El alumnado del CEIP Conde de Tendillas sustituye por un día las típicas clases de matemáticas y lenguaje por toda una serie de actividades encaminadas a conocer y preparar el carnaval, así como mecerse y cantar las canciones de la candelaria.
El alumnado del CEIP Conde de Tendillas llegaron el viernes uno de febrero con las pilas bien cargadas, ya que les esperaba una mañana de lo más ajetreada que comenzaba con toda una serie de actividades encaminadas a la preparación de la fiesta más popular y característica de su pueblo: el carnaval.
Dibujo de disfraces, charlas sobre la peculiaridad de esta fiesta y su significado, dibujo de caretas y ensayo de las coplillas que el lunes cuatro de febrero deberán entonar en el escenario del Paseo del Cisne, así como los últimos remates de los disfraces que las madres han confeccionado en el taller de manualidades, en el que se reúnen una vez a la semana, hizo que las clases de ese día desprendieran un colorido muy especial.
Y para rematar el día, sobre las una de la tarde salían desbordados y a la carrera para ver quién conseguía ser el primero en ponerse en la fila para mecerse en algunos de los columpios que el profesorado había colgado por el patio del colegio.