta no hay producción y sin producción no hay ingresos. Al parecer los españoles reducirán sus gastos por cuarto año consecutivo.