Los alhameños conmocionados con la muerte de Manolo Martín

24 y 25/02/2007.- El alhameño Manuel Martín Medina, conocido cariñosamente como "El Socio" fallecía atropellado, por un vehículo Renault-21 matrícula de Córdoba, al cruzar la carretera en las cercanías de Atarfe, sobre las ocho de la noche del viernes 23 de febrero. Al parecer Manolo falleció en el acto tras el tremendo impacto, y el coche, conducido por un joven de veintitrés años, tuvo que ser retirado del lugar por la grua, por el estado en el que había quedado. Manolo Martín tenía 58 años y era una persona muy querida en Alhama, fue premio del Patronato de Estudio Alhameños el pasado año en reconocimiento a toda una vida de colaboraciones en numersas actividades sociales, y su muerte ha supuesto un duro golpe en la población.

- En esta página de "Ausencias" podéis dejar vuestro recuerdo de Manolo El Socio

Informe del accidente  Según los datos facilitados por la Guardia Civil de Tráfico el siniestro en el que falleció Manuel Martín Medina sucedió hacia las 20 horas del viernes, 23 de febrero, en el punto kilométrico 429 de la M-432 (Badajoz-Granda), término municipal de Atarfe. En este lugar situado en las proximidades del restaurante Las Yucas se produjo el atropello mortal de este peatón de 58 años de edad por un vehículo turismo Renault 21, conducido por J.A.R.L de 23 años de edad que resultó ileso y que viajaba acompañado por una mujer de 23 años que también resultó ilesa.    El atropello se produjo al cruzar el peatón la carretera en zona poca iluminada y desprovisto de prenda reflectante. Como consecuencia del impacto la víctima que no pudo ser identificada al carecer de documento de  identificación sufrió diversos politraumatismos que le produjeron la muerte instantánea.  Sometidos tanto el conductor como la acompañante que circulaban en dirección a Badajoz a las pruebas de alcoholemia ambas resultaron negativas. El accidente produjo algunas retenciones.  El hecho de que se produjera en las inmediaciones del restaurante mencionado  y sabiendo que el infortunado se dirigía a un sepelio es probable que se detuviese para preguntar por la localización del tanatorio de Atarfe, situado a unos 700 metros de esta bifurcación.

Manolo Martín, El Socio, persona querida y entrañable
Así lo definía el Patronato en su anuario 2006 cuando le concedió el Premio Alhama

 Puede decirse que hablar de Manolo es hacerlo de la cortesía, la caballerosidad, la auténtica nobleza, todo ello vinculado a una singular y siempre buena disposición a atender a los demás y, con la mayor de la generosidades, a todo lo que tenga que ver con su querida Alhama.

 Hijo de otras excelentes personas, Manuel Martín Márquez y Aurora Medina Fernández, no podía ser menos, nació en 1948 en la alhameña calle de Enciso, la que comenzó a ser escenario de sus primeros sentimiento en favor de Alhama y de sus primeros y entrañables amigos.  Durante más de cuarenta años nos lo hemos encontrado en cuantas partes se cincelaba buen alhameñismo, ya en 1982 colabora decididamente con el Ayuntamiento en la Comisión de Fiestas y Deportes, a la par voluntario de la Cruz Roja y de todo aquello que surgiese.  También ha sido un singular colaborar de Radio Alhama, especialmente en los programas "Amigos en la noche" y "Música española", como él dice "siempre bajo la singular batuta de Juan Cabezas".

 Con igual ánimo y altruismo, desde hace quince años, es un miembro más de la comparsa y el coro "Manos Unidas", así como, posteriormente, de la Coral de Alhama y de la Tuna.

Entierro multitudinario

 El día amaneció entre nubes y claros, algo frío y algo triste, como el ánimo de los alhameños. Alhama se disponía a celebrar el día más grande de su fiesta, pero primero tenía que decir adiós a uno de sus vecinos más queridos. Este 25 de febrero, Domingo de Piñata, no sería igual sin Manolillo "El Socio".

 Pasadas las 9 de la mañana la comitiva empezaba a recorrer el kilómetro aproximado que separa el tanatorio de la iglesia del Carmen, quisieron llevarlo a hombros, era el último homenaje de sus amigos, de sus vecinos, de todo un pueblo volcado en una triste despedida a esta persona menuda de enorme corazón.

 Manolo recorrería por última vez las calles engalanadas para la fiesta, para su carnaval, en un día en el que había quedado con sus amigos para disfrutar de algo que llevaba tan dentro y al que ya no asistiría. Silencio, respeto y emoción contenida porque a todos se nos agolpaban las imágenes de Manolo y el Carnaval. ¡Qué triste despedida en un día tan señalado para todos, y del que formaba parte activa desde hacía tanto tiempo!. ¡Qué triste adiós para una persona tan querida!.

 Después del acto religioso que comenzó a la nueve y media, y cuando cerca de las diez de la mañana la comitiva partía hacia el cementerio, se cruzaba con los primeros autocares y vehículos que llegaban a disfrutar del famoso Domingo de Piñata alhameño. Seguro que éstos ajenos a nuestro dolor no podían ni imaginarse el momento tan amargo que estabamos viviendo desde dentro, y el esfuerzo que se ha tenido que hacer para que a mediodía continuara la fiesta, después de haber tenido que enterrar a un ser tan querido, y porque todos hemos tenido la sensación de haber perdido a un familiar nuestro. Todo un homenaje para tí; Socio.