Que sea en los bares


 Estimado Grupo de gobierno del PP de Alhama: Nada tengo contra vosotros a nivel personal, es más, incluso con algún concejal he mantenido relaciones cordiales a lo largo de toda esta legislatura como él mismo podrá ratificar. No deseo, por tanto, que dejéis el gobierno para pasar a la oposición por razones de inquina, ni siquiera personales. En estos cuatro años en los que habéis gobernado, mi vida personal no se ha visto afectada en demasía ni para bien ni para mal por vuestra gestión.

  Pero no pasa lo mismo con todos mis vecinos, paisanos o no, que sí que tienen quejas respecto a vuestra forma de hacer las cosas o de no hacerlas, de gestionar lo público entremezclándolo con lo privado y el beneficio a los amigos, públicas se han hecho las denuncias en ese sentido a través de este medio, nada me invento ni presto oídos a rumores; en no pocas ocasiones hemos sentido vergüenza ajena con alguna intervención de alguno de vosotros en un pleno, por el lenguaje, más de taberna que del salón de plenos, empleado. Me dicen que habéis generado miedo a posibles represalias, que vuestra forma de gobernar ha sido prepotente y casi autoritaria y que, pese a que presumís de lo contrario, sí que miráis el carné, aunque a veces os ha bastado con la mera presunción, a la hora de dar o no dar trabajo y no me refiero, obviamente al de identidad.

 Y, ¿qué decir de vuestro aprovechamiento del trabajo de otros para vuestro lucimiento? Aquí sí tengo datos concretos de gente que está de vosotros bastante hartos, cosa que digo por que como hay tanta gente en la misma situación tampoco doy muchas pistas. También hay otra cuestión puntual, que en su momento me indignó, pero de la cual nada diré, porque de determinados colectivos no me parece ético hablar, a menos que ellos me lo pidan.

 Andáis estos días dando cuentas de lo genial de vuestra gestión, del capital que habéis ahorrado y de todas las cosas que habéis llevado a cabo. Era vuestro deber, para eso os votaron y cobráis por vuestra gestión, lo que no me parece mal, todo trabajador merece su salario. Pero aparte de dar cuenta de lo mal que recibisteis el ayuntamiento y de lo bien que lo habéis dejado, (siempre según vosotros) poca cosa más veo como proyecto de futuro. Porque lo de la legislatura del agua, lo de recuperar agua caliente y fría para el uso del pueblo, perdonad que os lo diga, pero me suena a “los ciruelos de Gallardo, por si cargan” y, francamente, como proyecto ilusionador parece carecer de fuerza, si hemos de ver el resultado de la charla informativa sobre el agua caliente con el que iniciasteis la precampaña (esto es una maldad mía, sé que sólo queríais informar y que no os movía afán electoralista alguno).

 Por todo ello os deseo que hagáis en la oposición el mismo buen trabajo que decís haber llevado a cabo en el gobierno, si es que el pueblo decide poneros ahí. Si no es así, si el pueblo nuevamente os da una amplia victoria suficiente para gobernar, os felicito y os felicitaré tanto personal como por escrito porque la cortesía es mi norma y porque no temo caer en desgracia ante vosotros. No temo caer en desgracia porque nada os debo a vosotros, ni a ningún otro partido y nada espero de vosotros, ni de ningún otro partido. Si alguna vez algo pido al Grupo de gobierno que salga de las próximas elecciones, únicamente será lo que en justicia y derecho me corresponda en lo que a mis derechos como ciudadano afecte y nunca favor, prerrogativa ni privilegio.

 Con esa libertad que me da no deberos nada, excepto la cortesía que a todos debo y de no esperar nada a nivel personal del grupo de gobierno, que salga de las urnas, que espero que sea progresista, y así lo digo claramente, os deseo una vida próspera y feliz, salud, suerte en vuestras actividades profesionales y si nos vemos, que sea en los bares en los cuales no me importará tomar algo con vosotros, pero donde no quiero veros de nuevo es gobernando mi pueblo.

 Vuestro ciudadano al que debéis servir, como a todos, no lo olvidéis nunca, ya sea en el gobierno o la oposición.

 Antonio Gordo Villarraso.