Los karatekas alhameños van a entrenar a la playa como parte de su preparación, correr por la arena, y potenciar las técnicas con los kimonos mojados, así como endurecer las zonas de golpeo con ejercicios variados.
Nos comentan los participantes la gran resistencia que opone la arena para desplazarse con velocidad y que los karateguis mojados son el doble de pesados. Aseguran que quieren repetir la experiencia más a menudo.
Anecdóticamente las personas que paseaban se sintieron sorprendidas por la exhibición, al tiempo que comentaban lo importante y el bien que hace el deporte en todas las edades y especialmente en los jóvenes.
... y también en la nieve.