Regentaba una de las gestorías tradicionales de Alhama, por lo que su vinculación con el tejido empresarial local era importante desde hace mucho tiempo.
José Luis Molina Serrato, de 54 años, no había presentado ningún síntoma relacionado con alguna enfermedad a lo largo de su vida, pero a mediados del pasado mes de noviembre de 2019, empezó a sentirse mal y él mismo se dirigió al centro de salud, donde fue trasladado inmediatamente al hospital de Granada, un infarto, de considerable importancia lo tuvo en la UCI durante varios días, tras los cuales, y un periodo de recuperación le permitió regresar a su domicilio alhameño para seguir con el tratamiento correspondiente. Dado de baja, y cuando hacía buen tiempo, se dedicaba a pasear tranquilamente por los alrededores de su domicilio y conversar con los vecinos y amigos en lo que parecía una recuperación lenta pero progresiva.
Cuando todo parecía que volvía a la normalidad en la madrugada de este pasado lunes, 13 de enero de 2020, volvió a sentirse mal, se dirigió nuevamente al centro de salud y de allí lo trasladaron al hospital de Granada, pero en esta ocasión con la fatalidad de que su cuerpo no resistió la repetición del problema cardíaco falleciendo en esta misma madrugada, sin que los médicos y la ciencia pudiera hacer nada para evitarlo.
Los amigos que le hemos acompañado estos días de recuperación, así como el resto de vecinos que lo estábamos viendo evolucionar favorablemente no dábamos crédito a tan trágica y repentina noticia, así como el resto de personas que lo conocían, bien fuera como amigo, vecino o por la relación profesional.
José Luis deja viuda y tres hijas, aún menores, así como el recuerdo para quienes lo conocimos y tratamos, uniéndonos al dolor de familiares, amigo y vecinos en estos desconsolados momentos.
Cuando todo parecía que volvía a la normalidad en la madrugada de este pasado lunes, 13 de enero de 2020, volvió a sentirse mal, se dirigió nuevamente al centro de salud y de allí lo trasladaron al hospital de Granada, pero en esta ocasión con la fatalidad de que su cuerpo no resistió la repetición del problema cardíaco falleciendo en esta misma madrugada, sin que los médicos y la ciencia pudiera hacer nada para evitarlo.
Los amigos que le hemos acompañado estos días de recuperación, así como el resto de vecinos que lo estábamos viendo evolucionar favorablemente no dábamos crédito a tan trágica y repentina noticia, así como el resto de personas que lo conocían, bien fuera como amigo, vecino o por la relación profesional.
José Luis deja viuda y tres hijas, aún menores, así como el recuerdo para quienes lo conocimos y tratamos, uniéndonos al dolor de familiares, amigo y vecinos en estos desconsolados momentos.
- Su lugar en AUSENCIAS.