El equipo siempre fue durante aquel tiempo, prácticamente hasta casi su último año, en progresión y tras conseguir quedar finalista, participó en los campeonatos nacionales, que se celebraron en Burgos.
Sí, fue un equipo excepcional. Con Mari Carmen Serrano, Charo Martel, Ichi Velasco, Hitos Pérez, Carmen Ramos, Tere Pérez, Mari Carmen Fernández, Mari Ruiz, Manoli Cerezo y Maruchi Espejo. Esta última, como ya adelantamos, llegó a ser la mejor jugadora de balonmano de toda la provincia granadina, como Mari Carmen Serrano del Pino, la mejor portera de la década. Eso sí todas contaron con buenas e inolvidables entrenadoras, Paqui Díaz y Trini Molina.
Sinceramente, lo que no esperábamos, me refiero a Juan Cabezas, director de este medio, y al autor de esta sección de “Alhama Comunicación”, es que la repercusión de esta historia, ya en su primer capítulo, tuviese la extraordinaria aceptación que ha tenido. Sí, es lógico que así suceda, han pasado más de cincuenta y ocho años de aquel primer partido y, a partir de ahí, los años de historia que alcanzó de 1964 a 1971, siete fructíferos y singulares años de existencia de este equipo de deporte femenino prestigiando y renombrando a Alhama.
Creo, que lo que ha sucedido es que el ejemplo que supuso, al darse en el tiempo que se dio y lo que lucharon todas para que así fuese, ha calado plenamente, una vez más como ejemplo de entrega, coraje y esfuerzo para llevar algo loable a cabo y alcanzar el cenit: participar y hasta ganar campeonatos provinciales, participar en competiciones regionales y nacionales, con el nombre de Equipo de Balonmano Femenino de Alhama, para ellas “Las chicas o niñas de Alhama”.
Dignas finalistas a nivel nacional
El equipo siempre fue durante aquel tiempo, prácticamente hasta casi su último año, en progresión y tras conseguir quedar finalista, participó en los campeonatos nacionales, los que se celebraron en Burgos, “Inolvidable viaje a Burgos”, como nos recalca Maruchi. Ya tenían la posibilidad para un entrenador, fue elegido Manolo - que después de casaría con Paquita, la instructora, la que con Trini también fueron excelentes entrenadoras-, él les acompañó en el viaje que efectuaron en el coche de Ignacio y la furgoneta de Sergio. Salieron por la noche de Alhama, “hicieron escala en Madrid”, para descansar y almorzar, cosa que fue a base de las meriendas que llevaban preparadas y que se las comieron, ni más ni menos, que en el mismísimo en el Parque de El Retiro.
“Seguimos hasta Burgos y allí todo fue diferente -nos comenta Maruchi-: hoteles Norte Londres, de no sé cuántas estrellas, un buen comedor, muy buenas habitaciones, todo un lujo al que no estábamos acostumbradas pues siempre parábamos en la pensión” Arenas”, en algún colegio como por ejemplo San Juan de los Reyes. Eso sí, cuando jugábamos el “Trofeo Corpus” nos alojábamos en el hotel “Casablanca” o el “Brasilia” que entonces eran algo extra”.
Nota curiosa en la organización de este importante viaje para todo el equipo de balonmano alhameño, fue que cuando fueron a Burgos, la Sección Femenina les prestó unos bolsos de viaje, con idea que se viera que era un equipo, todas iguales, que después, pensamos que se les había de haber dejado como premio por participar en aquel Campeonato Nacional, tuvieron que devolver.
Maruchi, siendo muy fiel al equipo alhameño, por el que tanto se entregó y tan buenos resultados consiguió junto con sus compañeras de equipo, con verdadera madera de líder deportiva, tuvo importantes equipos de balonmano que, destacando en nuestra provincia, se quisieron hacer con sus servicios. Sin hacerle competencia alguna al equipo de su Alhama y amigas y compañeras, en dos ocasiones jugó los campeonatos del Club Medina y EFF. Participaba como miembro del Club Medina de Granada. A esos viajes iban juntas, en autobús, el equipo de baloncesto y el de balonmano, siendo elevada la participoación de chicas en estos campeonatos.
Concretamente, en el año 1965 este campeonato se celebró en Galicia, exactamente en La Coruña y al año siguiente, 1966, se celebró en Zaragoza. En las dos ocasiones hicieron parada especial en Madrid. En la capital de España se quedaban dos noches y un día, el que dedicaban en su totalidad a conocer la ciudad incluyéndose hasta un paseo en barca en por El Retiro.
En La Coruña estuvieron alojadas en la Universidad Laboral. Este fue el primer viaje largo para Maruchi y también, resultó inolvidable, aunque en todo momento echo de menos a sus amigas del equipo alhameño, sus compañeras de siempre.
En La Coruña se jugó el campeonato en “El Riazor”, el gran estadio del equipo de fútbol de La Coruña. Siendo ello una experiencia muy buena, Visitaron la catedral de Santiago de Compostela, coincidiendo el año santo, con lo que ello supone cada vez que se celebra. Y en Zaragoza hicieron la ofrenda a la Virgen del Pilar que en esta ocasión se efectuó una ofrenda leída por una gran amiga e inolvidable primera presentadora del I Festival de Alhama, en 1966, mi amiga y después mi compañera como periodista y abogada Piedad Alarcón, a la que siempre la llamábamos Pity Alarcón, persona excepcional que desde “La Voz de Granada”, desde muy joven, llegó a dirigir Radio Nacional en Andalucía. Allí se alojaron en un colegio de monjas.
Estuvieron invitados por los cadetes de la Academia General Militar a una fiesta, lo que lógicamente les hizo a las chicas mucha ilusión. Lógicamente, personas jóvenes, alegres y extrovertidas, llevaban sus guitarras y castañuelas, así que en cualquier momento montaban sus fiestas particulares a las que se unían otros grupos de diversas partes de España. Maruchi dejó bien alto el nombre de Alhama en estos encuentros nacionales.
José Luis de Mena, también en esto por Alhama
Se conserva una información deportiva, que Maruchi tiene en sus cuaderno-revista sobre la historia del equipo femenino alhameño y tiene muy presente, recordándolo con afecto y agradecimiento, sobre un interesante artículo que hace especial referencia a mi siempre querido e inolvidable amigo y maestro en periodismo José Luis de Mena y Mejuto -gracias a él me incorporé yo a “Sol de España” en Málaga, lo que jamás he dejado ni dejaré de agradecerle como bien pongo de manifiesto cada vez que tengo oportunidad de ello y ya van varios cientos en estos últimos 55 años- publicado por “Ideal” en su colección “Granada un siglo de historia deportiva”, en la sección de Balonmano, con el título “Las niñas de Alhama”, y que textualmente, con una de las ilustraciones dedicada al equipo de Balonmano de Alhama, dice lo siguiente:
“José Luis de Mena fue un periodista que trabajó muchos años en IDEAL y que se enamoró de una alhameña. Se casó con ella y adoptó a Alhama como su patria chica.
Fui amigo de Mena y estaba convencido que entre muchos y variados saberes no figuraba el deporte. Por eso me extrañé y me alegré tanto al repasar el Ideal de 27 de Marzo de 1969 y encontrarme con la sorprendente historia del balonmano en Alhama, escrita por José Luis de Mena. Y más sorpresa todavía al leer el texto y saber que “ quizás fuera el que escribiera estas líneas -o sea Mena- el que metiera este deporte entre los niños durante el verano de 1962” Se demuestra una vez más que Mena era capaz de cualquier cosa por su querida Alhama; hasta de sembrar la semilla del balonmano.
Pero hay que esperar hasta 1967 para que gracias a la omnipresente instructora de la Sección Femenina, Paquita Díaz, el balonmano femenino alhameño surja poderosamente para proclamarse campeón provincial de mayores ante el Sexitano almuñequero, creado también por Paquita.
La cantidad y calidad de las jugadoras de Alhama les permite en enero de 1968 sumar a el campeonato anterior el de las juveniles que no dejan títere con cabeza y quedan invictas en el torneo provincial.
Otra vez campeonas las alhameñas
El Medina de Granada gana el torneo provincial de 1968 pero en el 69 nuevamente las alhameñas triunfan rotundamente a escala provincial y participan en el primer intento de liga nacional. Ya no es Paquita Díaz -que se ha casado y vive en Cataluña- y la entrenadora es Trini Molina. Gracias a José Luis de Mena sabemos los nombres de las jugadoras: Mari Carmen Serrano del Pino, Mari Luz Navarro, Ichi Velasco, Juani García, Hitos Pérez, Maruja Martínez, Manoli Cerezo, Tere Pérez, Mari Ruiz, Maruchi Espejo y Charo Martel.
“En esta relación de nombres se producen algunos errores no correspondiendo todos los nombres, ya que los componentes del equipo que aparecen en la respectiva foto eran los siguientes de izquierda a derecha: Hitos Pérez, Carmen Ramos, Mari Ruiz, Paquita Díaz (entrenadora), Mari Carmen Fernández, Tere Pérez, y Maruchi Espejo (de pie), Ichi Velasco, Charo Martel, Mari Carmen Serrano y Manoli Cerezo.
Y siguen sin disponer de un campo adecuado aunque el alcalde les ha prometido terminar lo más pronto posible -en cuanto paren las lluvias- el magnífico campo que se está construyendo en el pueblo.
La falta de cancha obliga a jugar en Granada y en el Estadio de la Juventud disputan los partidos de casa de esta liga a doble partido con Málaga, Melilla y Almería. Fue una lástima porque había hechuras de equipo pero el poco entrenamiento fue decisivo. La primera vuelta es victoriosa y el 24 de marzo de 1969 marca el cenit con el rotundo 14-8 sobre las favoritas del Almería. Luego los defectos se acusaron y los últimos partidos fueron un desastre con derrotas cuantiosas en Málaga y Almería.
En el mes de junio regresan las chicas a Granada para disputar y ganar el II Trofeo Corpus de balonmano femenino. Aquí demostraron una clara recuperación y consiguieron entusiasmar al público por su buen juego. Y muchas de ellas fueron incluidas en la selección provincial granadina que ganó en una doble confrontación con las jienense con motivo de las fiestas de la Virgen de la Capilla. La figura fue Mari Carmen Serrano la mejor portera de la década.”
El último partido que jugaron “Las niñas del balonmano de Alhama”, las que comenzaron su primer encuentro con el equipo de las chicas de Salobreña, aquella feria de San Juan de 1964, venciendo, fue en septiembre de 1971, contra el equipo femenino de “las chicas de Peñuelas”, ganando también las alhameñas y dejando bien patente su clase y categoría, aunque ya sería para nuestra Historia. No volvería el equipo a jugar más, los años, siete, habían pasado y ya, a unas y a otras, les era más difícil poder prestar la gran atención que entregaron a conseguir el mejor equipo femenino de balonmano de esta tierra que tan buen nombre nos dejaron para siempre, desde hace, la friolera de bastante más de medio siglo y un lustro.
Por todo ello a todo el equipo, comenzando por las que prácticamente lo constituyeron durante toda su historia, sin olvidarnos de las que en más de una ocasión se sumaron a la tarea y aportaron su esfuerzo y entrega, muchas gracias, hicisteis una gran historia y distes un hermoso ejemplo como personas y como deportistas alhameñas. Aquí queda también para siempre, con nuestra admiración y gratitud imperecedera a todas y a cada una de vosotras.
En la prensa, una de las veces que fue campeón provincial, con uno de los trofeos que consiguió el equipo, correspondiente al “II Trofeo Primavera”