Cabalgata de Reyes: Se impuso la ilusión



La lluvia que tanta falta nos hace hizo su aparición en el momento más inoportuno.

Faltaba casi una hora para la salida de la cabalgata de los Magos de Oriente y ya estaba todo previsto en las instalaciones del Pabellón Deportivo de Alhama, lugar convertido en punto de reunión para que las tres carrozas que a los magos conducirían por las calles de Alhama se diesen cita.

Niños y adultos impacientes, miradas pendientes del cielo, que amenazaba lluvia y comentarios acerca de que bien podía haber esperado la lluvia unas horas más. Mientras, los Magos de Oriente Melchor, Gaspar y Baltasar hacían aparición en sus respectivas carrozas, carrozas en las que hemos reconocido a gente del AMPA del Colegio Conde de Tendilla, de la Asociación Caballista la Elevada y de la Asociación de Mujeres de Alhama, que este año sirvieron en el día quinto del mes de enero como guías a los tres magos que visitaron nuestro pueblo, para, un año más, conceder a niños, adultos y adultos-niños unas horas de ilusión. Entretenimiento y animado espectáculo.

Ni el frio, la lluvia, e incluso algunos copos de nieve, impidieron que las tres carrozas completasen su recorrido previsto y llegasen al Paseo del Cisne calados y ateridos pero con la satisfacción de haber hecho un año más todo lo necesario para que la magia y la ilusión sean posibles, siquiera por unas horas. Ilusión y magia más necesarias que nunca en un mundo en el que la realidad se impone con su cruda carga de desilusión en todos los órdenes.

Pero el día de víspera de la llegada de los tres Magos de Oriente se impuso la ilusión. Nuestro agradecimiento a cuantos lo hicieron posible, Ayuntamiento, Asociación Caballista la Elevada, AMPA del CEIP Conde de Tendilla, Asociación de Mujeres de Alhama y a los voluntarios de Protección Civil, la Guardia Civil y la Policía Local, que una vez más, velaron para que los protagonistas de la tarde noche fuesen los que tenían que ser, la magia, la ilusión y no los sobresaltos.









































REPORTAJE GRÁFICO: PRUDENCIO GORDO