La madre de la pequeña, de 10 años, entrega a su hija en cumplimiento de un auto judicial del Juzgado de Torrox, ya que la custodia es del padre.
José Luis Franco pudo reencontrarse este domingo con su hija, de 10 años, después de dos meses sin verla. Este vecino de Nerja había denunciado que la madre de la pequeña incumplió el pasado 16 de agosto la orden judicial que le obligaba a entregarle a la menor, ya que él tiene la custodia legal desde 2011. El progenitor recogió a la niña en el domicilio de la madre en la localidad más oriental de la provincia y se trasladó hasta Jayena, en Granada, donde reside y está escolarizada la pequeña, quien no ha asistido a clases desde el comienzo del curso.
«Estoy muy contento por poder volver a estar con mi hija, llegué a temer con perderla para siempre si la madre se la llevaba fuera de España, ya que ella es de Venezuela y la pareja que tiene ahora es de Estados Unidos», explicó este nerjeño, en declaraciones a SUR, desde el vehículo que conducía en dirección a la pequeña localidad granadina de Jayena.
Franco lamentó que la jueza no tomara medidas el pasado agosto cuando le comunicaron que la madre no había entregado a la niña en la fecha acordada. «Hemos tenido que hacer público el caso porque la tenía retenida y temía que pudiera llevársela del país. Menos mal que se le retiró el pasaporte por orden judicial», dijo.
Ahora la pequeña vivirá en Jayena junto a su progenitor, quien dijo que cumplirá «como siempre lo he hecho» el régimen de visitas con la madre, que está establecido en dos tardes de la semana y los fines de semana alternos. «Ella tendría que venir a recogerla, pero como no lo hace, soy yo el que la traigo a Nerja», aseguró.
El abogado de Franco, Ramón Porras, detalló que durante la primera quincena de agosto, la mujer remitió a su expareja varios mensajes de mensajería instantánea en los que manifestaba que no iba a entregar a la niña «porque ésta quería vivir con ella».
Acusaciones de maltratador
Porras afirmó que esta mujer, «siguiendo el ejemplo de otros supuestos mediáticos recientes, se ha acogido al impresentable tribunal de las redes sociales, con total desprecio y faltando descaradamente a la verdad». En este sentido, señaló que en sus redes sociales, ha acusado a su defendido de «maltratador» y ha colgado mensajes en los que «confunde denuncias con sentencias absolutorias de mi cliente».
Asimismo, el letrado detalló que la mujer utiliza «un lenguaje injurioso» contra jueces y fiscales, a los que atribuye la desprotección de la menor, al tiempo que afirma que «en este país no se protegen los derechos de los menores».
Asimismo, el letrado detalló que la mujer utiliza «un lenguaje injurioso» contra jueces y fiscales, a los que atribuye la desprotección de la menor, al tiempo que afirma que «en este país no se protegen los derechos de los menores».