La XXV Velada de los Romances, sobresaliente cum laude



Pilar Aranda, con un pregón impregnado de alhameñismo, la magnífica interpretación de Romances y romanzas en la música a cargo de un dúo de cámara, y el broche del ¡Ay de mi Alhama! recitado por Silverio Gálvez, hacen merecedora de esta calificación 


Abrió el acto Ignacio F. Benítez, presidente del Patronato de Estudios Alhameños

 La frescura de la noche alhameña se resistió pues el termómetro siguió rondando los 30 grados cuando pasadas las 10 de la noche se iniciaba la XXV edición 'Alhama, Ciudad de los Romances'. A pesar de ello, la literatura y la música volvieron a crear ese ambiente mágico que se han vivido en el cuarto de siglo de veladas celebradas en torno al famoso romance a la pérdida de Alhama. Por segundo año consecutivo, debido a la pandemia, el Patronato de Estudios Alhameños, prefirió como escenario el Paseo del Cisne en lugar de la histórica Plaza de los Presos. Y aquí se congregaron un centenar y medio de personas deseosas de escuchar a la rectora de la Universidad de Granada, la actuación musical que cada año completa la velada y la sorpresa que en las primeras ediciones tenía forma de libro pues todos los asistentes se llevaban gratuitamente una publicación conmemorativa sufragada por la concejalía de Cultura del Ayuntamiento alhameño, y que, este año, contó con el efusivo recitado del romance, a pie de escenario, por parte de Silverio Gálvez que a más de uno de los presentes puso el vello de punta. Entre el público el anterior presidente del Patronato e impulsor de esta activad, Andrés García Maldonado, quien fuera citado en reiteradas ocasiones tanto por su sucesor, Ignacio Benítez, como por la invitada de honor y el rapsoda local.


 Este tipo de celebraciones y su pervivencia hace que nos demos cuenta de la fugacidad del tiempo pues esta actividad que, en palabras de su creador, se puso en marcha hace 25 años, «como homenaje permanente de gratitud por la fama que durante cinco siglos le ha venido dando a Alhama por todo el mundo, por los cinco continentes y en las lenguas más usadas y diversas» ha celebrado este año sus bodas de plata. Ignacio Benítez, además de dar la bienvenida al público asistente y ofrecer algunas pinceladas de esta celebración poético-musical fue el encargado de dar la palabra a Pilar Aranda quien tras saludar a los «jameños y jameñas» reconoció que, haber nacido «por accidente» en Zaragoza pese a lo cual «me siento tan de aquí como el que más, cierto que con un mes ya estaba aquí [en Granada]» para pasar a contar que «siendo una niña estudiante del Sagrado Corazón en donde una excelente profesora de lengua y literatura M. Julia nos hizo aprender dos poemas representativos de etapas diferentes de la literatura de nuestro país: 'Un soneto me manda hacer violante' de Lope de Vega y el Romance a la pérdida de Alhama, uno de los favoritos de mi padre que facilitó la memorización».

Pilar Aranda durante su intervención

 También haría alusión a «las decenas» de alhameños que se han cruzado en su camino o han tenido relación con la Universidad de Granada, desde el 'cantaor' Paco Moyano al periodista Antonio Ramos Espejo pasando por la exdelegada del Gobierno, Sandra García, presente en el acto, al igual que la alcaldesa de Santa Cruz del Comercio, Ángeles Jiménez. También hablaría del profesor de Historia del Arte y Vicerrector de Docencia, Juan Manuel Martín García, en este caso por sus estudios sobre Íñigo López de Mendoza, quien fuera primer alcaide de Alhama antes de ostentar este cargo en la Alhambra. Así mismo, haría referencia a Fernando de Vergara y Cabezas, alhameño de nacimiento y de vocación, quien fue rector de la UGR en 1647. Igualmente citaría a dos alhameñas, Mari Carmen Benítez y a María Angustias Valenzuela, asistente al acto, a las que conoció en su etapa universitaria. Para terminar, aludiendo al texto de la 'Proclama de Alhama' que se lee el 28 de febrero, Día Histórico de Alhama y «que bien podríamos elevarlo a la categoría de Proclama de los Derechos Humanos nacida en esta localidad». 

Sabina Ciruela, secretaria general del Patronato

 Tras la intervención, Sabina Ciruela, secretaria del Patronato, daría paso a la actuación musical del dúo de cámara, integrado por Sergio Jiménez Salvadó, al violín y Eloy Cubillo Pinilla, al piano. Este último haría una breve introducción a los 'Romances y romanzas en la música' antes de la interpretación de siete temas: las Romanza op. 40 y 50 de Beethoven, la Romanza sin palabras del propio Cubillo, el Romance op 28 de Fauré, la Romanza op. 22 de Clara Shumann, 'Adiós a la Alhambra' de Jesús de Monasterio y el anónimo Romance 'Ay de mi Alhama' que daría paso al recitado de Silverio Gálvez, dedicado a la rectora, quien prefirió hacerlo a pie de escenario. Tras la entrega de unos recuerdos a Pilar por parte del presidente del Patronato y del alcalde de Alhama, uno de ellos obra del cantero local, José Andrés Ciruela 'Boti', Jesús Ubiña sería el encargado de cerrar el acto agradeciendo al Patronato Estudios Alhameños la organización de esta velada que se ha convertido en uno de los actos estrella del verano. 


Vídeo completo de la velada


 
Intervención de Pilar Aranda



 Alcalde de Alhama de Granada, concejales, presidente y miembros del Patronato de Estudios Alhameños, queridos amigos alhameños y alhameñas,

 ¡Qué gusto y qué inmenso honor estar esta noche con todos vosotros y vosotras!

 Cuando hace ya algunas semanas me llamaron para decirme que me habían elegido invitada de honor de esta magnífica velada, de esta espléndida iniciativa, me sorprendí. Al fin y al cabo, vengo esta noche a esta cita anual sin haber nacido en Alhama de Granada, en esta bella tierra. Luego, sin embargo, me he dado cuenta de que eso es tan solo un accidente, una circunstancia. La realidad es que nací en Zaragoza y, sin embargo, soy tan granadina y me siento tan de aquí como el que más, cierto que con un mes ya estaba aquí. Por eso, después de una vida entera en esta tierra, después de cruzarme en el camino con decenas y decenas de alhameños y alhameñas, ¿cómo no he de sentirme también un poco o un mucho de la preciosa Alhama de Granada? Por eso, tengo que agradecer a la ciudad y especialmente a Ignacio Benítez Ortúzar, presidente del Patronato de Estudios Alhameños, su atención conmigo al nombrarme invitada de honor de esta velada.

 Hace ya 25 años, un 9 de agosto de 1997, que el Patronato de Estudios Alhameños puso en pie esta hermosa velada “Alhama, ciudad de los Romances”. Para mi, como rectora de la universidad de Granada, pero, sobre todo, como ya he dicho, como granadina, como alguien que lleva a Alhama en el corazón y como amante de esta provincia y sus tradiciones, es un enorme honor ser la invitada en esta edición tan señalada. Cada año es importante pero cuando se alcanzan estas cifras tan redondas nos damos cuenta de que algo se está haciendo bien porque perdura en el tiempo y porque a los ciudadanos y ciudadanas les gusta, la atienden año tras año y la disfrutan cada vez.

 Celebramos el 25 aniversario y eso quiere decir que, por aquí, o por su habitual emplazamiento hasta el año pasado en la histórica Plaza de los Presos y antigua Plaza Real de Alhama, centro neurálgico de la ciudad, han pasado jameños, jameñas y amantes de la ciudad especialmente destacados. Por aquí han pasado profesores, sobre todo los primeros años –en los que los maestros tuvieron un papel especialmente destacado– historiadores o periodistas como el que fue presidente del Patronato, Andrés García Maldonado, Encarna Ximénez de Cisneros, Antonio Ramos Espejo o el recientemente fallecido Tico Medina, que me consta que hizo un pregón inolvidable en el que no paró, como era él, de contar anécdotas de su interesante vida en las que incluyó esas visitas anuales que hacía con su madre a la búsqueda de las ricas lentejas de Alhama. Descanse en paz nuestro querido Tico Medina, antecesor mío en este hermoso compromiso como invitado de honor en esta velada.

 Mi relación personal y conocimiento sobre esta tierra se inició siendo una niña estudiante del Sdo Corazón en donde una excelente profesora de lengua y literatura M Julia nos hizo aprender dos poemas representativos de etapas diferentes de la literatura de nuestro país

1.-Un soneto me manda hacer violante de Lópe de Vega
2.- Romance por la pérdida de Alhama: uno de los favoritos de mi padre que facilitó la memorización

 Paseábase el rey moro- por la ciudad de Granada desde la puesta de Elvira-hasta la de Vivarrambla- Ay de mi Alhama-
Cartas le fueron venidas- que Alhama era ganada- las cartas echó al fuego – y al mensajero matara – Ay de mi Alhama

 El romance continua con una descripción de como el rey llama a sus fieles y describe la pérdida con la posterior recriminación por parte de un alfaquí que considera que es consecuencia de haber matado a los Abencerrajes…



 Mi segunda relación con Alhama ha sido a través de personas queridas nacidas en esta bella villa, personas que configuran su paisaje urbano y hablan de las cualidades de las gentes de este lugar.

- Paco Moyano cantaor comprometido con la lucha obrera y todas las causas relacionadas con la defensa de los derechos humanos. Por el año 77, Juan de Loxa gran agitador cultural y poeta montó un espectáculo ambulante que iba por los barrios dr Granada Zaidín, la Chana, Haza grande …era un carromato que se transformaba en espacio escénico en el que se representaba a un hombre,una mujer, unos niños del barrio acompañados por Paco Moyano y Enrique Moratalla, quien por cierto participó en el año 73 en el afamado festival de Alhama.

- Antonio Ramos Espejo referente del andalucismo, luchador antifranquista, comprometido con un periodismo de libertad que desempeñó un papel importantísimo por la ruptura democrática en el tardo franquismo. Continuó con una gran actividad emprendedora en diversos proyectos relacionados siempre con la comunicación. Recuerdo la celebración de uno de sus cumpleaños en su bella casa en estas tierras y ese viaje recorriendo campos cuajados de amapolas primaverales

- Sandra García ex delegada del Gobierno, de la JA, senadora, directora general, concejala del ayuntamiento de Alhama y presidenta de la mancomunidad de municipios de la comarca de Alhama, pero sobre todo mujer comprometida, gran gestora, defensora de su tierra, enamorada de proyectos de desarrollo de Andalucía y sobre todo buena persona y buena amiga.

- Mari  Carmen Benítez Ortúzar, catedrática del departamento de teoría de la señal telemática y comunicaciones del que ha sido hasta hace muy poco su directora. Una ingeniera en informática en los tiempos en que desde las universidades debemos realizar campañas `para captar chicas que quieran estudiar ingenierías, grados muy masculinizados. Ella es un ejemplo, un modelo de valentía, buen hacer, rigor y esfuerzo.
Tengo la suerte de cruzármela muchas mañanas, temprano, junto a su marido Fernando Arias de Saavedra también profesor de nuestra universidad. Su saludo alegre e ilusionado es presagio de un buen día

 Y acabo de saber que es alhameña, Mari Angustias Valenzuela Morales, pionera de nuestro centro de cálculo actual centro de redes y servicios informáticos y hasta hace poco una de sus responsables. En mi época de vicerrectora de estudiantes entre el 92 y 96 trabajamos muy estrechamente ya q ella era la responsable en el centro de los datos del estudiantado. Siempre atenta, solícita y cariñosa, trabajadora incansable y una de las artífices de los éxitos del citado centro

 Además de nombrar a estas personas que me han hecho conocer y amar Alhama, me gustaría poder comentar algunos aspectos socio culturales que quiero destacar esta noche dada mi condición de profesora y rectora:

 En nuestra Universidad se ha estudiado con profundidad por numerosos profesores y desde diferentes facetas la apasionante e interesante figura de Iñigo López de Mendoza I marqués de Mondéjar y II conde de Tendilla, primer alcaide de la Alhambra.. Entre los numerosos estudios destacan los realizados por Juan Manuel Martín García prof de Historia del Arte y Vicerrector de Docencia, quien dice del Conde

 "Su presencia en buena parte de las campañas de la reconquista granadina, se convirtieron, por tanto, en el escenario de su propia promoción, donde no solo se granjeó la admiración de los suyos sino el respeto de sus enemigos...

 Más resonancia tendría su participación en los episodios militares de la guerra de Granada, en los que con frecuencia siempre aparece en los momentos más espectaculares y destacados, sobresaliendo entre ellos el que le ha dado fama duradera de militar hábil y sagaz además de inteligente estratega. En febrero de 1482, un año después de haberse iniciado una guerra con la toma de Zahara por los nazaritas, las tropas cristianas al mando del marqués de Cádiz tomaron la ciudad de Alhama, dejando a su cargo al conde de Tendilla como gobernador y capitán general de la Villa. Todavía un año después seguía Iñigo López de Mendoza a la cabeza de aquella localidad después de haber resistido en varias ocasiones los intentos de las tropas granadinas por recuperar uno de sus enclaves más importantes, lo que supuso problemas de abastecimiento y organización interior. A ello se añadió un invierno lluvioso que vino a aumentar la difícil situación que ya existía de antemano; precisamente las lluvias provocaron la caída de una parte de la muralla, agravando aún más el riesgo de la ciudad. Urgía solucionar este problema, sobre todo, teniendo en cuenta que en estos momentos iniciales de la última etapa de la reconquista cristiana las tropas granadinas podían desbaratar en poco tiempo las posiciones alcanzadas; para ello, mientras se procedía la reconstrucción de la parte dañada se cubrió esta con un lienzo pintado que imitaba con perfección la estructura de la muralla de tal modo que no se advirtiera el engaño desde lejos.

 Pero no quedarían ahí sus hazañas en el paisaje de la contienda granadina, pues consta que en esta misma localidad de Alhama, en el ejercicio de sus funciones como gobernador de la ciudad, se vio en la necesidad, ante la falta de liquidez dineraria de emitir papel moneda, pues como refiere Hernando del Pulgar, "_vista por el conde está falta mandó façer moneda de papel de diversos prescios altos e baxos, de la cantidad que entendió ser nescesaria para la contratación entre las gentes, y en cada pieza de aquel papel escribió de su mano el precio que valiese, e de aquella moneda ansí señalada pago el sueldo que se debía a toda la gente de armas e peones, e mandó que valiese entre los que estavan en la çibdad e que ninguno la refutase, e dio seguridad que quando de allí saliesen, tornándole cada uno aquella moneda de papel le daría el valor que cada pieza toviese escripto, en otra moneda de oro o de plata_" como así hizo al finalizar el sitio de Alhama aumentando, de este modo, su ya reconocido prestigio" (*MARTÍN GARCÍA, Juan Manuel*. _Íñigo López de Mendoza. El Conde de Tendilla_. Granada: Comares, 2003, por. 33-35)

 Entre la comunidad universitaria, me consta que esta no es la primera vez que un rector, rectora en mi caso, de la Universidad de Granada, toma este atril y este micrófono. En 2017 el honor de ser invitado de honor recayó en mi querido Lorenzo Morillas Cueva. Y ahora que hablo de nuestra Universidad de Granada, quiero recordar a Fernando de Vergara y Cabezas, alhameño de nacimiento y de vocación, que fue rector de la UGR en 1647.

 Fernando de Vergara y Cabezas fue catedrático de Decretos, lo que hoy sería Derecho Canónico, y colegial del Colegio Mayor Imperial de Granada, el fundado por el mismo emperador Carlos I, monarca especialmente apreciado por vuestro paisano. El 20 de agosto de 1640, según la extensa investigación de nuestro admirado Andrés García Maldonado, Fernando de Vergara se convirtió en vicerrector, cargo en el estuvo apenas dos meses dada su mala salud.
En 1647, ya recuperado, fue elegido rector de la Universidad de Granada. Como cuenta García Maldonado en un escrito publicado recientemente, está reconocida su preparación, cultura e inteligencia a la par que de su amor a su Alhama natal. Por ejemplo, el licenciado Martín Vázquez Siruela, canónigo de la Colegial del Sacro Monte, dijo de él que honraba su Alhama natal y que poseía “un ingenio inclinado a las ciencias y a la erudición escogida, teniendo un estilo elegante”.

 También Juan de Bustos y Viedma, otro destacado alhameño del siglo XVII, escribió de Fernando de Vergara: “…nunca los desvelos de su ingenio ha ofrecido menores las admiraciones; que mucho si han debido a vuestra merced a su decir que a su saber, hallando muchas veces sobrado el ingenio a las ciencias que magistralmente posee; dichosa mil veces patria –se refiere a Alhama-, que merece en vuestra merced hijo asegurado en la posteridad; ésta amigo y señor es la mayor riqueza, que si bien confiese no posee vuestra merced en la medida que posee, tanto lo imagino culpa de la fortuna, como lo presumo elogio de sus trabajos; porque son las dichas perezosas cuando el sobrado mérito las aguarda”.

 Fue precisamente Fernando de Vergara y Cabezas quien escribió en 1636 el libro Apología por los baños de la muy noble y leal ciudad de Alhama. Contra el desengaño que de ellos escribió Francisco Fregoso. Por eso, quizá convenga dedicar un momento a recordar, en esta noche de verano, la importancia del agua en Alhama. El río siempre estuvo ahí y los alhameños siempre lo han mimado. Ahí están, y vosotros lo conoceréis bien, los romances, los otros romances. No hablo ahora de los poemas de ocho sílabas que nos convocan a esta velada. Me refiero a esos otros romances (*) que vosotros, jameñas y jameños, tendréis en vuestra memoria de cuando eráis más pequeños. Esas pequeñas balsas de agua en las que, seguro que todos vosotros y vosotras, os habéis refrescado de jóvenes, o de más jóvenes aún. Esos remansos de agua que, también seguro, habéis ayudado a construir con vuestras manos y las propias rocas del agua. Esas balsas de aguas cristalinas en las que habréis pasado ratos inolvidables. Hablaba hace poco con un jameño, precisamente, de eso, de la importancia del agua en esta tierra. Y no solo porque vuestro propio nombre, Alhama, evoca al agua, sino porque en este pueblo, es casi imposible no haberse dado un chapuzón en las aguas de su río, por ejemplo, en el romance de los maestros.



 Y concluyo refiriéndome a un documento magistral que, además, se lee y se proclama cada año para tenerlo siempre fresco en la memoria. Me refiero a la Proclama de Alhama (**), ese documento que bien podríamos elevarlo a la categoría de Proclama de los Derechos Humanos nacida en esta localidad, que se leyó por última vez el pasado 24 de julio y de la que bien podéis sentiros orgullosos.

Ese texto en el que Alhama proclama:

 Su orgullo por sentirse y ser parte de las culturas y de los pueblos de Andalucía y de España, tanto en su pasado como en su presente.
 Su satisfacción histórica por haber sido un pueblo que durante siglos participó y se benefició́ de la cultura islámica.
 La asunción, como parte trascendental de su existencia e historia, así́ como de su mismo presente, del acontecer positivo de estos últimos cinco siglos en
Alhama.

 Y, claro, no la leeré de nuevo, pero, como rectora de una institución como la Universidad de Granada, entre las 300 más importantes del mundo según el ránking de Shanghai, quiero recordar algunos de los principios fundamentales en los que os reconocéis:

 Todo pueblo tiene el deber y el derecho de conocer, desarrollar y hacer
participativa su cultura y la cultura en general entre todos los ciudadanos.

 Toda persona ha de tener acceso y auténtica posibilidad al saber, así como a disfrutar en lo posible de las artes y de las letras de todos los pueblos.

 No se me ocurre nada mejor que estos dos principios para terminar porque hacen el mejor retrato posible de Alhama de Granada como una ciudad solidaria, universal y que reivindica la cultura y el conocimiento para todos. Felicidades por ello y gracias por invitarme.

 

Vídeo completo de la velada


Dúo de cámara Sergio Jiménez y Eloy Cubillo

Silverio Gálvez, interpretando el ¡Ay de mi Alhama!

Entrega de un recuerdo a la invitada, y las palabras del alcalde cerraron el acto

Fotos: Pablo Ruiz Becerra
Texto: Antonio Arenas
Vídeo: Juan Cabezas