Los inmigrantes pagan 'rentas abusivas' en Zafarraya por vivir hacinados



Cáritas, la Mancomunidad de Alhama y los servicios sociales comunitarios advierten de las precarias condiciones de este colectivo de trabajadores.


03/08/2006.- Técnicos de Cáritas así como de la Mancomunidad de municipios de Alhama, encargada de la gestión del centro de atención social al inmigrante de Zafarraya, han advertido de las precarias condiciones en la que se encuentran muchos inmigrantes de la zona. Aseguran que viven hacinados en cortijos rurales diseminados por la zona.

 En muchas ocasiones, añaden, los propietarios de estas naves agrícolas prácticamente abandonadas se aprovechan del desconocimiento del inmigrante «para cobrarles un precio abusivo a cambio de techo». En la mayoría de los casos estas viviendas no están acondicionadas para habitar y los temporeros viven en unas condiciones deplorables. 

 Hace 14 años que Mohamed Sajed llegó al Llano de Zafarraya en busca de un futuro mejor. Y lo consiguió. Como las hortalizas que crecen en el Llano, Mohamed echó raíces y se asentó en este pequeño pueblo situado en el límite con la provincia de Málaga. Mohamed tiene dos varones y otro que viene de camino. Trabaja como vigilante en el albergue de inmigrantes y él ayuda a desenvolverse al resto de compañeros que llegan para participar en la campaña de recolección de hortícolas.

 Nada más llegar al albergue, Mohamed advierte al presidente de la Mancomunidad, Miguel, que «este año hay mucha menos siembra en el Llano porque no ha llovido lo suficiente»; y esto se ha resentido en la mano de obra. De hecho el albergue se encuentra al 50% de su ocupación. «La campaña agrícola es muy estacional y si un día un patrón necesita dos trabajadores al día siguiente puede que no necesite ninguno».

 El servicio de atención y acogida al inmigrante está muy bien organizado en el Llano. A la labor de Cáritas se suma el albergue que junto al de Cartaya en Huelva son los dos únicos existentes en Andalucía. Este centro de atención social al inmigrante gestionado por la Mancomunidad de municipios de Alhama además de facilitar alojamiento ofrece un servicio de comedor, de higiene y lavandería, así como de información, orientación y asesoramiento al colectivo inmigrante temporero y también residente.

 Cuenta con 80 camas y durante la campaña agrícola de 2005 fue utilizado por más de 1.010 personas, todos ellos hombres. En la actualidad, se están ultimando las primeras dependencias para mujeres -con capacidad para diez usuarias- con el fin de dar respuesta al cada vez mayor porcentaje de mano de obra temporera femenina en el campo.

Diferentes frentes

 También desde otros colectivos como el 'Llano Acoge', Servicios Sociales Comunitarios o la propia Guardia Civil y los servicios municipales, se libran diferentes frentes para llega el inmigrante cuente con toda la información necesaria, empleo y vivienda.

 El fenómeno migratorio está cambiando en el Llano. Eso lo asegura Ernesto Ruiz, técnico de Cáritas. «Unas 20 familias ya se han asentado en la zona, han escolarizado a sus hijos e incluso se ha dado el caso de comprar su propia vivienda». Y cada vez es más frecuente que los inmigrantes arrienden la tierra al patrón y se repartan los beneficios.

Yolanda Aguilera, IDEAL 03/08/2008