Su nombre es Estefanía Rodríguez Peregrina, “Fany” para sus amigos. 22 primaveras de ilusión y sueños desde que viera la luz en su Fornes natal un frio día del mes de enero de 1991. Es la mayor de dos hermanas. Uno la mira y percibe en ella una honda sensación de simpática ternura, llena de agrado y afecto. Tímida y conversadora, cautiva con su inocencia limpia e ingenua.
Su primer cuadro
Diplomada en trabajo social desde junio de 2012 por la Facultad de Trabajo Social en la UGR (Universidad de Granada), recuerda con complacencia su tiempo en el colegio rural de La Inmaculada de Fornes y sus días de instituto en el IES Alhama. Hoy como tantos de nuestros jóvenes forma parte de ese tanto por ciento que a pesar de su formación no halla trabajo, y cuya alternativa más probable se refleja en esa movilidad exterior, que tanto gusta fomentar a nuestro gobierno. Ayuda a su familia en las tareas agrícolas y en todo a cuanto alcanza. Su tesón sin embargo le lleva a seguir complementado su formación, por aquello de sentirse preparada en su espera, incansable combativa, perfecciona idioma ingles en la escuela oficial de idiomas de Granada. Asimismo se plantea iniciar estudios de enfermería, pues siempre anheló ser enfermera, aunque de pequeña su ilusión mayor fuera llegar a la luna, quiero decir ser astronauta.
Siempre le ha gustado trabajar con las personas y el contacto humano, activa tenaz, constantemente buscando ir más allá. Así un día de hace algunos meses, se topó con el taller de dibujo y pintura de Jayena y con el profesor Raúl García. Allí comenzó una nueva experiencia, la pintura, un nuevo mundo donde seguir creciendo en su continuo camino hacia la vida.
Ya antes había realizado otras labores artísticas y de manualidades, trabajando con fimo, (el vocablo «fimo» se esgrime genéricamente para distinguir a todo tipo de pastas para modelar, semejantes a la plastilina que tienen la singularidad que se endurecen al calentarse en un horno a una temperatura alrededor de 130ºC. También es conocido como «arcilla polimérica», El fimo está indicado esencialmente para la creación de pequeños objetos decorativos, en particular, elementos de bisutería, tales como pendientes, pulseras, anillos, collares, broches etc.) igualmente había realizado diademas artesanales.
Pero es la pintura el campo artístico que en este momento de su vida le inunda de ilusión felicidad y realización personal, acaba de finalizar su primer cuadro, (que por supuesto ha regalado a su madre, como no podía ser de otra manera), que aunque es una copia de una lámina obtenida de internet para ella supone todo un logro, un fruto. Nos comenta Estefanía:"pintar es un reto que me llena y me hace crecer a la vez que me sirve de desahogo, me ayuda a madurar, me relaja de las preocupaciones diarias y me permite centralizar y aglutinarme solo en lo que estoy haciendo en ese momento. Me produce gran satisfacción y alegría sobre todo cuando veo que los resultados son los propuestos. Una nueva meta donde manifestar y desarrollar mi capacidad y talento.” Estefanía ya se encuentra trabajando en su segunda pintura, toda una muestra de firmeza y ahínco, a modo de emblema que refleja la valía y la potestad de la cultura, la esperanza de lucha contra la crisis actual que nos fallece, del espíritu inquebrantable de la mayoría de nuestras juventudes a pesar de la morralla que nos gobierna, que pretende embestir y agredir allí donde más daño pueden hacer al futuro de nuestros jóvenes, con sus recortes en ciencia, educación…
Estefanía es un claro ejemplo del potencial generacional en nuestra Comarca, que a pesar de los gobiernos y sus políticos, (que con su nefasta gestión, y la aciaga economía se empeñan en lapidar); a día de hoy son luz de futuro en un presente sombrío y obsceno.
Diplomada en trabajo social desde junio de 2012 por la Facultad de Trabajo Social en la UGR (Universidad de Granada), recuerda con complacencia su tiempo en el colegio rural de La Inmaculada de Fornes y sus días de instituto en el IES Alhama. Hoy como tantos de nuestros jóvenes forma parte de ese tanto por ciento que a pesar de su formación no halla trabajo, y cuya alternativa más probable se refleja en esa movilidad exterior, que tanto gusta fomentar a nuestro gobierno. Ayuda a su familia en las tareas agrícolas y en todo a cuanto alcanza. Su tesón sin embargo le lleva a seguir complementado su formación, por aquello de sentirse preparada en su espera, incansable combativa, perfecciona idioma ingles en la escuela oficial de idiomas de Granada. Asimismo se plantea iniciar estudios de enfermería, pues siempre anheló ser enfermera, aunque de pequeña su ilusión mayor fuera llegar a la luna, quiero decir ser astronauta.
Siempre le ha gustado trabajar con las personas y el contacto humano, activa tenaz, constantemente buscando ir más allá. Así un día de hace algunos meses, se topó con el taller de dibujo y pintura de Jayena y con el profesor Raúl García. Allí comenzó una nueva experiencia, la pintura, un nuevo mundo donde seguir creciendo en su continuo camino hacia la vida.
Ya antes había realizado otras labores artísticas y de manualidades, trabajando con fimo, (el vocablo «fimo» se esgrime genéricamente para distinguir a todo tipo de pastas para modelar, semejantes a la plastilina que tienen la singularidad que se endurecen al calentarse en un horno a una temperatura alrededor de 130ºC. También es conocido como «arcilla polimérica», El fimo está indicado esencialmente para la creación de pequeños objetos decorativos, en particular, elementos de bisutería, tales como pendientes, pulseras, anillos, collares, broches etc.) igualmente había realizado diademas artesanales.
Pero es la pintura el campo artístico que en este momento de su vida le inunda de ilusión felicidad y realización personal, acaba de finalizar su primer cuadro, (que por supuesto ha regalado a su madre, como no podía ser de otra manera), que aunque es una copia de una lámina obtenida de internet para ella supone todo un logro, un fruto. Nos comenta Estefanía:"pintar es un reto que me llena y me hace crecer a la vez que me sirve de desahogo, me ayuda a madurar, me relaja de las preocupaciones diarias y me permite centralizar y aglutinarme solo en lo que estoy haciendo en ese momento. Me produce gran satisfacción y alegría sobre todo cuando veo que los resultados son los propuestos. Una nueva meta donde manifestar y desarrollar mi capacidad y talento.” Estefanía ya se encuentra trabajando en su segunda pintura, toda una muestra de firmeza y ahínco, a modo de emblema que refleja la valía y la potestad de la cultura, la esperanza de lucha contra la crisis actual que nos fallece, del espíritu inquebrantable de la mayoría de nuestras juventudes a pesar de la morralla que nos gobierna, que pretende embestir y agredir allí donde más daño pueden hacer al futuro de nuestros jóvenes, con sus recortes en ciencia, educación…
Estefanía es un claro ejemplo del potencial generacional en nuestra Comarca, que a pesar de los gobiernos y sus políticos, (que con su nefasta gestión, y la aciaga economía se empeñan en lapidar); a día de hoy son luz de futuro en un presente sombrío y obsceno.
En plena actividad pictórica
Con su hermana
En su graduación
Sus trabajos con fimo