Con la derrota ante el Ciudad Guadahortuna en la antepenúltima jornada de la fase de ascenso, el Jayena CF se despide de la posibilidad del ascenso a 1ª provincial. (Ciudad Guadahortuna 4-0 Jayena CF).
Con una contundente derrota ante un Ciudad Guadahortuna implacable, el Jayena CF ve truncadas sus esperanzas de conseguir un anhelado ascenso, tras haber realizado posiblemente la mejor temporada de su corta historia. Un sentimiento de desaliento, congoja y rabia sumado a indignación, a coraje y arrebato de impotencia ha inundado a la afición jayenera, que ha visto como en pocas jornadas se le esfumaba el sueño del ascenso, en una temporada en que todo parecía y se sentía propicio.
El resultado habla por si solo en cuanto al partido
Tras haber realizado una excelente liga regular, no sin pocos esfuerzos por parte tanto del equipo, como del cuerpo técnico, apoyados en todo momento por una imponderable junta directiva, sin nada que reprocharles a ninguno de los pilares del equipo; la fase de ascenso se prometía prospera y favorable. Se había conseguido a pesar de las críticas desfavorables de ciertos sectores externos al Club un afianzamiento muy fortalecido del Club en si mismo. Pero el éxito es un ser con vida propia, con el que hay que aprender a vivir, y a veces exige un precio que no refleja el valor real de aquello que se ansía, y ciega y ofusca al incauto.
Así se ha llegado a la situación de que prácticamente al inicio de la fase de ascenso, el Club jayenero, se ha quedado sin junta directiva, y sin entrenador, consecuencia inmediata: anarquía, y muerte táctica del equipo. Lo que ha ocurrido dentro del Club para alcanzar esta situación solo los implicados lo saben, pero evidentemente el desarrollo de los acontecimientos acaecidos en toda la fase de ascenso, con respecto al juego desarrollado por el equipo jayenero, deja clara al menos una cosa, que la ausencia tanto de entrenador como cuerpo técnico en un equipo de futbol, aun en las categorías en las que nos movemos, son irremediablemente causas del mas absoluto fracaso. Que sin disciplina, método, pauta, orden y una conducta responsable no se va a ningún lado, a no ser que suene la flauta.
Se ha perdido una excelente oportunidad para dar un empuje profundo al deporte en Jayena en general, aprovechando el tirón futbolístico, y lo que ello significa, por parte sobre todo de las instituciones locales que nos gobiernan,( y sus representantes), ahogadas por la crisis, e incapaces de reaccionar, mas que para conservar su sillón.
Solo cabe esperar en pos y merced de la afición jayenera en lo que al futbol se refiere que el Jayena CF no desaparezca, que el club pueda encontrar un patrocinador fuerte, que le permita afrontar con garantías la próxima temporada, que el apoyo institucional se produzca con neutralidad y nobleza.
Aún quedan dos jornadas de liga de ascenso que se deben jugar, es posible que por alguna carambola el Jayena CF pueda ascender. Pero pase lo que pase, esta será ya una temporada para la historia del Jayena CF.