El condenado conducía uno de los coches en los que huyeron los agresores La Fiscalía investiga la participación de varios menores en la reyerta.
10/06/2006.- A la espera de que se esclarezca, por parte de la Fiscalía, la implicación en la reyerta de varios menores de edad, el juzgado de instrucción numero 1 de Loja ha multado con 340 euros a uno de los tres conductores de vehículos en los que, el pasado 26 de febrero de 2005, se desplazaron hasta Arenas del Rey los agresores de M. T. H. en el partido de fútbol sala, que se celebraba en la pista municipal de la citada localidad.
Según se reconoce en la sentencia, la víctima se encontraba disputando el encuentro «cuando aparecieron en las inmediaciones de las instalaciones deportivas tres coches, uno de los cuales iba conducido por J. M. J. P (el condenado), de los que se bajaron un numeroso grupo de personas, presumiblemente menores, quienes, invadiendo la pista, se dirigieron hacia M. T. H. y empezaron a golpearle, debiendo intervenir sus compañeros de equipo para impedir que les siguieran pegando. Los agresores abandonaron el lugar rápidamente, empleando los mismos vehículos en los que habían llegado, y que les esperaban en la puerta». Como consecuencia del apaleamiento, el afectado sufrió «erosión con contusión en región subaxiliar de costado izquierdo».
La parte denunciante, compuesta por los padres del ya citado M. T. H. y de A. S. R. lamenta que el delito sólo se penalizara a través de un juicio de faltas, pues «amparándonos en las diligencias abiertas por la Guardia Civil de Arenas del Rey se demuestra que los agresores no iban a ver un partido de fútbol, sino que reconocieron que iban a agredir. Y dadas las circunstancias del recinto, allí podía haber muerto mi hijo» comenta uno de los referidos.
Asimismo, califican de «casi anecdótica» la condena a J. M. J .P, «autor -ahonda la sentencia- de cooperación necesaria de una falta de lesiones», pena de 40 días de multa a razón de seis euros diarios (a abonar en dos plazos mensuales) e indemnización de 100 euros al agredido por las lesiones causadas (total, 340 euros más costas procesales). El fallo de la juez desmonta la versión de inocencia argumentada por el acusado. Se recoge en la sentencia que «si es cierto que J. M. J. P. iba a ver a un amigo a Arenas del Rey, no se entiende que diera la vuelta al polideportivo y que apareciera de nuevo en la puerta justo en el momento en que salían sus amigos corriendo tras la agresión (...). A ello hay que añadir que no conducía solo, sino que viajaban tres coches juntos, casualmente los tres de los que bajaron los agresores, provistos de palos para golpear a quienes jugaban dentro, y que esos mismos tres coches se marcharan del lugar».
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