Este domingo, 23 de junio, se celebró la tradicional procesión del Corpus, donde los vecinos del pueblo cumplen con la tradición y adornan sus propios altares en las distintas calles de la localidad.
Este año no se ha podido contar con el acompañamiento de los niños que han hecho la primera comunión, ya que el único que la realizó este año, aunque vive en nuestro pueblo, la celebro en su pueblo natal Jayena.
También cabe destacar la ausencia de altares, solo tres, cuando en ediciones anteriores se pudieron contabilizar algunos más.
No obstante, la procesión no ha estado deslegitimizada en absoluto, ya que ha estado acompañada por todos los fieles que así lo desearon llegando a ser un número considerable.