Tras dos años sin Romería los jayeneros recuperan su fiesta más popular y querida el sábado 11 de junio.
Por este motivo todo hacía prever que se iba a producir una gran afluencia de gente a la fiesta romera con más renombre de la Comarca de Alhama. Si bien la afluencia de gente que se ha acercado a disfrutar de la fiesta ha sido masiva, también es cierto que el hecho de que la organización ha sido muy estricta en el uso de del fuego, que no se ha permitido; ello ha supuesto que un gran número de vecinos haya optado por no ir. De esta manera se ha dado la paradoja, de que probablemente había en la zona recreativa del Bacal, más presencia de forasteros y foráneos, sobre todo venidos de los pueblos de la Comarca, pero también de la capital y otras provincias, que vecinos.
Sea como fuera, los Romeros se han esforzado, realizando un gran trabajo, para lograr que todo el programa previsto por ellos, se fuera cumpliendo. Y han puesto todo su cariño y empeño en ello. En lo que respecta a las actividades programadas y fiesta en si, en la tarde del viernes destacar la actuación flamenca a cargo del grupo "Las Farrucas de Verónica Ramal y el grupo de baile de Silvia Ohen, que como siempre que actúan en Jayena, estas dos agrupaciones, arrancan pasión y aplausos por doquier. En cuanto al sábado a eso de las once de la mañana tras la misa de rigor y coger fuerzas con chocolate, dulces, y algún aguardiente, las carrozas adornadas por los vecinos, como es tradición, iniciaban el camino de la comitiva romera hacia el área recreativa "El Bacal", donde la fiesta campera en su estado puro se desarrollaría hasta la madrugada. Muchos han sido los vecinos que a las nueve de la mañana del domingo aun continuaban en el área recreativa descansando y recogiendo bártulos para la vuelta.
Muchos son los vecinos de Jayena, que piensan que, a tiempos nuevos, soluciones nuevas, en lo concerniente al futuro de la fiesta de la Romería. Se percibe que se hace necesario un cambio en cuanto al futuro y conservación de la fiesta más querida para los jayeneros. No en vano esta fiesta siempre ha sabido evolucionar, con los tiempos. Y corren tiempos en los que adaptar la Romería al desafío de sobrevivir hoy día conservando su espíritu original, enfrentada a las leyes de las diferentes administraciones, como la prohibición del uso del fuego, en alto riesgo de incendios; supone un gran reto para los vecinos de Jayena. Llegar a una solución, solución que existe, si se quiere buscar es una necesidad imperiosa. Una solución sostenible entre la fiesta y la conservación del patrimonio natural que Jayena posee, y que ha de conservarse a toda costa, sí o sí. Lo dicho, tiempos nuevos, soluciones nuevas, porque evolución es coexistir.