La central híbrida ubicada en la provincia de Granada tendrá 3,9 MW, combinando los 2,1 MW de la central hidroeléctrica con los 1,8 MW adicionales aportados por la instalación fotovoltaica.
La ingeniería española Cuerva inicia la hibridación de uno de sus activos hidroeléctricos más importantes, Bermejales, en Arenas del Rey (Granada). La central tiene una producción media de 2 GWh y una potencia de 2,1 MW, y se integrará con tecnología fotovoltaica con el objetivo de aumentar sus horas equivalentes de funcionamiento. Así, pasará a tener 3,9 MW gracias a los 1.8 MW adicionales aportados por la instalación fotovoltaica.
Desde Cuerva han explicado a pv magazine que se trata de una planta fotovoltaica en suelo de 1,8 MW, por lo que pasará a tener 3,9 MW cuando concluya el proyecto de hibridación, que se desarrollará en varias fases. Durante 2024, se llevará a cabo la evaluación y planificación inicial. En el primer semestre de 2025, se procederá a la instalación de las tecnologías híbridas. Finalmente, en el tercer trimestre de 2025, se realizarán las pruebas y la puesta en marcha, con el objetivo de que la central híbrida entre en operación a mediados de octubre de 2025.
La hibridación se integra en el proyecto europeo iAMP-Hydro, que busca mejorar la operación de las plantas hidroeléctricas existentes. Cuerva actúa como demostrador principal, y pone a disposición del proyecto un conjunto de tres centrales hidroeléctricas en las que se pretende desarrollar y verificar distintos avances. En Bermejales, el foco estará en utilizar sensores de condición para analizar vibración, temperatura, voltaje y corriente, además de acústica, para el análisis de frecuencia y el desarrollo de una sonda digital con conectores para medir la profundidad del agua, la temperatura y la saturación de gas. Esta sonda estará integrada en una plataforma IoT que permitirá una fácil calibración, detección de errores y colocación fuera de la red si es necesario. Además, se desarrollarán métodos avanzados de predicción de flujo hídrico basados en modelos de Big Data y IA (Inteligencia Artificial), utilizando datos de cinco plantas hidroeléctricas con diferentes condiciones climáticas. Se espera una mejora en la precisión de la predicción del flujo de más del 23%.
“Cuerva está a punto de conseguir el RTB (Ready to Build) de la primera hibridación de muchas otras por venir, marcando el comienzo de una nueva era para la empresa y el sector energético”, concluye la empresa.