Casi la mitad de las viviendas, concretamente el 48,8% son antiguas, tomando como referencia las construcciones anteriores a los años 60. El primer municipio de edificaciones antiguas es la Puebla de Don Fradrique con el 53,2%.
(Publicado por Granada Hoy, el 06.05.2013) Granada sumó más de 90.000 viviendas con la burbuja inmobiliaria
Aunque parezca que fuera ayer, y aunque la economía aún esté buscando un sector capaz de absorber la actividad y el empleo que se han quedado por el camino, hace ya cinco años que la burbuja inmobiliaria estalló en mil pedazos. Sus efectos, sin embargo, tardarán mucho más en desaparecer. El negocio especulativo basado en el ladrillo, que tan poco tardó en esfumarse una vez que se cerró por completo el grifo de la financiación, se tradujo en su momento en un impulso sin parangón de la actividad constructiva, con el consiguiente incremento del parque inmobiliario. En el último Censo de Población y Viviendas publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), los datos permiten sacar conclusiones que indican sin ningún género de duda la 'dependencia' que el parque de bienes inmuebles de la provincia tiene con la burbuja inmobiliaria. Un ejemplo esclarecedor: entre 2003 y 2007, los años más fructíferos de la burbuja inmobiliaria, en los que se suele hablar de 'boom' del ladrillo, Granada sumó 58.655 inmuebles, que equivalen a un 10,8% del total de viviendas de la provincia, cifrado en 543.134. Es decir, que en apenas cinco años se levantó la décima parte del parque inmobiliario granadino, que cuenta con viviendas construidas con anterioridad al año 1.900.
Contando con esta última década, la de mayor actividad del ladrillo y la que se identifica más claramente con el auge y la desaparición de la burbuja inmobiliaria, la provincia ha sumado 90.850 viviendas. Eso, en el periodo que va desde el año 2001 al año 2011, el último incluido en la encuesta del INE. Esos 90.850 inmuebles equivalen a un 16,7% del total. Que sería muchos más si la crisis económica no hubiera hecho aparición. Basta seguir la evolución anual de las 'incorporaciones de viviendas' para constatar gráficamente la debacle del sector inmobiliario: en 2002 se sumaron al parque de viviendas 8.017 inmuebles; en 2003 fueron 9.546; en 2004, 5.519; en 2005, 15.872; en 2006, 12.628; y en 2007, 11.090. A partir de entonces las cosas cambian y las cifras comienzan a reducirse. En 2008 ya sólo se incorporaron al parque 8.808 viviendas; en 2009 fueron 7.896; en 2010 apenas 3.681; y en 2011, 3.793.
Esta década, a pesar de la crisis, ha sido muy fructífera desde el punto de vista inmobiliario. La anterior, la que va desde 1991 hasta 2001, también fue muy productiva para la construcción, aunque la cifra de viviendas incorporadas al parque fue algo inferior, 88.612. Con todo, es bastante significativo que en apenas 20 años -contando con las 90.850 viviendas construidas a partir de 2002 y las 88.612 de la década anterior-, se haya levantado el 33% del parque de viviendas de toda la provincia.
Sin embargo, en términos cuantitativos fue la década que comprende el periodo 1971-1980 la que más ha impulsado el parque inmobiliario granadino. Mientras que entre 1981 y 1990 se levantaron 87.952 viviendas, en la década anterior fueron 112.488. Sin embargo, en este caso la actividad constructora tiene más que ver con las necesidades reales de la población en una época de crecimiento demográfico que con la especulación a la que puede achacarse la actividad constructora de buena parte de los últimos 20 años.
El censo del INE señala que son muchos los municipios que inmobiliariamente hablando depende de la actividad constructora de la última década. Sobre todo, en el Área Metropolitana, zona de expansión natural de los habitantes de Granada que trabajan en la capital. Hay casos especialmente destacables, como el de Alhendín, donde el 58,8% de las viviendas tienen menos de una década de antigüedad y han sido levantadas entre los años 2002 y 2011. En otros municipios como Vegas del Genil (57,7%), Cijuela (54,3%), Láchar (48,12%), Las Gabias (43,4%), Churriana de la Vega (42,2%) o Jun (42,1%) el peso de las viviendas construidas en los últimos diez años también es determinante. Claro que no son las únicas localidades que tienen esta dependencia. Atarfe, Cájar, Chauchina, Cúllar-Vega o La Zubia son municipios donde al menos un 30% de sus viviendas datan del periodo 2002-2011.
En el extremo opuesto se encuentran aquellos municipios donde las viviendas tienen mayor antigüedad. Tomando como referencia las construcciones anteriores a los años 60, se puede concluir que Puebla de Don Fradrique es el municipio granadino donde mayor peso tienen las viviendas 'antiguas' sobre el total, ya que el 53,2% de sus inmuebles fueron levantados con anterioridad al año 1960. Alhama de Granada (48,8%), Ugíjar (47,2%), Güéjar Sierra (41,3%), Montefrío (38,3%), Guadahortuna (37,6%), Pinos Puente (36,4%), Guadix (34,6%), Zújar (33,64%) y Huétor Tájar (32,8%) completan el ranking de los diez municipios granadinos de más de 20.000 habitantes donde mejor se han conservado las viviendas.
En el caso de la capital granadina, las viviendas modernas representan un 10% del total, mientras que todavía siguen en pie 22.333 viviendas anteriores a a 1960, que representan un 14,6% del total del parque inmobiliario.
Contando con esta última década, la de mayor actividad del ladrillo y la que se identifica más claramente con el auge y la desaparición de la burbuja inmobiliaria, la provincia ha sumado 90.850 viviendas. Eso, en el periodo que va desde el año 2001 al año 2011, el último incluido en la encuesta del INE. Esos 90.850 inmuebles equivalen a un 16,7% del total. Que sería muchos más si la crisis económica no hubiera hecho aparición. Basta seguir la evolución anual de las 'incorporaciones de viviendas' para constatar gráficamente la debacle del sector inmobiliario: en 2002 se sumaron al parque de viviendas 8.017 inmuebles; en 2003 fueron 9.546; en 2004, 5.519; en 2005, 15.872; en 2006, 12.628; y en 2007, 11.090. A partir de entonces las cosas cambian y las cifras comienzan a reducirse. En 2008 ya sólo se incorporaron al parque 8.808 viviendas; en 2009 fueron 7.896; en 2010 apenas 3.681; y en 2011, 3.793.
Esta década, a pesar de la crisis, ha sido muy fructífera desde el punto de vista inmobiliario. La anterior, la que va desde 1991 hasta 2001, también fue muy productiva para la construcción, aunque la cifra de viviendas incorporadas al parque fue algo inferior, 88.612. Con todo, es bastante significativo que en apenas 20 años -contando con las 90.850 viviendas construidas a partir de 2002 y las 88.612 de la década anterior-, se haya levantado el 33% del parque de viviendas de toda la provincia.
Sin embargo, en términos cuantitativos fue la década que comprende el periodo 1971-1980 la que más ha impulsado el parque inmobiliario granadino. Mientras que entre 1981 y 1990 se levantaron 87.952 viviendas, en la década anterior fueron 112.488. Sin embargo, en este caso la actividad constructora tiene más que ver con las necesidades reales de la población en una época de crecimiento demográfico que con la especulación a la que puede achacarse la actividad constructora de buena parte de los últimos 20 años.
El censo del INE señala que son muchos los municipios que inmobiliariamente hablando depende de la actividad constructora de la última década. Sobre todo, en el Área Metropolitana, zona de expansión natural de los habitantes de Granada que trabajan en la capital. Hay casos especialmente destacables, como el de Alhendín, donde el 58,8% de las viviendas tienen menos de una década de antigüedad y han sido levantadas entre los años 2002 y 2011. En otros municipios como Vegas del Genil (57,7%), Cijuela (54,3%), Láchar (48,12%), Las Gabias (43,4%), Churriana de la Vega (42,2%) o Jun (42,1%) el peso de las viviendas construidas en los últimos diez años también es determinante. Claro que no son las únicas localidades que tienen esta dependencia. Atarfe, Cájar, Chauchina, Cúllar-Vega o La Zubia son municipios donde al menos un 30% de sus viviendas datan del periodo 2002-2011.
En el extremo opuesto se encuentran aquellos municipios donde las viviendas tienen mayor antigüedad. Tomando como referencia las construcciones anteriores a los años 60, se puede concluir que Puebla de Don Fradrique es el municipio granadino donde mayor peso tienen las viviendas 'antiguas' sobre el total, ya que el 53,2% de sus inmuebles fueron levantados con anterioridad al año 1960. Alhama de Granada (48,8%), Ugíjar (47,2%), Güéjar Sierra (41,3%), Montefrío (38,3%), Guadahortuna (37,6%), Pinos Puente (36,4%), Guadix (34,6%), Zújar (33,64%) y Huétor Tájar (32,8%) completan el ranking de los diez municipios granadinos de más de 20.000 habitantes donde mejor se han conservado las viviendas.
En el caso de la capital granadina, las viviendas modernas representan un 10% del total, mientras que todavía siguen en pie 22.333 viviendas anteriores a a 1960, que representan un 14,6% del total del parque inmobiliario.