A una hora de sonar las campanadas de fin de año, en el paseo del cisne de Alhama de Granada, todo estaba preparado para recibir el año nuevo 2020.
A partir de la una de la una de la madrugada comenzaba la fiesta, en una carpa acondicionada perfectamente para este evento. El interior era confortable con una temperatura ideal, un sonido profesional más que suficiente, iluminación inteligente, aperitivos, dulces y un ambiente musical que se fue adaptando a todos los públicos asistentes conforme iba avanzando la noche, eran todos los ingredientes para lograr prácticamente un lleno absoluto de público y una duración hasta el amanecer, con la música de Salva Ortiz.