El ganadero alhameño J.A.M. acusado del hecho siempre ha manifestado que los hechos no ocurrieron como se han relatado, manteniendo otra versión sobre los mismos. (En la imagen estado en que se encontraron los animales)
El diario Granada Hoy informaba en su edición el martes 23/10/2012
Aplazado el juicio a un ganadero de Alhama por dejar morir a sus cerdos
El juicio a J.A.M., un ganadero de Alhama de Granada que se enfrenta a 13 meses de prisión por haber de dejado morir de hambre a más de un millar de cerdos, fue suspendido ayer en el Juzgado de lo Penal número 2 de la capital tras renunciar el acusado a su letrado defensor. Según fuentes del propio órgano judicial, la vista se ha fijado nuevamente para el 17 de junio de 2013, fecha en la que, salvo que ocurra algún nuevo imprevisto, J.A.M. habrá de sentarse en el banquillo como presunto autor de un delito de maltrato animal y otro de desobediencia a la autoridad. Los hechos se remontan a mayo de 2009, cuando, según el fiscal, el granjero "hizo caso omiso" a una resolución de la Junta en la que se le ordenaba que alimentara de forma urgente a los animales. J.A.M. denunció a su vez a la Junta, alegando que el abandono de los cochinos se debió a la negación de un préstamo y de ayudas por parte de la Administración.
Previa el 22/10/2012
Este lunes es el juicio de la persona acusada de dejar morir a sus cerdos
Un ganadero que dejó morir a sus cerdos se enfrenta hoy a 13 meses de prisión
El juicio al ganadero de Alhama de Granada acusado de maltrato animal por, presuntamente, haber dejado morir a sus cerdos de hambre, se celebrará hoy a las 10:30 horas en el Juzgado de lo Penal 2 de Granada, según informaron a este diario fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
La Fiscalía de Granada solicita 13 meses de prisión para el propietario de la explotación, J.A.M., al que acusa de haber dejado de alimentar a más de un millar de cerdos de su propiedad, así como de haber desobedecido a la Junta de Andalucía cuando le instó a que los alimentara tras tener constancia de la situación.
El Ministerio Público le atribuye la presunta comisión de dos delitos: uno de maltrato a animales y otro de desobediencia a la autoridad, y junto a la pena de prisión, solicita que indemnice a la Junta de Andalucía con 2.357 euros, el dinero que costó a la administración autonómica retirar los cadáveres de los porcinos, que acabaron comiéndose unos a otros.
Los hechos se remontan al mes de mayo de 2009, cuando, según el fiscal, el granjero "hizo caso omiso" a una resolución emitida por la Junta en la que se le ordenaba que "de forma inmediata y urgente, procediera a proporcionar alimentación y cuidado suficientes a los animales" de la explotación que aún estuviesen vivos, así como "a retirar los cadáveres de los animales muertos".
Como quiera que el acusado no atendió ese primer requerimiento, la Junta dictó el 20 de julio del mismo año una nueva resolución, en la que ordenó la ejecución subsidiaria para la retirada de los porcinos muertos. Finalmente, "al no facilitar la entrada el titular ni colaborar de modo alguno", la Junta de Andalucía tuvo que solicitar autorización judicial para entrar en la granja, la cual le fue concedida en agosto.
Cuando los agentes del Seprona de la Guardia Civil de Granada accedieron al interior de la explotación, hallaron los restos de los cerdos "con signos evidentes de haber existido canibalismo".
Para la Fiscalía de Granada, J.A.M. "dejó de proporcionar el alimento y cuidado a los animales que se encontraban en el recinto de la explotación ganadera de su propiedad, con conocimiento pleno de que por el lugar en el que se encontraban no existía modo alguno de que ellos pudieran conseguir el sustento necesario para vivir, condenándolos así a una muerte segura y cruel".
El granjero que será juzgado hoy, que denunció a su vez a la Junta de Andalucía, sostiene que el abandono de los cochinos se debió a la negación de un préstamo y de ayudas por parte de la Administración.
El juicio al ganadero de Alhama de Granada acusado de maltrato animal por, presuntamente, haber dejado morir a sus cerdos de hambre, se celebrará hoy a las 10:30 horas en el Juzgado de lo Penal 2 de Granada, según informaron a este diario fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
La Fiscalía de Granada solicita 13 meses de prisión para el propietario de la explotación, J.A.M., al que acusa de haber dejado de alimentar a más de un millar de cerdos de su propiedad, así como de haber desobedecido a la Junta de Andalucía cuando le instó a que los alimentara tras tener constancia de la situación.
El Ministerio Público le atribuye la presunta comisión de dos delitos: uno de maltrato a animales y otro de desobediencia a la autoridad, y junto a la pena de prisión, solicita que indemnice a la Junta de Andalucía con 2.357 euros, el dinero que costó a la administración autonómica retirar los cadáveres de los porcinos, que acabaron comiéndose unos a otros.
Los hechos se remontan al mes de mayo de 2009, cuando, según el fiscal, el granjero "hizo caso omiso" a una resolución emitida por la Junta en la que se le ordenaba que "de forma inmediata y urgente, procediera a proporcionar alimentación y cuidado suficientes a los animales" de la explotación que aún estuviesen vivos, así como "a retirar los cadáveres de los animales muertos".
Como quiera que el acusado no atendió ese primer requerimiento, la Junta dictó el 20 de julio del mismo año una nueva resolución, en la que ordenó la ejecución subsidiaria para la retirada de los porcinos muertos. Finalmente, "al no facilitar la entrada el titular ni colaborar de modo alguno", la Junta de Andalucía tuvo que solicitar autorización judicial para entrar en la granja, la cual le fue concedida en agosto.
Cuando los agentes del Seprona de la Guardia Civil de Granada accedieron al interior de la explotación, hallaron los restos de los cerdos "con signos evidentes de haber existido canibalismo".
Para la Fiscalía de Granada, J.A.M. "dejó de proporcionar el alimento y cuidado a los animales que se encontraban en el recinto de la explotación ganadera de su propiedad, con conocimiento pleno de que por el lugar en el que se encontraban no existía modo alguno de que ellos pudieran conseguir el sustento necesario para vivir, condenándolos así a una muerte segura y cruel".
El granjero que será juzgado hoy, que denunció a su vez a la Junta de Andalucía, sostiene que el abandono de los cochinos se debió a la negación de un préstamo y de ayudas por parte de la Administración.