Jayena abre su tiempo de Navidad con el encendido de su árbol navideño de crochet

Unas 20 mujeres, han confeccionado este símbolo navideño, que se puede ver en Jayena desde el ocho de diciembre hasta mediados de enero.

 Este singular árbol se ha instalado en la intersección de las calles Granada, Puerta Granada, Avenida Mediterráneo y Tesoro, en el mirador ubicado en dicho lugar.

Al encendido del árbol asistieron además del alcalde, Antonio Olmos Reyes, y parte de ediles de la corporación municipal, un nutrido grupo de vecinas, y vecinos, entre los que se encontraban las mujeres autoras del manto tejido. El encendido tuvo lugar pasadas las dieciocho horas quince minutos de la tarde del viernes 8 de diciembre.  Los asistentes fueron obsequiados con dulces propios del momento, (mantecados, polvorones, roscos, etc.) regados con los típicos licores navideños. Han sido aproximadamente unas 20 mujeres voluntarias, las que han participado tejiendo el recubrimiento con esta técnica de tejido a mano en la que se usa un ganchillo o gancho para formar cadenas con hilos, denominada crochet. Han utilizado entre 150 y 160 ovillos de hilos. Se pueden usar hilos muy finos con ganchos muy delicados, hasta estambre grueso con ganchos igualmente gruesos. En todo caso un trabajo arduo y dificultoso, no exento de paciencia. La idea inicial partió de la Asociación de Mujeres de Jayena, pero a la iniciativa se fueron uniendo otras mujeres voluntarias, expertas y amantes del crochet en el pueblo.

 El árbol de Navidad, quizás el símbolo navideño más extendido hoy en día, va ganando terreno a otras tradiciones como los belenes, y no hay pueblo que ya no tenga uno. En la villa de Jayena este año un grupo de sus vecinas, han querido dar un toque original y diferente, al árbol de Navidad municipal, y lo ha recubierto de un manto de crochet, logrando dar un toque singular y propio. Saben que no es el más alto del mundo, (cuenta con una altura aproximada de 5 metros), ni el que más luces contiene, pero está lleno, de afecto, entusiasmo, solidaridad, y sobre todo mucho cariño.