El poema 'Cicatriz de piedra' ha dado a la alhameña, Ana María García Moreno, el premio de poesía local.
La hija de Juan Miguel, 'Ponche' y Ana María tiene 42 años y ha sido madre hace ocho meses. Desde siempre le ha gustado escribir, pero ha sido ahora cuando se ha decidido a participar en el veterano certamen literario que convoca anualmente la biblioteca municipal.
Como persona bien nacida, Ana María es agradecida, empezando por su familia y también a los integrantes del jurado que han tenido a bien concederle el premio consistente en diploma y 250 euros que recibirá el viernes, 1 de julio, en el ayuntamiento de Alhama. Jurado que ha estado compuesto por las profesoras del IES Alhama, Silvia Moreno Fernández, María Dolores Sáez Martínez y Antonia Muñoz Romero, además de Juan Calderón Rivera y Mari Paz García Prados, en calidad de presidente y secretaria, del mismo.
Cuando la llamamos por primera vez nos pide lo hagamos un poco más tarde pues Alejandro, su bebé, acaba de quedarse dormido. Cuando ya podemos hablar nos cuenta que tiene un hermano que se llama José Manuel y que eligió el seudónimo de Tiza porque le recuerda su niñez cuando jugaba con sus amigas al 'piso' que pintaban con tiza en la calzada. También que, aunque conocía la existencia del certamen literario y tiene bastante escrito, no ha sido hasta cuando se ha animado a participar. Por supuesto su alhameñismo sale a flote desde el principio pues, aunque se encuentra muy a gusto en La Zubia sigue muy vinculada con Alhama donde viaja con frecuencia. Cuando le consultamos sobre sus recuerdos escolares nos cuenta que asistió al colegio Cervantes, en el que recuerda especialmente a su maestro, Antonio Guerrero, quien de alguna manera le transmitió su pasión por la poesía que siguió cultivando en sus años de instituto donde fue creciendo su interés por poetas como Pablo Neruda, Sor Juana de la Cruz, Dulce María Loynaz, Mario Benedetti, Elvira Sastre. También aquí tiene algo que ver su padre como compositor de coplillas carnavaleras para murga de La Cueva.
Cuando la conversación deriva al Camino de los Ángeles no puede evitar emocionarse pues acuden sus muchos recuerdos vividos con su abuela y tías que durante tantos años han estado al cuidado de la ermita de Los Ángeles. Y eso es 'Cicatriz de piedra', un cúmulo de recuerdos en los que están muy presentes los tajos cuya cicatriz, si se observan desde una vista aérea y la cicatriz en su cuerpo, pues su hijo nació por cesárea, le han inspirado el poema ganador. Las calles empedradas de Alhama, Pila de la Carrera, río Marchán, los Tajos, el campanario de la parroquia, el agua caliente que le ha dado nombre al pueblo, la fiesta del carnaval sin nombrarlo…, desfilan por sus versos. Llegados a este punto, sentencia: «Yo añoro todo de Alhama y me considero muy alhameña, pero es difícil meter en un poema todo lo bello de Alhama». Así mismo, reconoce que este galardón supone «un gran orgullo como alhameña que soy, no solo para mi sino también para mi familia». Eso sin dejar atrás el efecto terapéutico que le produce pues le sirve «como válvula de escape, me hace sentir bien y este premio me anima a participar en otros certámenes».