El pasado miércoles, día 6 de octubre, se celebró un homenaje a dos personas mayores, socios del Centro de Día de Santa Cruz del Comercio con motivo de la conmemoración del Día Internacional de las Personas Mayores, que todos los años se viene celebrando en este centro.
Imagen superior: Joaquina y Antonio, en el momento de recibir las placas.
En esta ocasión, se ha homenajeado a Joaquina Fernández Guerra, actual presidenta de la Junta Directiva que representa a todos los mayores, y a Antonio Correa Ramos, vocal de régimen interno.
Joaquina está a punto de salir del cargo debido a la convocatoria de nuevas elecciones, según los estatutos que rigen estos centros. Durante ocho años ha ocupado la presidencia realizando una labor muy importante en todas las actividades y funcionamiento del Centro de Día. Es una persona muy comprometida con todo lo que se hace a favor de los mayores. Carismática, participativa y muy activa (un ejemplo de persona mayor vital y un modelo de envejecimiento activo). Siempre dispuesta a colaborar y estar presente donde se necesita.
Antonio Correa también forma parte de la Junta Directiva actual, hasta que no se nombre a la nueva tras las elecciones. Su veteranía (16 años ocupando cargo de vocal en la Junta Directiva) lo hace una persona de confianza, fiel, y muy dispuesto a estar pendiente para que el Centro funcione adecuadamente a las necesidades de los mayores y usuarios que acuden diariamente. Formal y serio en sus funciones, también es muy apreciado por todos.
El acto consistió en una convivencia al aire libre donde se reunieron alrededor de cien personas, entre mayores y usuarios del centro, familiares de los homenajeados, personal y otros invitados. Se ofreció una merienda y después se entregaron unas placas de reconocimiento a estas dos personas con la colaboración del Ayuntamiento de Santa Cruz del Comercio. Finalmente, se proyectó un video con imágenes sobre la trayectoria de los homenajeados.
Recibieron regalos por parte del Centro, de los miembros del coro de mayores, de sus familiares, y sobre todo se han sentido acogidos con mucho cariño entre abrazos y aplausos por todos los asistentes.
Las personas mayores merecen reconocimiento por parte de la sociedad y que su presencia sea ejemplo de que la vitalidad no depende de la edad sino de estar activo y comprometerse en una vida saludable.