Por esta zona de la civilización cristiana en que nos ha tocado vivir a los jameños de hoy, se entiende que el año empieza el 1 de enero; la tradición, es bastante antigua, así que no se seré yo quien la discuta.
Con todo, creo que debería empezar en septiembre, que es cuando empieza todo verdaderamente: El curso académico, el curso político, el año judicial... se me dirá que esto no es inicio sino reinicio tras el tiempo de ocio del periodo vacacional, lo cual no deja de ser cierto, pero, entre los últimos días de diciembre y los primeros de enero, cambia, poco mas que el calendario, mientras que en estos últimos días de agosto y los primeros de septiembre, quien mas, quien menos, está deseando regresar de nuevo a su actividad cotidiana, los niños, esperan ir al colegio de nuevo, las madres esperan aun con más ansia ese inicio del curso, todos esperamos que la programación televisiva, tenga un mínimo de calidad, con el estreno de la nueva temporada..
Aun hay otra razón, esta más propiamente jameña, y es nuestra Feria de Septiembre, que sin hacer de menos a las fiestas de junio, antaño Feria de Junio, desde mi particular punto de vista es mas atrayente, precisamente por coincidir con los últimos coletazos del verano.
Recuerdo que de niño, el final del verano era una época agridulce por ser el fin de las vacaciones, pero también estaba ya deseando reencontrarme con mis condiscípulos y profesores; un hoy el olor de una goma de borrar, el tacto de una libreta nueva o algo tan simple como estrenar un boli me producen sensaciones placenteras.
Y es que de las cuatro estaciones, mi preferida, es, casi no hace falta decirlo, el otoño; sus tardes cortas pero intensas, sus colores ocres y rojizos, sus temperaturas templadas, todo en esa época me gusta especialmente.
Dispongámonos un año más a disfrutar de nuestra Feria de Septiembre, que casi ya está a la vuelta de la esquina y feliz re entrada en la vida cotidiana para todos.
Aun hay otra razón, esta más propiamente jameña, y es nuestra Feria de Septiembre, que sin hacer de menos a las fiestas de junio, antaño Feria de Junio, desde mi particular punto de vista es mas atrayente, precisamente por coincidir con los últimos coletazos del verano.
Recuerdo que de niño, el final del verano era una época agridulce por ser el fin de las vacaciones, pero también estaba ya deseando reencontrarme con mis condiscípulos y profesores; un hoy el olor de una goma de borrar, el tacto de una libreta nueva o algo tan simple como estrenar un boli me producen sensaciones placenteras.
Y es que de las cuatro estaciones, mi preferida, es, casi no hace falta decirlo, el otoño; sus tardes cortas pero intensas, sus colores ocres y rojizos, sus temperaturas templadas, todo en esa época me gusta especialmente.
Dispongámonos un año más a disfrutar de nuestra Feria de Septiembre, que casi ya está a la vuelta de la esquina y feliz re entrada en la vida cotidiana para todos.