Paco Escobedo homenajeado por alhameños y amigos valorando su trabajo honrado por Alhama, y su talante

Pese a que la convocatoria no fue pública, porque se trataba de una sorpresa, se desbordaron las previsiones.

En contadas ocasiones una gestión política y una actitud personal ha recibido tanto afecto de sus amigos y vecinos

 El pasado sábado día 14 de septiembre de 2024 tuvo lugar un homenaje sorpresa que vecinos y amigos de Francisco Escobedo, Paco Escobedo, quisieron tributarle, en reconocimiento a su trabajo como alcalde en el periodo que más se ha hecho por Alhama, ya que sus doce años en la alcaldía han dejado huella, y casi todos los servicios de los que dispone Alhama fueron gracias a su gestión entre 1999 y 2011. Pero, sin embargo, la política no era el eje del homenaje, a Paco también se le reconocía su talante como persona y su valor humano, pero salieron a relucir, como no podía ser de otra manera, todas las falsedades que se vertieron sobre su persona simplemente para sacar rédito político, algo que también le pasó factura a su salud.

 Javier M. Castañeda y Raúl Gálvez fueron los que iniciaron las gestiones, que en un principio era para su grupo de amigos, pero conforme algunos se fueron enterando se fue propagando hasta convertirse en algo superior a lo planteado inicialmente, todo ello con el cuidado de que Paco no se enterara.

 De esta manera ochenta personas, y otras tantas que no pudieron venir se unieron al homenaje, de tal manera que hubo que editar un libro con los mensajes y escritos que se recibieron, ya que no hubiera habido tiempo material en la comida de haberlos leído todos, y de esta manera Paco, además, podrá guardar este recuerdo con la opiniones de afecto de los que no pudieron asistir, pero que se lo manifestaron por escrito, de igual modo muchos amigos y vecinos que se enteraron una vez pasado el evento manifestaron que les hubiese gustado estar presentes.

 Lo que nos hace ver que en muy contadas ocasiones una gestión política y una actitud personal ha recibido tanto afecto de sus amigos y vecinos, teniendo en cuenta que no hay prebendas a las que acceder.

El acto
 A Paco lo llevaron engañado al restaurante-asador-piscina el Pato loco, como si de una comida familiar se tratara, allí Javier M. Castañeda ya nos había aleccionado sobre como lo recibiríamos, incluso tenía preparada para su llegada una de los temas musicales favoritos de Paco (Que bonito es querer, de Manuel Carrasco), y así fue, cuando entró al ritmo de esta música los aplausos no se hicieron esperar junto con las palabras de Javi M. Castañeda, a las que Paco, una vez repuesto, contestó inicialmente, pasando a las mesas a las que Paco fue una por una agradeciendo, y manifestando, su sorpresa.

 Ya en los postres comenzó la parte de las intervenciones, un servidor fue el encargado de la introducción, tras la cual a Paco se le entregó una alegoría (unas manos que se van uniendo) que representaba la amistad, la familia y el trabajo, con un rótulo al pie que con la inscripción:

Paco, tus amigos valoran y aprecian todo el
trabajo que has realizado por nuestra Alhama.
a FRANCISCO ESCOBEDO VALENZUELA, 14-9-2024

 Para Charo, su mujer, un ramo de flores, y por parte de María del Mar Gálvez, una acuarela también muy simbólica; él con su familia y de fondo Alhama. Sus nietos también le habían preparado unas fotos enmarcadas de recuerdo familiar.

El libro para el recuerdo del afecto de los amigos
 También, con paciencia y esmero, se le preparó un libro realizado artesanalmente, donde se han recogido los muchos escritos recibidos, para que Paco los pueda leer y los tenga de recuerdo, al tiempo que se dejaron algunas páginas para que los asistentes que lo desearan pudieran dejar su mensaje. Todo un trabajo ya que iba acompañado de la foto de los participantes pasadas a dibujo. 

El desarrollo
 Esta información va acompañada de un vídeo, de algo más de hora y media, que recoge el acto casi en su totalidad, además de algunas de las intervenciones por separado, un trabajo de grabación y fotografías de Antonio Arenas, Pablo Ruiz y un servidor, intentado ser lo más fieles posible a lo vivido en esa tarde-noche.

Paco Escobedo no cobraba como alcalde, siguió ejerciendo de maestro por las tarde en adultos, para ahorrarle gastos al Ayuntamiento, y sin embargo su gestión fue muy fructífera.

Intervención de Juan Cabezas
 Juan Cabezas, quien abrió acto, destacó que “el paso del tiempo no borra el legado” de quienes, como Paco Escobedo, dedicaron su vida al servicio de los demás. Subrayó que, bajo su mandato, Alhama vivió una época de progreso marcada por la concreción de promesas en realidades palpables. Mencionó, entre otros logros, la construcción de instalaciones deportivas, como el polideportivo municipal, que sirvieron para aglutinar a la juventud. También recordó la creación de la escuela infantil, así como otros logros de Paco imposible de enumerar todos.

 Escobedo no solo fue un alcalde comprometido con las infraestructuras, sino con las personas. Cabezas recordó cómo impulsó servicios fundamentales, como el parque de bomberos y las mejoras en las calles de Alhama. Además, mencionó su esfuerzo por implementar un sistema de transporte para facilitar el regreso de los estudiantes desde Granada los domingos por la tarde, y comparó con la actualidad que ni tan siquiera hay autobús los sábados para un pueblo que se supone turístico.

 Pero el legado de Paco no solo se materializó en infraestructuras. Su liderazgo fue siempre cercano y dialogante, y su calidad humana fue destacada a lo largo del evento. A pesar de haber enfrentado momentos difíciles, como la difusión de noticias falsas que empañaron su imagen y lo llevaron a perder las elecciones, Paco nunca perdió su serenidad ni su fe en las personas. Para quienes lo conocieron, siempre será recordado como un hombre íntegro que puso el bienestar de Alhama por encima de cualquier interés personal.

 En palabras de Cabezas, “los aquí presentes no estamos por ninguna obligación ni por ningún compromiso, es porque todos, en uno u otro sentido te reconocemos en tu trabajo, en tu persona y en tu humanidad. Este homenaje no es más que una pequeña muestra de la amistad que sentimos por ti, Paco, porque fuiste un gran alcalde, pero sigues siendo un hombre íntegro. Y eso es lo que siempre recordaremos y celebraremos contigo”.

Andrés García Maldonado
 Andrés García Maldonado, quien, al no poder estar presente, envió un mensaje que leyó Juan Cabezas. En esta misiva, Andrés recordó los inicios de su colaboración con Paco Escobedo en 1987, cuando ambos trabajaron codo a codo para revitalizar el Festival de Alhama, que había quedado en pausa. Bajo la dirección de Escobedo, el festival alcanzó una de sus mejores etapas, atrayendo a artistas de renombre como Sergio Dalma y consolidándose como un referente musical.

 Además, García Maldonado destacó el papel fundamental de Escobedo en la recuperación de la ciudad árabe y en la conservación del patrimonio histórico de Alhama. Su capacidad para animar, aceptar y promover propuestas, independientemente de colores o sectores políticos, lo convirtió en un alcalde querido por todos, siempre enfocado en el bien común. A lo largo de su gestión, Paco Escobedo impulsó importantes iniciativas, como la recuperación del antiguo Teatro Cervantes, el reconocimiento de figuras históricas alhameñas y la institucionalización del Día Histórico de Alhama.

 Andrés también subrayó la capacidad de Escobedo para despolitizar las actividades culturales y trabajar de manera incansable para todos los alhameños, sin distinción de ideologías. Entre sus logros más destacados, mencionó la inauguración del monumento de la Solidaridad Universal, en honor a Alfonso X, que contó con la participación de decenas de alcaldes de pueblos afectados por los terremotos de 1884.

 En resumen, la intervención de Andrés García Maldonado pintó un retrato vívido de Paco Escobedo no solo como un alcalde comprometido con su pueblo, sino también como una persona generosa y siempre dispuesta a ayudar a los demás.

Su hija Rosario en su nombre y el de la familia
 En el homenaje sorpresa a Paco Escobedo, su hija Rosario tomó la palabra en representación de la familia, ofreciendo un emotivo discurso que resumió el sentir de todos los presentes. En pocas palabras, pero con gran emoción, Rosario agradeció a los amigos y vecinos por hacer de un día ordinario uno inolvidable, no solo para su padre, sino también para toda la familia Escobedo.

 Con la voz entrecortada y visible emoción, destacó lo orgullosos que se sienten al verlo rodeado de personas con un corazón tan grande. A pesar de que muchos asistentes insistieron en que no hacía falta agradecerles por estar ahí, Rosario subrayó que su presencia era un reconocimiento a la constancia de su padre, quien siempre dio lo mejor de sí al pueblo y a su entorno.

 Dirigiéndose a su padre, Rosario le recordó que merecía completamente este homenaje, aunque hubiera llegado al evento bajo la falsa idea de que era una simple comida familiar. "Al fin y al cabo, estamos en una comida familiar", dijo, refiriéndose al afecto y cariño que todos los presentes sentían por él, lo que hacía que el ambiente fuera, en verdad, como estar entre familia.

 Para cerrar su intervención, animó a su padre a disfrutar del momento, asegurando a los asistentes que Paco recordaría esta sorpresa para el resto de su vida.

Paco Bonilla, el humor por delante
 Durante el homenaje a Paco Escobedo, Paco Bonilla, de Ventas de Zafarraya, aportó un toque de humor y simpatía al evento. Con un estilo desenfadado y casi carnavalero, Bonilla relató varias anécdotas que vivió junto al homenajeado, arrancando risas y aplausos de los presentes.

 Con tono jovial, comenzó rememorando los viajes que compartió con Paco Escobedo a diversas ciudades, como Sevilla, Madrid o Granada. Lo más curioso de estos trayectos era que Paco tenía la costumbre de no parar para descansar, ni siquiera para comer. Bonilla contó cómo, en más de una ocasión, tuvo que conformarse con un simple bocadillo o, como sucedió una Navidad en Málaga, con dos polvorones que Paco sacó del bolsillo para evitar detenerse en un chiringuito.

 Con su característico humor, Bonilla recordó también un momento en que Paco le mostró un "chisme raro" en uno de esos viajes: un pendrive. Bonilla, sin saber qué era, pensó que podrían escuchar música, tal vez de los Rolling Stones. Para su sorpresa, el contenido del pendrive eran grabaciones sobre matemáticas y ciencias naturales que Paco tenía que preparar para un examen. "A las seis de la mañana, este tostón, ¿qué es?", comentó entre risas Bonilla, rememorando la escena.

 A pesar de los sacrificios y los madrugones, Paco Bonilla concluyó que siempre lo pasaron bien, porque Paco Escobedo, además de ser trabajador y constante, es una persona de buen corazón y nunca lo había visto enfadarse. Cerró su intervención asegurando que siempre sacarán adelante las situaciones, con la misma buena disposición que caracterizaba a su amigo y alcalde.

 Este toque alegre y humorístico fue un contraste perfecto en el emotivo homenaje, reflejando no solo el lado humano y cercano de Paco Escobedo, sino también la gran cantidad de vivencias que dejó entre aquellos que lo acompañaron durante su gestión.

Antonio Molina, Nono, inexpertos pero valientes, con recuerdo para Pepe Sánchez
 Antonio Molina, 'Nono', quien fue predecesor en el cargo a Paco Escobedo (aunque hubo otro alcalde entre ambos), habló con el alma, sin guion ni papeles. En su emotiva intervención, Nono destacó tres cualidades fundamentales de Paco Escobedo: su honradez, su lealtad, y la amistad que los unió a lo largo de los años.

 Recordó cómo, en 1987, siendo ambos jóvenes inexpertos —Nono con 32 años y Paco con 28— se enfrentaron a la política sin conocimientos previos. Rememoró cómo, en aquel entonces, apenas dos personas, con escasa preparación y sin haber sido concejales antes, tomaron las riendas del ayuntamiento de Alhama en un panorama político complejo, con siete partidos en la contienda. Pese a los desafíos, su motivación y ganas de trabajar hicieron que se propusieran "hacer cosas", enfrentando a la oposición con múltiples iniciativas que abrumaron a sus adversarios.

 Nono relató con cariño cómo ambos aprendieron sobre la marcha, y cómo su relación siempre estuvo marcada por una lealtad mutua que perduró durante años, a pesar de las dificultades políticas y las diferencias internas en el partido. Destacó la confianza que Paco depositó en él al nombrarlo teniente de alcalde, lo que, aunque causó tensiones, fue una muestra más de la profunda lealtad que los unía.

 Más allá de la política, Nono puso en valor la amistad que los conectó durante esos 16 años, no solo entre ellos, sino también entre sus familias, con sus hijos creciendo juntos. Tras retirarse de la política, ambos retomaron esa amistad, compartiendo ahora sus vivencias como abuelos.

 Antonio Molina cerró su intervención recordando que, aunque nunca buscaron seguridad económica en la política —entraron "sin red"—, lo que quedó al final fue la satisfacción de haber trabajado con honradez y haber cultivado una amistad que perdura en el tiempo. Los aplausos cerraron un discurso que, más allá de la política, reflejó la profunda conexión entre dos personas que compartieron no solo el liderazgo de un municipio, sino también una vida de camaradería y respeto.

 No también tuvo palabras para otro compañero alcalde que les precedió a ambos, Pepe Sánchez, de quien dijo que de haber estado vivo también estaría hoy ahí con ellos.

Pepe Entrena, reconocimiento desde el provincial
 Pepe Entrena, quien fuera presidente de la Diputación Provincial de Granada y alcalde de Villanueva Mesía al mismo tiempo que Paco Escobedo lo fue de Alhama de Granada, intervino con palabras de reconocimiento y afecto hacia el homenajeado. Entrena empezó agradeciendo la invitación y expresó su alegría por poder compartir este momento tan especial con Paco, su familia y amigos.

 Entrena destacó la amistad y compañerismo que forjó con Paco durante sus años como alcalde. Aunque se definió como una persona seria, y no carnavalero como Paco, recordó con cariño la relación cercana que mantuvieron en aquellos tiempos. Resaltó también su orgullo de pertenecer al Partido Socialista, una formación con 145 años de historia que, según él, ha perdurado gracias a personas como Paco, quienes con principios sólidos y una visión clara de la sociedad han contribuido al crecimiento y fortaleza del partido.

 Pepe subrayó los valores de integridad, honradez y el compromiso con la justicia social que siempre ha visto en Paco, mencionando que gracias a esas cualidades el partido ha alcanzado la grandeza que tiene hoy en día.

 Pepe Entrena cerró su intervención felicitando a Paco por el reconocimiento, expresando lo merecido que era este homenaje, y recordándole lo afortunado que es de estar rodeado de tantas personas que lo aprecian. Concluyó con una emotiva frase: "Cuídate, te queremos una “jartá”, y “palante”.

Gerardo Molina resaltó su honestidad
 Gerardo Molina Gómez, amigo cercano de Paco Escobedo, ofreció unas palabras cargadas de admiración y afecto en su intervención. Comenzó agradeciendo la oportunidad de compartir este homenaje y expresó su profundo aprecio hacia Paco, a quien define como un trabajador, honesto, leal y comprometido.

 Gerardo recordó la infancia de Paco, señalando cómo, desde muy pequeño, ayudaba a su abuela Encarnación en el puesto de churros, una muestra temprana de su incansable espíritu trabajador. También evocó los tiempos en los que ambos compartieron experiencias en Alhama, creciendo juntos y enfrentando los desafíos de una generación que vivió el final de la dictadura y el inicio de una nueva etapa para España.

 Destacó el papel del instituto de Alhama, que les abrió las puertas a una mejor educación, permitiendo que muchas familias humildes pudieran ver a sus hijos convertirse en profesionales. Ambos, Paco y Gerardo, se trasladaron a Granada para estudiar en la universidad en condiciones difíciles, pero lograron cumplir sus metas.

 Uno de los aspectos más valiosos que Gerardo resaltó fue la honestidad de Paco, señalando que, en los años que estuvo en el ayuntamiento, nunca se aprovechó de su posición ni mostró favoritismos, tratando a todos con igualdad. La lealtad de Paco también fue un tema central, considerando que, en una época donde muchos cambian de ideología fácilmente, Paco siempre permaneció fiel a sus principios y a su partido.
Finalmente, Gerardo elogió el compromiso de Paco no solo con su partido, sino también con las clases más desfavorecidas, recordando la importancia de no olvidar de dónde venimos. Con un toque personal, Gerardo mencionó que tanto él como Paco tienen problemas de salud relacionados con el corazón, y cerró su discurso deseándole que se cuide y disfrute de su jubilación.

 El discurso concluyó con un aplauso, destacando la profunda conexión entre los amigos y el reconocimiento mutuo de una vida bien vivida y dedicada al servicio de los demás.

Juan Antonio Martín, orgullo de rendir homenaje a un político de gran trayectoria
 Juan Antonio Martín, Secretario de Organización del PSOE de Alhama, dedicó unas palabras llenas de agradecimiento y admiración hacia Paco Escobedo en su intervención. Comenzó expresando su orgullo por poder rendir homenaje a un político de gran trayectoria, Francisco Escobedo, quien desde los años 80 dedicó su vida al servicio público, primero como concejal y luego como alcalde de Alhama de Granada.

 Juan Antonio destacó el compromiso de Paco con los valores socialistas, subrayando su papel como un político de raza que guió a Alhama durante tres legislaturas consecutivas. También recordó los momentos difíciles, como la derrota electoral de 2011, pero enfatizó cómo Paco, incluso en medio de ataques personales, mantuvo su dignidad y espíritu de lucha, permaneciendo como concejal hasta 2015.

 Reconoció el sacrificio que implicó su dedicación a la política, muchas veces a costa de tiempo con su familia, y resaltó que su entrega y servicio público son una fuente de inspiración para todos los miembros del partido.

Concluyó agradeciendo a Paco por su incansable labor y por el legado que ha dejado.

José Miguel Valderrama, en Paco un apoyo que jamás le falló
 José Miguel Valderrama, en su intervención, expresó su profundo agradecimiento hacia Paco Escobedo, recordando cómo comenzó en la política de su mano siendo apenas un niño. Contó cómo Paco lo introdujo en ese mundo, pidiendo incluso permiso a sus padres para que pudiera pegar carteles en los eventos políticos, lo que le dejó una huella imborrable.

 José Miguel destacó especialmente la lealtad de Paco, no solo a sus ideales, sino también en la amistad. Enfatizó que Paco siempre estuvo a su lado, apoyándolo en los momentos buenos y malos, nunca con una mala actitud, sino siempre con soluciones por delante. Para él, Paco ha sido un verdadero amigo que jamás le falló.

 En su discurso también dedicó unas palabras de agradecimiento a la familia de Paco, especialmente a Charo, Alfonso, Salva y Rosario, reconociendo que ellos fueron el pilar fundamental en su vida, permitiéndole dedicar tanto tiempo a los demás.

 Concluyó llamando a Paco maestro, recibiendo un cálido aplauso del público presente.

Salvador Zamora, una trayectoria paralela
 Salvador Zamora, compañero de partido de Paco Escobedo y exalcalde de Zafarraya, comenzó su intervención recordando que conoció a Paco hace 50 años, cuando ambos estudiaban en el instituto. Desde entonces, mantuvieron una amistad que se ha mantenido intacta a lo largo de los años, lo que Salvador destacó como lo más importante en la ocasión del homenaje.

 Comentó cómo sus vidas siguieron trayectorias paralelas, empezando juntos en el instituto, y luego él dedicándose a ser autónomo mientras Paco se convertía en maestro. Ambos también coincidieron en la política desde jóvenes: Salvador a los 18 años ya era militante del PSOE y concejal, mientras que Paco entraría un poco más tarde. Sin embargo, compartieron su tiempo como alcaldes, Salvador en Zafarraya y Paco en Alhama, además de trabajar juntos en la mancomunidad, donde fortalecieron aún más su relación y sus logros conjuntos.

 Zamora quiso ser breve en su mensaje, pero aprovechó para agradecer la amistad de toda la vida que han compartido, destacando el cariño que mucha gente le tiene a Paco. Concluyó pidiéndole que se cuidara a sí mismo y a su familia, ya que ambos ya están jubilados, pero la amistad y el apoyo mutuo permanecen fuertes.

Sandra García, mi actividad política comenzó con Paco
 Sandra García, actual secretaria general del PSOE local, comenzó su intervención agradeciendo a Javi, Juan y a todos los presentes por hacer posible el homenaje a Paco Escobedo. En nombre de su partido, quiso dedicarle unas palabras a quien consideraba no solo un compañero, sino también un maestro y una persona de gran integridad.

 Sandra recordó cómo comenzó su trayectoria política de la mano de Paco en 1999, cuando él la invitó a unirse a su candidatura para las elecciones municipales. Paco, ya habiendo sido alcalde, ocupaba el segundo lugar en la lista y la animó a participar en un momento políticamente complicado, con el partido en la oposición tras una moción de censura. Esta oportunidad no solo le permitió trabajar por Alhama, sino también conocer de cerca la honestidad, lealtad y amor por su pueblo que siempre caracterizaron a Paco.

 Destacó la entrega de Paco a los demás, especialmente en la política, y cómo su familia, aunque muchas veces afectada por su ausencia, siempre estuvo presente. Las reuniones, ya fueran en su casa o en el partido, siempre giraban en torno a buscar lo mejor para Alhama, y Paco siempre pensaba en lo público, no en intereses personales.

 Sandra también quiso reconocer al equipo de hombres y mujeres que siempre acompañaron a Paco, quienes compartían los mismos valores de honestidad, lealtad y compromiso con lo público. Afirmó que Paco tenía un gran ojo para rodearse de buenas personas, y que, gracias a su experiencia y esos valores, había logrado muchas cosas para el pueblo.

 Concluyó mencionando que la política tiene sus desafíos, comparándola con una rosa que tiene espinas, pero también con pétalos suaves que representan los buenos momentos y amistades que se forjan en el camino. Como muestra de afecto, el partido le hizo entrega de un pequeño detalle: una pluma dedicada, para que siempre la lleve en su corazón.

Paco Escobedo, emoción y orgullo de familia y amigos
 La intervención de Paco Escobedo fue profundamente emotiva, con su voz entrecortada por la emoción, al punto que su esposa e hijos se acercaron para apoyarlo y permitirle continuar. Agradeció de corazón a todos los presentes por la inolvidable tarde que le estaban brindando.

 En primer lugar, dedicó unas palabras llenas de gratitud a Charo, su mujer, reconociendo su apoyo constante, tanto en los buenos momentos como en los más difíciles, siempre a su lado cuando él atravesaba dificultades. Este gesto fue recibido con un cálido aplauso del público.

 Luego, Paco se dirigió a sus tres hijos, Alfonso, Salvador y Rosario, pidiendo disculpas por las veces en las que su trabajo le impidió estar presente en momentos importantes de sus vidas. Agradeció la comprensión y el cariño que siempre le habían demostrado, y destacó su esfuerzo actual por recuperar esos momentos perdidos. Sus palabras hacia ellos también fueron recibidas con otro aplauso emotivo.

 Además, mencionó a Sonia y Ernesto, a quienes consideraba parte de su familia, y expresó su inmensa satisfacción por sus nietos, a quienes describió como su mayor orgullo.

 En cuanto a su carrera política, Paco agradeció a todos los compañeros y amigos que lo habían acompañado a lo largo de su trayectoria, tanto en los buenos como en los malos momentos. Reconoció el esfuerzo colectivo para lograr los objetivos a pesar de las limitaciones. Afirmó que los logros conseguidos eran el resultado del trabajo de todos y todas, sin querer nombrar a nadie en particular para no dejar a nadie fuera.

 Finalmente, Paco cerró su intervención con una reflexión: "El mayor patrimonio en la vida es la familia y los amigos". Expresó su profundo agradecimiento a su familia, a quienes describió como su mayor orgullo, y a los amigos presentes, señalando que su verdadero patrimonio eran ellos. Con estas palabras, concluyó su emotivo discurso, rodeado del cariño y respeto de todos los asistentes.

Final emocionante
 Y este fue uno de los momentos más emocionantes de la jornada llegó cuando Paco, rodeado por su esposa Charo y sus hijos, intentó expresar su agradecimiento. Visiblemente conmovido, tuvo que detenerse en varias ocasiones debido a la emoción. Con la voz quebrada, agradeció a su familia por el apoyo incondicional que siempre le han brindado, especialmente durante los momentos en los que la política lo mantuvo alejado de ellos. Reconoció el sacrificio de su esposa y de sus hijos, quienes a menudo lo vieron ausente en momentos importantes de sus vidas, y prometió que ahora intenta recuperar esos momentos con ellos.

 Paco también quiso agradecer a todos los amigos y vecinos presentes por el afecto y el respeto que siempre le han mostrado. Para él, el mayor tesoro que uno puede tener en la vida no es material, sino el cariño de la familia y los amigos, y sentirse rodeado por tantos de ellos en ese día fue un verdadero privilegio.

 El acto concluyó con un largo aplauso, en el que se reconoció no solo la trayectoria de Paco Escobedo como servidor público, sino también su calidad humana. Más allá de la política, Paco siempre será recordado por su dedicación a los demás, su amistad sincera y su amor por su pueblo. El homenaje reflejó el inmenso afecto que Alhama siente por él, una figura que ha dejado marca en la historia y en los corazones de quienes lo conocen, y el esfuerzo por Alhama lo llevan disfrutando los alhameños desde que inició su gestión.

La espera de la sorpresa

La llegada de Paco

El agradecimiento a todos

El reconocimiento y los recuerdos

Las intervenciones

Paco emocionado arropado por su familia

El libro, un compendio de todo, llamó la atención

En las imágenes de arriba y abajo, durante la realización del mismo

 

Paco Escobedo, como alcalde trabajador y honrado, y como persona y amigo un hombre Íntegro

 El paso del tiempo no borra el legado de aquellos que, con convicción y esfuerzo, dedicaron su vida al servicio de los demás. Paco fue alcalde de Alhama en una época donde las promesas se convertían en realidad, y las necesidades de un pueblo tomaban forma a través de su trabajo. Progresista y socialista, Paco dejó huella en nuestra Alhama, y a la vista está, puesto que prácticamente todos los servicios de los que dispone nuestro pueblo fueron gracias a él o terminados tras la gestión inicial de otro gran político y amigo como lo es Antonio Molina, Nono.

 Durante tu mandato, Alhama vivió una época de progreso. Gracias a tu visión y tu capacidad para gestionar, se hicieron las instalaciones deportivas, símbolo de la apuesta por la juventud y el bienestar. El polideportivo municipal se convirtió en un espacio de encuentro y de aglutinamiento de la juventud, pero no solo se atendió a los jóvenes, Paco también impulsó la escuela infantil, asegurando que el futuro de Alhama comenzara desde la educación más temprana. Y sin dejar de luchar por mejorar el centro de mayores, entre otras muchas cosas.

 Paco supo cuidar de todos los sectores de la población. Bajo su liderazgo, empezó a funcionar el parque de bomberos, las calles de Alhama, muchas de ellas necesitadas de arreglos, recibieron las mejoras y el asfaltado que hicieron más transitable la vida diaria. Recuerdo tus gestiones para procurar transporte para facilitar los domingos por la tarde-noche el viaje de los estudiantes a Granada, ahora que un pueblo considerado turístico ha mermado este transporte careciendo por completo de él los sábados que no hay ninguna comunicación, toda una vergüenza el transporte público en la Alhama de hoy. Lógicamente no se puede evaluar todo lo que hizo porque llevaría mucho tiempo, pero es que además todo esto está a la vista simplemente dándose un paseo por nuestro pueblo, porque desde entonces, no se ha hecho absolutamente nada. En definitiva, me gustaría resumirlo en que “Paco no solo era un alcalde preocupado por las infraestructuras; era un alcalde preocupado por las personas, pero de ahí el avance de las infraestructuras”.

 El esfuerzo y el compromiso de Paco fueron evidentes en cada uno de sus proyectos. Como decía el líder socialista francés Léon Blum: "El socialismo no es sólo una teoría política, sino también un acto de fe en la capacidad del ser humano de mejorar su entorno." Paco no solo creía en esta capacidad, sino que la demostró cada día durante su mandato, dedicando cuerpo y alma a la mejora de Alhama.

El Injusto peso de las falsedades

 Sin embargo, la política a menudo puede ser ingrata, y Paco no fue ajeno a las injusticias que conlleva la envidia y la política mal entendida. Las noticias falsas, lamentablemente, lo alcanzaron. Se difundieron rumores malintencionados que empañaron su imagen y lo llevaron a perder unas elecciones, marcando el final de su gestión hace ya más de una década. Fue un golpe duro, no solo para él, sino para todos aquellos que conocíamos la verdad de su integridad y dedicación.

 El líder socialista alemán Willy Brandt dijo en una ocasión: "La política es el arte de lo posible." Paco encarnó esta frase en su trabajo diario, mostrando que lo posible no siempre está en las promesas vacías, sino en el esfuerzo constante y el deseo de mejorar la vida de los demás. Otro de los líderes que me dejaron huella porque creo que fue uno de los mejores exponentes de la socialdemocracia, y que además también lo predicaba con el ejemplo, y logró un alto nivel de bienestar para sus compatriotas suecos, fue Olof Palme, otro referente del socialismo, afirmaba: "La política tiene que ver con los valores." Y Paco, a lo largo de su vida pública, demostró que la ética y el compromiso social siempre fueron sus valores más importantes.

 A lo largo de su mandato, Paco, a mi entender, porque tuvimos que compartir alguna actividad en favor de Alhama juntos, como fue el tema de la radio, lo vi defender valores que siempre han sido el pilar del socialismo democrático. Como dijo Felipe González, "La política no es para vivir de ella, sino para que la gente viva mejor." Y eso es precisamente lo que Paco hizo por Alhama: transformar la política en una herramienta para mejorar la vida de todos, independientemente de su condición social, económica o política, y, aunque pueda parecer que estas palabras pueden ser grandilocuentes, o porque son por compromiso, los aquí presentes no estamos por ninguna obligación ni por ningún compromiso, es porque todos, en uno u otro sentido te lo reconocemos en tu trabajo, en tu persona y en tu humanidad.

Un hombre, un amigo con corazón

 Por eso, más allá de tu gestión, quienes conocimos a Paco en la actividad pública podemos dar fe de su calidad humana. Su trato siempre fue cercano, y siempre dispuesto a dialogar. La política, a menudo cruel, no pudo cambiar su esencia: un hombre bueno, con principios, que enfrentó los momentos más oscuros con dignidad y sin rencor. No importaron los rumores ni las injusticias, Paco siempre mantuvo su serenidad y su fe en las personas.

 Es cierto que los momentos difíciles le afectaron profundamente, incluso en su salud, porque ver cómo se intentaba desmontar tu imagen pública por mentiras fue una experiencia amarga. Pero, como decía Jean Jaurès, figura clave del socialismo: "La política no es sólo un juego de poder, es el reflejo de la lucha por la dignidad humana." Paco vivió esa lucha, y los que estuvimos a su lado sabemos que salió victorioso en su compromiso por la dignidad y el bien común.

 En palabras de Salvador Allende, el presidente socialista chileno que también enfrentó la injusticia política, aunque en este caso de una forma mucho más dramática, "La historia es nuestra, y la hacen los pueblos." Paco siempre tuvo claro que su lugar estaba con el pueblo, y en cada acción de su gobierno buscaba mejorar las condiciones de vida de los alhameños. Su cercanía y su integridad fueron el reflejo de un hombre que comprendió que la política debe ser una herramienta para el bienestar colectivo.

Reconocimiento y aprecio de tus amigos

 Hoy, más de una década después, queremos rendirle homenaje a Paco, no solo por tu trabajo, sino por su valor en tiempos difíciles. La política, con toda su aspereza, no fue capaz de doblegarte, y tu legado está ahí. Como amigos y compañeros, reconocemos tu fortaleza y agradecemos todo lo que se hizo por Alhama en tus mandatos. La historia será justa, y el tiempo está poniendo a cada uno en su lugar.

 No fue fácil ver cómo Paco, una persona noble y trabajadora, fue objeto de calumnias que lo apartaron de la política activa. Pero, para nosotros, tus amigos, tu legado no se define por los rumores ni por derrotas electorales. Se define por tu bondad, tu cercanía y tu capacidad para escuchar y actuar en beneficio de la gente. Como dijo el líder socialista Pablo Iglesias: "No hay mejor recompensa para el político honesto que el reconocimiento de su pueblo." Y en este reconocimiento está el de hoy, el de tus amigos el de gente que te quiere y aprecia.

 Todos los que fuimos testigos de tu gestión y cercanía nos sentimos orgullosos de poder llamarte amigo. Este homenaje no es más que una pequeña muestra de la amistad que sentimos por ti. Paco, no solo fuiste un gran alcalde, eso ya pasó; fuiste y sigues siendo un hombre íntegro, y eso es algo que siempre recordaremos y celebraremos contigo.

Poema

 Los que me conocéis, sabéis de mi afición por Antonio Machado, y quiero cerrar con él, con estas cuatro líneas de un verso que describen bien la grandeza de quienes, como Paco, caminan por la vida dejando huella:

“Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.”

 Paco, tu camino ha sido construido con esfuerzo y con la voluntad de servir a los demás. Hoy, todos los que te conocemos, te lo recordamos y te lo agradecemos. Tu labor no fue en vano, y tu legado sigue vivo en nuestro corazón, en el corazón de tus amigos, y está ahí, a la vista de todos los alhameños.

Juan Cabezas Moreno

 

 

 

Rincón de la Victoria, 12 de septiembre de 2024

Querido Paco, escueta y profundamente:

J amás he olvidado aquella tarde del 27 de junio de 1987, día siguiente al de vuestra toma de posesión como miembros de la Corporación Municipal, en el que me visitasteis Nono Molina, ya como alcalde, y tú, como delegado de Cultura, en mi casa de Rincón de la Victoria para proponerme que volviese a la dirección del Festival de Alhama.

 No os costó nada convencerme, desde que lo creé 1966, en pocas ediciones dejé de prestarle algún apoyo directa o indirectamente como presidente de los Festivales de Andalucía, pero hasta ese día, lo cierto es que había cierto distanciamiento, provocado por quien lograra que mi entrega a Alhama mermara durante unos años.

 A partir de entonces comencé a colaborar contigo y tus concejalas de Cultura, y todo cambió. Llegamos a un punto de actividad y sugerencias, que siempre tratamos y convenimos entre ambos, que dieron lugar a la necesidad de poner nuevamente en marcha el Patronato de Estudios Alhameños como medio de participación y encauce, como establecían sus Estatutos de 1973, en las actividades propias en las que el Ayuntamiento nos prestaba más que su colaboración tanto por medio de la Alcaldía como de la Delegación de Cultura.

 Ya, siendo tú concejal, la labor fue buena y el entendimiento entre nosotros mejor. Ello era posible a tu talante político, a tu forma de ser y a tu amor a Alhama, conjugándose todo ello con un siempre estar dispuesto tanto a proponer como a animar a lo que se proponía fuese lo que fuese, pero siempre que beneficiase al conjunto de los alhameños y a Alhama de alguna manera. Así, por ejemplo, el Festival consiguió una de sus mejores etapas de su historia y, como muestra una edición, la que tuvimos de “Sergio Dalma como fin de fiestas y “Rumba Pop” como ganador con la canción “Tacita de plata” que sonó aquel verano por toda Andalucía. Y así una variada actividad que como la de delegado de Cultura te llevó a lo más alto. Sobre todo, por una razón esencial, sabías animar a hacer cosas, y también aceptarlas, sin mirar colores o sectores políticos, propuestas y trabajos de todos dándoles todo tu apoyo.

 Y de ahí, después, los mandatos como alcalde. Y aquí quiero comenzar recordando a uno de los mejores alcaldes y personas que he conocido en mi vida. Sí, Pedro Aparicio: “Probablemente, Andrés, la labor política se puede recorrer montado en uno de estos tres caballos que nos llevan por la vida: el azar, la generosidad o la ambición”. Recuerda tal dicho para que tú no interpretes como exageradas, ni nuestros amigos ahí presentes lo hagan simplemente como cortés, la afirmación de que fuiste y, por supuesto, sigues siendo un ejemplo humano de disponibilidad a favor de los demás, de generosidad.

 Necesitaría folios y folios para narrar tu entrega y, sobre todo, tu forma de llevarla a cabo. Pondré unos ejemplos vividos en mi colaboración contigo y por Alhama, sobre todo desde 1999 a 2011 y, aunque cuantos te conocen, no los necesitan para tenerte el justo aprecio que te tienen, es oportuno que queden por escrito para siempre, definen a la persona que eres y al alcalde que fuiste.

 Desde el primer instante de tu condición de concejal, evidenciaste la necesidad de conservación y recuperación de la Ciudad Árabe, uno de los primeros asuntos que también asumió el Patronato para colaborar con el Ayuntamiento, posibilidad de recuperar toda la manzana del viejo “Teatro Cervantes”, ya perdida como mercado municipal, con la sede de la Sociedad Económica de Amigos del País, apoyo total a la declaración e institucionalización del “Día Histórico de Alhama” con los “Premios de Alhama” y la “Proclama de Alhama” convirtiéndose ésta en oficial por unanimidad de toda la Corporación Municipal, reconocimiento a hechos y personajes alhameños mediante colocación de placas, entre otras la conjunta de Francisco Calvo Muñoz y Nicasio Montes Sierra, dos figuras alhameñas señeras durante un tiempo del siglo XIX y principios del XX, de distintos signos políticos pero de los más relevantes de su tiempo a nivel nacional, democráticos y constitucionalistas en todo momento, con los nombres que acabo de citar, con la inauguración de una placa conjunta dedicada a ambos distes memoria y respeto a ambos, la “Placa de Alhama a la Constitución” realmente una belleza sumamente simbólica en su clase.

 Y entre variados reconocimientos históricos más como el Bicentenario de la entrada de los franceses en Alhama en el día de la Candelaria de 1810, o el que un buen socialista como eres tú, hiciera posible el que se volviese a levantar el “Monumento a la Solidaridad Universal en la Figura del Rey Alfonso XII”, en la plaza del mismo, reproduciendo exactamente la que en su día echaron abajo, dejando bien clara que no hay que confundir -como hacen tantos- lo justo con lo inoportuno. Convirtiéndose el acto inaugural en uno de los más importantes de la Historia de Alhama, con asistencia de decenas y decenas de alcaldes de los pueblos afectados por los Terremotos de 1884, así como primeras autoridades y representaciones de Granada y Málaga.

 Y tantas y tantas otras cosas, como el apoyo a nuestros medios de Comunicación como bien hablará Juan, o el que la Bandera de Alhama estuviese a la vista en el Paseo del Cine y en la plaza del Duque de Mandas, las múltiples publicaciones sobre Alhama y la comarca, la serie de conferencias, charlas, reuniones culturales, etc. abiertas a todos, la constante promoción cultural, la conmemoración de la muerte de Isabel la Católica en 2004, o la de la construcción de la Iglesia de la Encarnación, y así actividades que siempre despolitizaste y, en tu lealtad de alcalde y político, supiste trabajar y entregarte para todos los alhameños, sin mirar ideologías, colores o pretensiones partidistas. Realizando tu tarea diaria en la alcaldía y viajando allí donde fuese necesario para resolver problemas y conseguir ayudas y apoyos para Alhama, y para tantos alhameños en concreto, fuesen de la tendencia política que fuesen.
No justifico por qué no estamos ahí contigo y con Charo, Mari Carmen y yo, -a la que le des nuestros abrazos-, y por lo tanto con tan excelentes amigos comunes, porque tú sabes, y muy bien, que si no es así es porque la causa es insuperable como manifesté a Javi y a Raúl.

Abrazos para ti y Charo.
Mari Carmen y Andrés 

 

Multimedios
- Antonio Arenas
- Pablo Ruiz
- Javi M. Castañeda
- Juan Cabezas