Jayena personas, calles y plazas

Jayena siempre ha sido un pueblo luchador y combativo, marcado eso si en su historia por su origen de señorío. La vida de sus vecinos nunca fue fácil, pero siempre supo sobreponerse a sus dificultades.

Imagen superior: Vista de la Plaza de la Constitución, Casa Grande e Iglesia parroquial años 90 siglo XX (Foto cedida por Ángel Calvo Peregrina)

 En su intrahistoria duermen acontecimientos personales y cotidianos que han ido tejiendo biografías anónimas plagadas de vida en su máximo sentido, donde la bondad siempre tuvo su lugar, a pesar de las estrecheces y dificultades. Historias que fueron naciendo y muriendo entre sus calles calladas y solas. Calles que han ido evolucionando o no con el paso del tiempo. Las fotos que hoy traemos son estampas de la vida cotidiana de aquellos tiempos en los que la prisa estaba exiliada de la vida de las gentes de Jayena. Cada una de ellas cuenta una historia particular y cautivadora, sin nada que envidiar al más digno de los guiones cinematográficos o novelas. Historias tan singulares como las de Ana María Calvo, o específicas y particulares como las de Manuel Calvo o Federico Medina. O aquellas no tan lejanas de los hermanos Hidalgo, salpicadas de diarios sueños y brega por hacerlos realidad. Pero esas son historias para otro momento, hoy vamos a conocer un poco de la evolución, en los acontecimientos de las calles y plazas de Jayena, donde los protagonistas de esas fotos hilaron esas historias, que ya forman parte de la historia honda, recóndita y profunda de la villa de Jayena.

 Con respecto al mapa que se aporta del plano urbano del año 1896, el más antiguo por el momento al que he tenido acceso, sobre el callejero de Jayena; varías calles de la villa jayenera, han alterado su trazado, ampliándolo o reduciéndolo en su devenir histórico. Otras sencillamente han cambiado su nombre. Este es el caso por ejemplo de La calle de Las Gallinas, que ahora la conocemos como Príncipe, la Plaza homónima de las Gallinas que corresponde a la actual Plaza de Colón, o la calle Iglesia hoy Cuesta de Las Campanas.

 En el caso de La Calle da las Eras, se ha producido un cambio en su diseño, pasando a incluirse parte de la antigua calle en el recorrido de la actual Avenida Mediterráneo, conservándose la antigua en un trazado más reducido. Así mismo ha sucedido con la Cuesta del Chorro actualmente renombrada como Cuesta de San Antonio, o la primitiva de Las Chorreras hoy insertada en la calle Acequia. Como la Hoya en La calle Almuñécar, La Calle Corta en la Calle Carril, o el Callejón de Las Escalerillas en la Calle San Ignacio. Igualmente, el Corralón aunque sigue manteniendo su nombre a nivel popular, se ha integrado en la Calle Granada. Otras calles conservando parte del dibujo antiguo ahora tienen distinta trayectoria, como la Calle Alamillos que ha ampliado su trayecto, o la mencionada calle Granada, que ha reducido su recorrido, pasando a incluirse parte de su antiguo trazado en la calle Puerta Granada, y se le ha agregado el Corralón.

 Llama la atención el limitado espacio que conformaba el mapa urbano del municipio en aquel tiempo si se compara con el actual; 17 calles y 2 plazas en 1896, frente a las 59 calles y 6 plazas del presente callejero urbano jayenero en 2017. Pero aún más puede sorprender el hecho de que según censo de 1897, un año después de la finalización de la cartografía de Jayena que comentamos, contaba con 1004 habitantes de hecho y 326 hogares. Hoy a fecha de diciembre de 2016 son 1119 los vecinos en la villa, (por cierto, señalar a este respecto que ya nos encontramos en niveles de población por debajo del año 1900 cuando contaba Jayena con 1127 habitantes). Indicar que el momento histórico en el que la villa de Jayena ha contado con más habitantes según datos del INE fue en 1970 con 2039 vecinos en 486 hogares.

 En cuanto a la toponimia de las calles hoy, y para no extendernos más de lo necesario, nos centramos en la Plaza de la Constitución que es la plaza más emblemática de la Villa de Jayena, durante mucho tiempo se localizó allí el ayuntamiento de la población, además de encontrarse ubicada la Casa Grande, residencia de Los Marqueses de Campotéjar, ( y de los administradores), señores de la Villa, La Iglesia, así como las casonas solariegas de los terratenientes del pueblo.

 La Plaza de La Constitución fue durante mucho tiempo el centro neurológico de la Villa. En 1896 Jayena solo contaba con otra plaza más, además de ésta, la Plaza de Las Gallinas anexa a la calle del mismo nombre. Tanto la Calle de La Gallinas como la plaza tocaya debieron de tener también su importancia, pues adyacente a ellas se encuentra la calle Real. Antaño siempre se daba este nombre el de Real a la calle principal de los pueblos, por lo que, en algún momento, esta debió de ser una zona cardinal de Jayena.

 Aunque no podemos apoyar documentalmente de momento el origen del topónimo de la Plaza de La Constitución en Jayena, topónimo que por otra parte no ha cambiado al menos que nos conste desde 1896,(no tenemos constancia ni conocemos el nombre anterior), prácticamente podemos afirmar que probablemente el nombre de Plaza de La Constitución se debe a que en 1812, un decreto dispone se dé el nombre de la Constitución a las plazas mayores de las ciudades, inscribiéndose en lápidas de piedra o mármol. La otra posibilidad es que se denomine así en honor a la Constitución Española de 1876, mediante la cual se reinstauró la monarquía con Alfonso XII.