Tres jóvenes se lanzan al mundo empresarial en el calzado y complementos, intentando romper el handicap de que para obtener buen precio, calidad y variedad haya que desplazarse. Una apuesta valiente en tiempos de crisis.
Con los típicos nervios del que se está iniciando en un negocio, nos reciben Patricia, Mari Luz y Eva, las tres jóvenes empresarias creadoras de Trébol, el nuevo negocio de calzado y complementos de Alhama. Inician una nueva etapa en su vida profesional, y la afrontan con ilusión, ganas de trabajar y de dar un óptimo servicio ofreciendo productos a la última a los ciudadanos, entre bolsos, zapatos, zapatitos, pañoletas, pulseras, relojes, anillos, colgantes... ¿quién da más?.
No vayan a pensar que las jóvenes emprendedoras llevan toda la vida dedicada al mundo de los complementos. Salvo Patricia, que sí ha tenido alguna experiencia en este sentido, el resto tienen ocupaciones muy diversas. De hecho, la idea de poner este atractivo negocio surgió nada menos que en una clase de aerobic, de donde Patricia, Eva y Mari Luz son alumnas asiduas. Allí, entre coreografía y coreografía, entre step y step, convergieron en emprender esta aventura.
El nombre del negocio, en principio es muy alentador, puesto que los tréboles suelen dar suerte, pero también porque son tres las fundadoras de la empresa. Pretenden ofrecer nuevos productos, nuevas ideas, un nuevo enfoque al comercio alhameño; algo vanguardista, novedoso, que por aquí no habíamos visto mucho. Ofertan marcas punteras de la moda actual, que suelen encontrarse en el agobiante centro urbano de las grandes ciudades.
Sin embargo, los alhameños ya no tendrán que molestarse en desplazarse a la capital para adquirir estos productos tan modernos y variados. Hasta de Bali se pueden encontrar complementos en Trébol dirigidos a todas las edades y por supuesto a ambos sexos, ofreciendo de esta forma un amplio abanico de posibilidades. Y por supuesto, con precios universales, es decir, lo que te cueste en Trébol no será más caro que en ningún otro lugar, por el hecho de estar alejado de una gran urbe comercial.
El sitio es céntrico, atrayente y estratégico, en la rotonda donde confluyen la carretera de Loja y la de Vélez Málaga, a lo que ayuda la elegancia y buena presentación del escaparate y del rótulo exterior. Con el deseo de que todo les vaya sobre ruedas, y la tienda tenga el mismo buen aspecto del que goza ahora, animamos a todos los alhameños a que disfruten de sus productos y de sus precios.
Por supuesto, desde este apartado de alhama.com que dedicamos a las empresas, les deseamos lo mejor.
