La realidad que vivimos, y que no califico, porque todo sabemos cómo es, ni describo, que para eso basta un vistazo a la prensa, es fruto de unas políticas dictadas por entes no votados por nosotros (Imagen de Jonh Maynard Keynes).
No es la primera vez que aludo en estas miradas a eso que ahora se da en llamar "la troika" y sus gestores que imponen al mundo casi entero las política neoliberales de la Escuela de Chicago, que son las que nos han llevado a que tenga que ser la Junta de Andalucía, por ejemplo, la que garantice el derecho a tres comidas diarias a los niños que lo precisen.
No sé si mis lectores han visto alguna vez la serie South Park, en la cual uno de los personajes muere en cada capítulo ante lo cual sus amigos, dicen " ¡Qué hijos de puta, han matado a Kenny!"; pues los miembros de la troika ya hace tiempo que mataron a Keynes, economista británico impulsor de las políticas del estado de bienestar.
Desde la simbólica orfandad en que nos deja la muerte de las ideas de Keynes, he leído un par de noticias esperanzadoras. Una es que la UGT propone la jornada de 35 horas semanales y un día más de fiesta a la semana. También la jornada de trabajo de ocho horas era una utopía en principio. Ahí está la idea lanzada, las ideas en principio son solo ideas y el el consenso, el acuerdo entre todos, los que las hace reales.
La segunda noticia es una moción del Grupo Mixto del Senado hecha a la Mesa del Senado el día 1 de abril de 2013 y firmada por los senadores de Izquierda Unida José Manuel Mariscal Cifuentes y Jesús Iglesias Fernández y firmada también por la portavoz del Grupo Mixto Amelia Salanueva Murguialday.
En dicha moción se insta al gobierno a:
"1.- Elaborar un informe de viabilidad económica y financiera, así como los beneficios sociales, de la propuesta de la implantación de la Renta Básica en el Reino de España.
2.- Implantar la Renta Básica como garantía del derecho a la existencia, con las modificaciones oportunas en el sistema tributario.
3.- Corresponsabilizarse institucionalmente con las garantías financieras que aseguren la puesta en marcha de la Renta Garantizada de Ciudadanía en aquellas comunidades autónomas que decidan su implantación .asegurando su viabilidad."
En el mismo documento la Renta Básica se define como: " Un ingreso pagado por el estado a cada miembro de pleno derecho de la sociedad o residente, incluso si no quiere trabajar de forma renumerada, sin tomar en cuenta si es rico o pobre .o dicho de otra forma, independientemente de cuales puedan ser las otras posibles formas de renta, y sin importar con quien conviva"
La iniciativa no tuvo ninguna repercusión mediática, aquí dejo el enlace para acceder al PDF con el texto íntegro de la moción: http://www.senado.es/web/expedientdocblobservlet?legis=10&id=33987
Con la aplicación de una Renta Básica para todos, del 50 por ciento de la renta per capita en España, que es la propuesta, se puede conseguir que todos sean libres para decidir qué proyecto de vida quieren llevar a cabo, sin la urgente necesidad de preocuparse por la subsistencia. La propuesta tiene sus defensores y sus detractores, como todas, pero a mi me parece una utopía por la que vale la pena luchar, por conseguir la libertad para votar libremente a quien libremente desee que sea mi Jefe de Estado. Aunque esto ya son dos utopías, que van unidas, eso sí.
Ahí queda lanzada la idea para un debate.
No sé si mis lectores han visto alguna vez la serie South Park, en la cual uno de los personajes muere en cada capítulo ante lo cual sus amigos, dicen " ¡Qué hijos de puta, han matado a Kenny!"; pues los miembros de la troika ya hace tiempo que mataron a Keynes, economista británico impulsor de las políticas del estado de bienestar.
Desde la simbólica orfandad en que nos deja la muerte de las ideas de Keynes, he leído un par de noticias esperanzadoras. Una es que la UGT propone la jornada de 35 horas semanales y un día más de fiesta a la semana. También la jornada de trabajo de ocho horas era una utopía en principio. Ahí está la idea lanzada, las ideas en principio son solo ideas y el el consenso, el acuerdo entre todos, los que las hace reales.
La segunda noticia es una moción del Grupo Mixto del Senado hecha a la Mesa del Senado el día 1 de abril de 2013 y firmada por los senadores de Izquierda Unida José Manuel Mariscal Cifuentes y Jesús Iglesias Fernández y firmada también por la portavoz del Grupo Mixto Amelia Salanueva Murguialday.
En dicha moción se insta al gobierno a:
"1.- Elaborar un informe de viabilidad económica y financiera, así como los beneficios sociales, de la propuesta de la implantación de la Renta Básica en el Reino de España.
2.- Implantar la Renta Básica como garantía del derecho a la existencia, con las modificaciones oportunas en el sistema tributario.
3.- Corresponsabilizarse institucionalmente con las garantías financieras que aseguren la puesta en marcha de la Renta Garantizada de Ciudadanía en aquellas comunidades autónomas que decidan su implantación .asegurando su viabilidad."
En el mismo documento la Renta Básica se define como: " Un ingreso pagado por el estado a cada miembro de pleno derecho de la sociedad o residente, incluso si no quiere trabajar de forma renumerada, sin tomar en cuenta si es rico o pobre .o dicho de otra forma, independientemente de cuales puedan ser las otras posibles formas de renta, y sin importar con quien conviva"
La iniciativa no tuvo ninguna repercusión mediática, aquí dejo el enlace para acceder al PDF con el texto íntegro de la moción: http://www.senado.es/web/expedientdocblobservlet?legis=10&id=33987
Con la aplicación de una Renta Básica para todos, del 50 por ciento de la renta per capita en España, que es la propuesta, se puede conseguir que todos sean libres para decidir qué proyecto de vida quieren llevar a cabo, sin la urgente necesidad de preocuparse por la subsistencia. La propuesta tiene sus defensores y sus detractores, como todas, pero a mi me parece una utopía por la que vale la pena luchar, por conseguir la libertad para votar libremente a quien libremente desee que sea mi Jefe de Estado. Aunque esto ya son dos utopías, que van unidas, eso sí.
Ahí queda lanzada la idea para un debate.