Toxicología analiza los ejemplares de peces hallados muertos en el río Alhama a su paso por Santa Cruz.
13/08/2005.- El Instituto Andaluz de Toxicología analiza los ejemplares de peces que fueron hallados muertos durante esta semana en el río Alhama, al parecer, "como consecuencia de la sequía", según informó el delegado de Medio Ambiente en Granada, Gerardo Sánchez. Aunque varios ejemplares han sido enviado a Toxicología por si "existiera algún pesticida", según manifestó Sánchez, "todo apunta a la sequía, tan extrema este verano, como la causa de la muerte de estos peces" que no son especies protegidas. El delegado de Medio Ambiente explicó que los barbos "perdieron la vida probablemente tras la desecación del río y las altas temperaturas y es muy posible que se vuelva a repetir" este verano.
Según publicó el diario Granada Hoy en su edición del jueves, 11 de agosto, el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil investiga las causas de la muerte de varios centenares de barbos en el río Alhama a su paso por la localidad de Santa Cruz del Comercio, en el Poniente granadino.
Los peces muertos comenzaron a aparecer a principios de semana, según fuentes del Instituto Armado, lo que motivó que agentes del Seprona se desplazasen hasta el río Alhama el pasado miércoles. Durante la visita, los agentes tomaron muestras del agua para descartar la posibilidad de que algún agente tóxico presente en el agua pudiera haber acabado con la vida de los peces, aunque todo parece indicar que la muerte de los animales se debe a un descenso significativo del caudal del río.
En todo caso, el Seprona (en la imagen) está investigando la mortandad exagerada de esta especie no protegida. Además de iniciar la investigación para determinar las causas de la mortandad exagerada de los peces, el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil dio cuenta a la Delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía en Granada sobre la disminución del volumen de agua en el caudal del río Alhama.
Los peces muertos comenzaron a aparecer a principios de semana, según fuentes del Instituto Armado, lo que motivó que agentes del Seprona se desplazasen hasta el río Alhama el pasado miércoles. Durante la visita, los agentes tomaron muestras del agua para descartar la posibilidad de que algún agente tóxico presente en el agua pudiera haber acabado con la vida de los peces, aunque todo parece indicar que la muerte de los animales se debe a un descenso significativo del caudal del río.
En todo caso, el Seprona (en la imagen) está investigando la mortandad exagerada de esta especie no protegida. Además de iniciar la investigación para determinar las causas de la mortandad exagerada de los peces, el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil dio cuenta a la Delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía en Granada sobre la disminución del volumen de agua en el caudal del río Alhama.
La alcaldesa de Santa Cruz del Comercio, Ángeles Jiménez Martín, confirmó ayer que desde hace tres días, aproximadamente, se viene observando en la localidad que el nivel del agua que lleva el río Alhama ha disminuido bastante a su paso por el municipio. Sin embargo, Jiménez Martín no había recibido noticias sobre la aparición de varios centenares de barbos muertos en el tramo del Alhama que discurre por el término municipal.
Por su parte, desde la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir en Alhama de Granada también se corroboró que se viene observando un descenso significativo en el caudal del río Alhama, pero las mismas fuentes achacaron esta disminución del volumen del agua a la sequía que se está sufriendo y a los "siete meses que lleva sin llover" en el Poniente granadino.
También algunas de las fuentes consultadas apuntaron como causa posible del descenso del caudal del río que los regantes de la zona hayan extraído más agua de la que tienen permitida del cauce, lo que habría acelerado la disminución del volumen del agua del río y, en el caso de que ésta se confirmara como la causa, ocasionado la mortandad de cientos de peces de esta especie no protegida.
Por su parte, desde la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir en Alhama de Granada también se corroboró que se viene observando un descenso significativo en el caudal del río Alhama, pero las mismas fuentes achacaron esta disminución del volumen del agua a la sequía que se está sufriendo y a los "siete meses que lleva sin llover" en el Poniente granadino.
También algunas de las fuentes consultadas apuntaron como causa posible del descenso del caudal del río que los regantes de la zona hayan extraído más agua de la que tienen permitida del cauce, lo que habría acelerado la disminución del volumen del agua del río y, en el caso de que ésta se confirmara como la causa, ocasionado la mortandad de cientos de peces de esta especie no protegida.