Como marca la tradición el Viernes de Dolores salía en procesión la Virgen de las Angustias.
15/03/2008.- La noche del viernes catorce de marzo la virgen de las Angustias, abandonaba por unas horas la Iglesia del Carmen para realizar el recorrido de la procesión por las calles alhameñas.
Tal y como estaba previsto a las ocho de la tarde la Virgen de las Angustias era sacada a hombros por los Hermanos de la Virgen bajo el estruendo de la tradicional cohetada y la atenta mirada de sus fieles seguidores que esperaban impacientes por acompañar y alumbrar a su Patrona.
Como viene siendo costumbre desde hace algunos años, la comitiva iba encabezada por mujeres vestidas de riguroso negro y mantilla, tras la Virgen el párroco del pueblo Francisco Puertas, las autoridades municipales y la Banda de Música de Alhama. Mientras, la gente que poco antes se amontonaba a las puertas de la Iglesia, se fue colocando en dos filas para alumbrarla con las velas que simbolizan la luz viva, a Cristo-Luz del Mundo y significa la fe y la oración de los fieles en presencia de la Virgen o el Señor, aunque la función en sus orígenes era tan solo iluminar las calles.
Este año, la Virgen de las Angustias recibía tres ofrendas, dos de ellas en forma de saeta que fueron cantadas una en la Plaza Constitución por Francisco Cortés y otra en la esquina del bar del Tigre y; una tercera, en la calle Guillén, que consistió en el recital de un poema por Nicolás Cubo, un niño de tan solo diez añitos.
Sobre las once y media de la noche, la Virgen regresaba a la Casa de Dios tras más de tres horas de procesión y que la acogerá hasta el próximo Viernes de Dolores.