El único gol del equipo jayenero fue anotado por Ismael, que momentos después tuvo que salir del campo con molestias. Jayena 1 - 5 Dehesas de Guadix.
El equipo jayenero no supo posicionarse desde el inicio del encuentro, y en ningún momento fue capaz de aparecer en el campo, deambuló por el terreno de juego, cometiendo una sucesión de errores interminables, que hicieron al equipo contrario el Dehesas de Guadix, abrir una brecha ancha en el marcador hasta llegar al definitivo 1-5, que cerró el resultado.
A pesar de la abultada derrota, es justo reconocerle al equipo que nunca tiró la toalla, a pesar de que el desánimo y la desesperación hicieron mella en los jugadores. El nerviosismo por dar un buen espectáculo ante el reencuentro con su afición, les hizo cometer errores pueriles e inocentes, que le fueron minando en su estado de juego durante todo el encuentro. Pues el equipo rival tampoco hizo gran cosa, ni dominó de forma clara.
En la primera mitad el equipo jayenero no fue capaz de llegar con peligro en ninguna ocasión al área contraria. Pero el rival, que desplegó un potente juego físico, tampoco consiguió consolidar un dominio sereno del juego, aunque igualmente no lo necesitó, ya que aprovechando la debilidad del juego local trallazo a trallazo desde fuera del área consiguió sentenciar el partido.
En el segundo tiempo afloró tímidamente el juego de los pupilos de Izco, pero fue más un espejismo que otra cosa. Un Izco que fue expulsado en su primer partido oficial como entrenador del Jayena CF, y que tuvo que ver la segunda parte desde la grada.
En cuanto a la actuación del trío arbitral (formado por los linieres Isabel Barba Pérez y Ángel Casado Martin, actuando como árbitro Miriam López), se puede considerar como aceptable en general, aunque cometieron algunos errores de bulto como el tercer gol del Dehesas de Guadix, en el que el balón había salido fuera del campo claramente, y no fue señalado, asimismo hubo algún fuera de fuego polémico y un posible penalti a favor de los locales, también se reclamó, por parte de los jugadores del Jayena CF, mano en la consecución del cuarto gol del Dehesas de Guadix.
Hay que tener asumido que el arbitraje es otra circunstancia más del partido, que unas veces favorece y otras perjudica, pero en honor a la verdad en esta ocasión, el buen o mal arbitraje no fue la causa de la derrota del Jayena CF, más tuvo que ver la poca garra, y el pobre juego exhibido por este en su derrota.
Y dicho lo anterior justo es reconocer el corazón y las ganas puestas por todo el equipo, en un día para olvidar, en el que se vislumbraron destellos que hacen albergar esperanza de que llegarán partidos y días mejores. A pesar de todo el equipo merece un voto de confianza, posiblemente esta deba de ser una temporada de consolidación y afianzamiento, de transición al fin y al cabo, para un equipo que ha vuelto tras dos temporadas de ausencia bastante renovado.
