Los vecinos celebran el poder utilizar el móvil sin necesidad de salir del pueblo.
En la foto José Fernández Guerrero, alcalde de Cacín.
30/05/2008.- En Cacín los móviles ya tienen cobertura. La señal que entró hace unos días con una gran potencia sorprendió e hizo sonar los aparatos de los muchos trabajadores que, a diario, se desplazan a este pueblo cercano al pantano de Los Bermejales.
Y es que Cacín ha sido, hasta ahora, el único municipio del Poniente en no contar ni siquiera con una 'rayita' de cobertura en sus aparatos de telefonía móvil. Con este panorama, muy pocos vecinos disponían de un 'celular' en su pueblo pues para utilizarlo debían abandonar el núcleo y poner rumbo hacia el pantano de los Bermejales. Con mucha suerte y una buena orientación, se podía entablar una charla.
Sus complicadas condiciones orográficas al situarse en un pequeño valle junto a la escasa población del pueblo, poco más de 700 vecinos repartidos entre el mismo Cacín y el núcleo del Turro, han impedido que sus vecinos pudieran llamar y recibir llamadas en sus teléfonos.
Y es que Cacín ha sido, hasta ahora, el único municipio del Poniente en no contar ni siquiera con una 'rayita' de cobertura en sus aparatos de telefonía móvil. Con este panorama, muy pocos vecinos disponían de un 'celular' en su pueblo pues para utilizarlo debían abandonar el núcleo y poner rumbo hacia el pantano de los Bermejales. Con mucha suerte y una buena orientación, se podía entablar una charla.
Sus complicadas condiciones orográficas al situarse en un pequeño valle junto a la escasa población del pueblo, poco más de 700 vecinos repartidos entre el mismo Cacín y el núcleo del Turro, han impedido que sus vecinos pudieran llamar y recibir llamadas en sus teléfonos.
Después de engorrosos trámites y más de un viaje aquí y allá, el alcalde de Cacín, José Fernández Guerrero se felicita de que sus vecinos puedan disponer del móvil.
La primera llamada que el alcalde realizó fue a casa y a demás compañeros de partido. Y algo así debió de ocurrir:
-¿Sí?.
-¿Sí? ¿Me oye?
-Soy Pepe, el alcalde de Cacín
-Que ya tenemos cobertura en el pueblo, que podemos hablar todo lo que queramos por el móvil.
Y así es. Los cacineños andan estos días «enganchados al teléfono». Lo mismo se lo llevan a la huerta que al Ayuntamiento. Lo importante ahora es que funciona.
No se pueden creer
Tanto el médico como el enfermero del consultorio médico de Cacín no cabían en sí de regocijo. «Es una gran ventaja, la verdad es que las tecnologías nos condicionan y mucho». Los pequeños comerciantes también han visto con muy buenos ojos la llegada de la telefonía móvil. «Es una buena oportunidad para nuestros negocios» puntualizaron.
En un principio, sólo una compañía tiene cobertura en el pequeño Cacín si bien los vecinos -tan acostumbrados a no utilizar el móvil- confían en que, poco a poco, se animen el resto de operadoras y el pueblo se incorpore al mundo de las telecomunicaciones más básicas.
La otra cara de la moneda está sin embargo en la pedanía del Turro que ha visto como de la noche a la mañana y repentinamente sus teléfonos móviles han dejado de funcionar sin un motivo que lo explique.
La primera llamada que el alcalde realizó fue a casa y a demás compañeros de partido. Y algo así debió de ocurrir:
-¿Sí?.
-¿Sí? ¿Me oye?
-Soy Pepe, el alcalde de Cacín
-Que ya tenemos cobertura en el pueblo, que podemos hablar todo lo que queramos por el móvil.
Y así es. Los cacineños andan estos días «enganchados al teléfono». Lo mismo se lo llevan a la huerta que al Ayuntamiento. Lo importante ahora es que funciona.
No se pueden creer
Tanto el médico como el enfermero del consultorio médico de Cacín no cabían en sí de regocijo. «Es una gran ventaja, la verdad es que las tecnologías nos condicionan y mucho». Los pequeños comerciantes también han visto con muy buenos ojos la llegada de la telefonía móvil. «Es una buena oportunidad para nuestros negocios» puntualizaron.
En un principio, sólo una compañía tiene cobertura en el pequeño Cacín si bien los vecinos -tan acostumbrados a no utilizar el móvil- confían en que, poco a poco, se animen el resto de operadoras y el pueblo se incorpore al mundo de las telecomunicaciones más básicas.
La otra cara de la moneda está sin embargo en la pedanía del Turro que ha visto como de la noche a la mañana y repentinamente sus teléfonos móviles han dejado de funcionar sin un motivo que lo explique.