Los socios de la Casa de Melilla en Málaga, disfrutaron de un día en Alhama de Granada, el pasado fin de semana, como estaba programado por su departamento de viajes, para conocer los más variados rincones de Andalucía.
Así en esta ocasión fue Alhama de Granada, ciudad milenaria que hunde sus raíces históricas en los asentamientos romanos de la antigua Artigi. Tan solo 90 Kilómetros separan Málaga de Alhama de Granada.
Tras una breve parada, por el camino, llegamos a Alhama. Se encuentra enclavado en la Sierra de Tejeda, colgado sobre un abrupto y profundo tajo sobre el río Alhaja. El topónimo Alhama es de origen árabe: al-hamma (manantial natural de agua caliente). Alhama fue una ciudad que, por su propia situación a caballo entre las provincias de Málaga y Granada, tuvo gran importancia como plaza fuerte fronteriza en las épocas del Al-Andalus.
Un guía local nos estaba esperando, en la Oficina de Turismo, para comenzar la visita a pie, descubriendo lo más destacado de esto bello pueblo.
Visita de Iglesia de Santa María de Encarnación (S.XVI). Mandada edificar por los Reyes Católicos sobre el solar de la antigua Mezquita Mayor. Este grandioso templo es de estilo gótico tardío y renacentista. Tiene una interesante portada gótica.
De especial valor es su colección de ornamentos litúrgicos bordados en plata, oro y seda.
Visita de la Iglesia Conventual de Ntra. Señora del Carmen. ( S. XV – XVIII). Antiguo convento de los carmelitas descalzos. Fue lugar de enterramiento de las familias de la aristocracia alhameña, cuyos escudos mobiliarios corona los arcos. De especial interés son dos camarines, la capilla de Jesús el Nazareno y sus murales.
La Casa de la Inquisición, de estilo gótico flamígero, fue construida en el siglo XV. Es contemporánea de la Iglesia Mayor y fue sede del Tribunal Comarcal de la Inquisición. Cabe destacar la fachada a mitad de camino entre el gótico tardío y el primer renacimiento, con una fachada de cantería rematada por una ventana geminada.
La Antigua Cárcel es un edificio público situado en las inmediaciones de la Plaza Real. Una inscripción, de 1674, en su fachada renacentista mudéjar recuerda su construcción durante el reinado de Carlos II.
Las Mazmorras o silos. Se trata de dos cavidades excavadas en la roca con una abertura, hoy tapiada, en la aparte superior (que servía como compuerta de entrada para cereales), y otra en la parte lateral, sin duda más reciente (por la que se accede a su interior actualmente. Probablemente fueron usadas como silos para grano tanto en época islámica como cristiana.
Realizamos una visita panorámica por el Cañón de los Tajos. Alhama alberga joyas históricas junto al paraje conocido como Los Tajos. Para el poeta Teophile Gautier, la ciudad estaba “colgada de una enorme roca”.
Balneario Alhama de Granada.
Ubicado a las afueras de la población, el balneario de Alhama es de gran interés monumental, ya que se encuentran perfectamente conservados los baños del siglo XII construidos por los árabes. Está situado al final de una pintoresca garganta rodeado de un paisaje de riscos, aguas y vegetación exuberante. El aprovechamiento de sus aguas termales, indicadas para afecciones traumatológicas (reuma artrosis, artritis…) y vías respiratorias, se remonta a los romanos. En su sala central surge el manantial entre arcos de herradura apuntados y bóvedas esquifadas.
Las aguas mineromedicinales que brotan en el Balneario de Alhama de Granada han sido y son fuente de salud inagotable desde la antigüedad. Desde los tiempos de los romanos hasta las últimas generaciones se han beneficiado y siguen disfrutando de las propiedades curativas de este manantial de salud. El incalculable valor terapéutico de las aguas termales junto el maravilloso entorno que rodea a la estación termal hacen de estos parajes uno de los lugares más visitado por el viajero.
Foto y texto de como lo relata en Melilla com; JUAN HERNÁNDEZ PÉREZ.