Terminó el taller de flamenco impartido por la Escuela de Flamenco Cultural Garrotín



 El miércoles 6 de noviembre con un baile por tangos de Granada interpretado por la bailaora Silvia Lozano acompañada al cante por Sergio Cuesta, al toque por Vicente Márquez “Tente” y a las palmas por los asistentes al taller, terminó el taller sobre el flamenco granadino.




 Durante cuatro semanas ha tenido lugar en el salón de actos del ayuntamiento de Alhama un taller sobre flamenco, especialmente flamenco granadino que fue impartido por el cantaor y licenciado en filosofía Sergio Cuesta, el guitarrista Vicente Márquez y, el último día, la bailaora Silvia Lozano.

 Los asistentes al mismo, que se impartía por segundo año consecutivo, pudimos aprender sobre la historia del cante, del toque y del baile de este arte considerado patrimonio inmaterial de la humanidad y que surgió gracias al encuentro de los gitanos con la cultura andaluza y morisca y a la fusión de ambas que realizaron los gitanos andaluces.

 En la primera de las cuatro sesiones de dos horas de duración nos adentramos en el cante; la segunda estuvo dedicada al ritmo, pulso, acento y compás en el cante y la clasificación de los cantes por el tipo de compás según sea este binario, ternario o de amalgama. Fue esta una clase eminentemente práctica y en la que la gente de Alhama Comunicación intentamos hacerlo lo mejor posible con las palmas y el cajón...

 La que si demostró estar muy bien de voz y de compás fue nuestra paisana y asistente al taller, María José que al final de la clase nos regaló el cante de unos tangos, con, como no, “Tente” a la guitarra.

 Y precisamente sobre a la guitarra, su historia y evolución, tanto física, del instrumento en sí, como de su toque y “tocaores” versó la tercera de las sesiones. Nos fueron impartidas nociones sobre el origen del instrumento, fusión de la guitarra castellana y la guitarra morisca o laúd, sobre sus técnicas de toque (punteos, alzapúa, rasgueos, arpegios, trémolos y golpes) y sobre los principales guitarristas de España y Granada, esta última con especiales características que la diferencian del resto de las provincias andaluzas en cuanto a formas de interpretar de sus “tocaores”. Se trata de un toque ligado a la zambra, puesto al servicio del cante y con tres escuelas, las de los Habichuela, (José y Juan Carmona) y la de Manuel Cano.

 También pudimos aprender algunas nociones básicas sobre melodía y armonía en el flamenco y a distinguir algunos palos según su melodía.

 La última sesión estuvo destinada al baile y en ella nos adentramos en sus orígenes, gitanos y moriscos, igual que el cante o el toque, los gitanos llegados a la península adaptaron los bailes autóctonos a su idiosincrasia. Un repaso por la historia y evolución de este arte, con el repaso de algunas de sus figuras más conocidas como la Argentinita, Carmen Amaya, o los más recientes, Antonio el Bailarín o Antonio Gades nos llevaron a la parte más practica en la cual Silvia Lozano nos enseñó las partes que componen la estructura de un baile: falsete, remate, llamada y escobilla.

 Tras esta exposición teórica Silvia despidió la clase y el taller con la interpretación de unos tangos de Granada de la cual las fotos que acompañan esta breve reseña son una muestra somera de su buen hacer y elegancia.

 Esperamos que el próximo año se repita el taller para seguir aprendiendo y disfrutando de este arte tan nuestro y universal como es el flamenco.

Algunas de las imágenes de este taller de flamenco
















Fotos: Prudencio Gordo