Alhama como topónimo



Bautizados con agua caliente.

En cuatro comunidades autónomas distintas podemos encontrar una sierra, tres ríos y seis poblaciones en cuya denominación aparece el nombre de Alhama.


Octubre de 2000.- Cuatro comunidades tan dispares y distantes como La Rioja, Aragón, Murcia y Andalucía tienen algo en común: los musulmanes bautizaron con idéntica denominación a algún accidente geográfico o población . Así la palabra Alhama, del árabe al-Hamma, el baño o agua termal, aparece como topónimo en una sierra, tres ríos y seis poblaciones. La mayoría de los alhameños granadinos saben que en España existen cuatro Alhamas. Incluso, muchos de ellos, las han visitado ya que en mayo y octubre de 1995, se propiciaron a nivel institucional, encuentros en Alhama de Murcia y Alhama de Aragón, a los que también asistieron alhameños de Almería. Fue en 1834 cuando, para distinguir a estas Alhamas, se les añadió el nombre de la provincia o del antiguo Reino. Es menos conocida la existencia de otras dos poblaciones con este toponímico, tal es el caso de Aguilar del Río Alhama y Cervera del Río Alhama, ambas en La Rioja. 

También es bastante desconocido que además de este río riojano hay otro con idéntica denominación en la propia provincia de Granada, concretamente en la comarca de Guadix, además del río de Alhama también denominado río Frío en el grabado de Hoegnagle, realizado en 1564, o río Marchan en el diccionario de Pascual Madoz. Por último, está la sierra de Alhama que junto con las de Tejeda y Almijara conforman el Parque Natural interprovincial del mismo nombre.

Con anterioridad también llevaron esta denominación Santa Cruz de Alhama (que tras el terremoto de Andalucía (1884) pasó a denominarse “del Comercio” aunque en los mapas suele utilizarse ambos nombres) y Arenas de Alhama (villa desde 1775 que pasó a denominarse, del Rey), ambos municipios incluidos en la comarca de la Tierras de Alhama junto con el de Zafarraya, Cacín y Jayena.

Las Alhamas

De todas las Alhamas la de mayor población es la de Murcia que supera los 15.300 habitantes, le siguen Alhama de Granada con 5.983, Cervera del Río Alhama con 3.381, Alhama de Almería con 3.104, Alhama de Aragón con 1.217 y la más pequeña Aguilar del Río Alhama con 728. La primera de ellas está situada en el valle del Guadalentín y su población vive de la agricultura, ganadería e industria alimentaria, calzado y del mueble. Entre sus restos monumentos artísticos conserva un catillo medieval. Es famosa por su fiesta de los mayos declarada fiesta de interés turístico regional y por su esplendorosa Semana Santa.

La Alhama granadina vive igualmente de la agricultura y empieza a destacar un pujante sector servicios gracias a la explotación de su potencial turístico. La villa riojana de Cervera del Río Alhama se encuentra en la Rioja Baja. Sus habitantes viven principalmente del cultivo de la vid, frutales y de la ganadería.

La Alhama de Almería también llamada “la Seca” pues el terremoto de 1522 secó totalmente sus manantiales, se encuentra en la comarca del Andarax, al pie de la sierra de Gádor, rodeada de vides, olivos y naranjos. Posee canteras de mármol y piedra caliza. Por su parte, Alhama de Aragón está situada en la Hoya de Calatayud en tierras avenadas por el río Jalón . Igualmente sus vecinos viven de la agricultura y también de la apicultura, industria metalúrgica y química. Por último, el municipio riojano de Aguilar del Río Alhama se encuentra al norte de la sierra de Pégado. Fue fortificado en tiempos de Carlos II de Navarra y vive fundamentalmente de la agricultura y ganadería.

Ríos alhameños

Según el Madoz, el río Alhama accitano nace en lo más elevado de Sierra Nevada, en el lugar conocido como el Camarete. Se trata de un afluente del Fardes que pasa por las proximidades de Beas de Guadix y Marchal antes de llevar sus aguas al río Guadix. Según este diccionario fertilizaba además de estas tierras las de Lugros y Purullena y “da movimiento a las fábrica o ferrería de Lugros, propia del marqués de este título, y a varios molinos harineros. Su curso es perenne, aunque escaso su caudal: su cauce llano no experimenta desbordaciones; no cría más pesca que alguna trucha, y no tien puentes, alcantarillas ni barcas, por vadearse con facilidad en todos tiempos. Sus márgenes están cubiertas de castaños, perales, abundantes viñedos, alamedas, parrales, serbos y otros árboles frutales”.

En cuanto al río Alhama granadino le dedica cerca de treinta líneas. En primer lugar afirma que también es llamado de “Marchan” (sin tilde) por el sitio en que nace. A continuación realiza una descripción de su curso y de sus afluentes, así como de los siete molinos harineros que se encontraban en su curso en las inmediaciones de la ciudad y dos en las proximidades de Santa Cruz del Comercio, antes de unir sus aguas con las del río Cacín y perder su nombre a pocos metros de Moraleda de Zafayona. Entre las curiosidades señaladas está el hecho de que ya a mediados del XIX contaran con dos puentes, uno que le comunica con el molino de Cortés, y otro, el histórico de los Baños, actualmente a punto de desmoronarse pese a su importancia histórica pues según varios estudios data del siglo I a J.C. Desde entonces a nuestros días sólo se ha contruido dos puentes más. Un moderno puente en la carretera A-335 a pocos metros del anterior y otro en las proximidades de la Pantaneta-trasvase al Pantano de los Bermejales. A continuación señala que sus aguas son tan saludables que “se tienen por medicinales”. En otro apartado dedicado a la población al referirse a este río “Marchan o Alhama ” exponía como corre “entre dos tajos de piedra, cuya elevación en algunos casos es extraordinaria”, a lo que añade cómo “sus orillas se encuentran plantadas de álamos de todas clases, criándose en sus aguas muchas truchas, anguilas y algunas nutrias”.

Por último, el río Alhama riojano nace en realidad en tierras castellano-leonesas, concretamente en la Sierra del Almuerzo (Soria), pasa por Aguilar y Cervera, a las que presta su nombre. Sus principales afluentes son los ríos Mayor y Añamaza. Su curso mide 84 kilómetros y tras pasar junto a Cintruénigo y Alfaro, entrega sus aguas al Ebro.