Dos inmigrantes denuncian a la Guardia Civil por presuntas agresiones. La Benemérita tacha de falsa la acusación y espera demostrarlo ante el juez.
04/10/2004.- Los hechos ocurrieron a principios de septiembre aunque ha sido en fechas recientes cuando nos ha llegado una copia de la denuncia. En concreto, el pasado 8 de septiembre dos inmigrantes de origen marroquí denunciaban en la comisaría del Distrito Centro de la Jefatura Superior de Policía de Granada las presuntas agresiones de las que fueron objeto en Ventas de Zafarraya por parte de una pareja de la Guardia Civil. Los hechos denunciados se produjeron a las once y media del lunes, 6 de septiembre, en la plaza de Santo Domingo de esta localidad cuando el ciudadano de El Kelar (Marruecos) Es Sadiq Aboulali y su compatriota Abdellah Esmaali, residente en Loja y de baja por un accidente laboral, se encontraban en un vehículo conducido por el segundo cuando “fueron detenidos por una pareja de Guardia Civiles, los cuales abrieron la puerta delantera derecha y sacaron a Essmaali de forma violenta”.
Seguro caducado
En el texto de la denuncia, facilitado a ALHAMA COMUNICACIÓN, se añade que ante esta situación el conductor se dirigió al cuartel en el que ya se encontraba la dotación y su amigo. A la llegada se indica que fue recibido con golpes e insultos. Así mismo, manifiesta que la llave del vehículo fue rota en el bombín, así como “los papeles del seguro, caducado, del coche y papeles de tráfico”. Según la declaración fueron liberados a las tres y media del día siguiente y como resultado de las agresiones sufrieron lesiones en diversos partes del cuerpo de las que fueron asistidos en Urgencias del Hospital Clínico San Cecilio de la capital. Al parecer el vehículo fue intervenido en tanto que el conductor presente la prescriptiva documentación, así como el seguro obligatorio. Según un vecino de esta localidad además de las denuncias al conductor del vehículo se le impuso una multa de 1.500 euros por la falta de documentación del mismo. También señaló que Abouali “es un joven pacífico, nada conflictivo, como ha demostrado en las cinco temporadas que viene trabajando en el Llano de Zafarraya”.
Versión de la Guardia Civil
Por su parte la Guardia Civil ha manifestado que los hechos denunciados son falsos y que “no hubo agresiones ni tampoco daños al vehículo”. Según la versión de la Benemérita la patrulla de Zafarraya actuó al sospechar de un vehículo con matrícula extranjera, concretamente italiana, por lo que decidieron dar el alto a sus ocupantes. Sin embargo, al proceder a la identificación el coche emprendió una rápida huída lo que provocó una persecución que acabó cuando el vehículo se introdujo en una calle sin salida. En este momento el conductor salió del mismo y continuó la huída a pie quedando en el interior su acompañante. Al comprobar que se trataba de un vehículo irregular pues no contaba con su regularización en España decidieron su traslado a la casa cuartel, cosa que hizo el ciudadano marroquí. Estando en este lugar se presenta una segunda persona que indica ser su propietario. La Guardia Civil sospecha que se trata de una persona huida posiblemente por encontrarse en nuestro país de forma irregular. Una vez realizadas las diligencias ambos abandonaron el cuartel. Por ello, declaran que la denuncia interpuesta 27 horas más tarde, no se atiene a la verdad y puesto que “los hechos están judicilializados tendrá que ser un juez quien decida”.
Texto: A. Arenas. Fotos. Cedidas a Alhama Comunicación.