14 de abril, día de la República Española

  Cuando se cumplen 83 años de la proclamación de la II República Española (14-abril-1931), cada vez más son las voces que se unen al clamor de una tercera, máxime con en el actual panorama político.

 Ahora que tanto se habla de los Pactos de la Moncloa, con la reciente muerte de uno de sus artífices, Adolfo Suárez, sería bueno recordar que los principales actores de aquellos pactos una de las cosas que acordaron fue el acatar la monarquía, aceptar la bandera bicolor e impedir que se hablara de cuestionar la forma de Estado (el monárquico), entre otras cosas.

 Sin embargo el anacronismo histórico de instaurar una monarquía, impuesta por Franco, en el último cuarto del siglo XX cada vez tiene menos adeptos, y en aquel momento lo justificaron como de evitar nuevamente un enfrentamiento, cuando se abogaba por lo que dieron en llamar la "reconciliación nacional", cosa que hasta la presente no se ha producido, ya que no hay reconciliación para los que yacen en cunetas por imposición de los herederos del ideario de los que dieron el golpe de estado contra la democracia en 1936.

 Seguimos teniendo como Jefe de Estado al que designó Franco para el cargo como su sucesor, y tras estos 39 años desde el óbito del dictador, no parece que sea una idea descabellada que se plantee de forma civilizada la cuestión de la forma de Estado que quieren los españoles, y que se abra un debate social al respecto en el que por supuesto caben todas las opiniones.

 Si parte del grado de corrupción que habita en algunos sectores políticos es culpa de no tener limitados el número de mandatos no digamos ya cuando el cargo es vitalicio y, además, hereditario, en este caso “todo el monte es orégano”, como ha demostrado la reciente historia monárquica amparada por los grandes partidos.

 La República, que no es de izquierdas ni de derechas, y en este caso recuerdo cómo los que estaban entonces en contra del rey era precisamente la derecha de la época que incluso se opuso a la actual Constitución por mucho que hayan hecho ahora de ella el evangelio, nos acerca más a la racionalidad democrática, a hacernos a todos más iguales (por supuesto también ante la ley) y es un soplo de aire fresco que se renueva cada equis tiempo, porque el Jefe del Estado también tiene que dar cuenta ante los ciudadanos y tiene que ganarse el cargo, y no como ahora.

 Con esta normalidad, que no tiene porqué asustar a nadie, un grupo de ciudadanos (que no quieren ser súbditos) celebraron el día de la República en Alhama, y, en lugar de hacerlo este lunes, lo adelantaron al domingo por aquello de poder encontrarse un día festivo, y al menos dejar patente que en el entendimiento de una sociedad más justa también está el derecho a decidir quién debe ser el Jefe del Estado.

 También, y como la idea avanza, cada vez se ven más banderas tricolores adornando pechos y fachadas, en esta triple simbología de libertad, igualdad y justicia.