El museo Brazam entre Alhama, Granada y Las Gabias



Un acuerdo a varias bandas, con participación de los consistorios de Las Gabias, Alhama, Granada y el propio pintor, facilitará la creación del museo.

José Antonio Muñoz publicaba el siguiente artículo al respecto, en la página 52 del diario IDEAL de este miércoles 17 de enero de 2018

La Casa del Almirante albergará la colección del pintor Brazam

 La Casa del Almirante, situada en el barrio del Albayzín a espaldas de la iglesia de San José, acogerá finalmente la mayor parte de la colección artística de Juan Manuel Brazam. Desde hace algo más de un año, el Ayuntamiento de la capital había barajado recuperar este edificio, utilizado durante los últimos tiempos como Centro de Restauración por parte de la Universidad de Granada, para albergar una parte en exposición permanente y otra en muestras de carácter temporal, la impresionante nómina de objetos y obras propias del artista alhameño, actualmente conservada en la vivienda singular que Brazam posee en la población de Las Gabias.

 Ahora, un acuerdo tetrapartito donde participarán, además del consistorio capitalino, los de Las Gabias y el de Alhama de Granada, población natal del pintor, y que serán también sedes expositivas de la fundación y de otras actividades relacionadas con la gestión del legado, permitirá que la oferta que Juan Manuel Brazam hiciera al anterior equipo de gobierno del Partido Popular en 2015 cristalice con el equipo socialista actual. En el camino queda la ubicación alternativa, los espacios situados bajo el Camino del Ronda, paralelos al discurrir del 'metro', cuya adaptación requería un esfuerzo inversor que ahora mismo el Ayuntamiento de Granada no puede asumir. También quedaron en el camino otras propuestas, como el Hospital de Peregrinos -que fue sede de la extinta Asociación de la Prensa-, la Casa Ágreda -que sale en las quinielas para todo, desde para futura sede del Festival de Música y Danza hasta para acoger la colección del arquitecto Carlos Sánchez, igualmente impresionante-, o el local municipal de San Matías, 11.

 El artista alhameño ha creado una colección verdaderamente excepcional, desde que adquiriera la primera pieza en Ceuta a un anticuario chino, cuando fue enviado allí para hacer el servicio militar. En números redondos, está formada por más de 1.047 piezas de arte africano, en torno a 400 piezas arqueológicas de las culturas griega, romana e ibérica y un pequeño grupo de obras de extremo oriente, coleccionadas con paciencia durante décadas, así como 350 obras pintadas por él mismo, en todos los formatos imaginables.

Alhama lleva la delantera

Según confirmó ayer el propio pintor a IDEAL, en estos momentos, las gestiones más avanzadas se centran en la sede de Alhama. En el pleno municipal que tendrá lugar a finales de mes, se aceptará un legado de obras que, según el pintor, «se adaptarán al espacio elegido para albergarlas, que es el Hospital de la Reina. Para mí, es un edificio idóneo, porque además de los espacios grandes, incluye otros pequeños donde se pueden colocar piezas con un discurso museístico coherente».

 
Datos

La ubicación. Palacio del Siglo XVI, ubicado en el barrio del Albayzín, a espaldas de la iglesia de San José, en Granada; Hospital de la Reina, en Alhama, y la propia casa del pintor, en Las Gabias.

Lo que incluirá. Más de un millar de obras africanas, 300 de índole arqueológica mediterránea, y 350 obras propias del pintor.

Los plazos. Alhama cerrará este mes sus gestiones, mientras que la capital no tiene aún fecha para hacerlo.

 

 Brazam calcula que en la primavera de 2019, este espacio estará en pleno funcionamiento. En cuanto a la sede de las Gabias, será la propia casa del pintor, y las negociaciones van por buen camino, aunque más pausadas. Y en lo que se refiere a la gestión futura del legado, se han retomado las negociaciones iniciadas hace tres años, y que recogían la creación de una Fundación que tendría como patronos al propio Ayuntamiento capitalino, la Academia de Bellas Artes, la Universidad, dos sobrinas del pintor -María José, licenciada en Derecho y Elena, arquitecta-, y dos de los amigos de Brazam: «Todavía no he decidido a quiénes se lo voy a pedir. Me gustaría que fueran más jóvenes que yo. Sé que es una responsabilidad grande», dice.

 Ayer, durante la Comisión de Cultura, el director general, José Vallejo, informó de los escollos que aún quedan por salvar. Uno de carácter técnico, cual es la ubicación en el Palacio del Almirante del nodo de comunicaciones internas más importante de la Universidad. El otro, de carácter administrativo, derivado de la devolución del propio edificio al patrimonio municipal, que también va por buen camino. En principio, dichos escollos podrían salvarse antes de que finalice la primavera. A partir de entonces, comenzarían los trabajos de acondicionamiento.

 El pintor es cauto, y prefiere observar todo el asunto «con el máximo interés, pero con distancia, esperando que todo se resuelva bien». Comenta que «jamás pensé que mi obra podría contar con un museo propio, y mucho menos con tres. Sin embargo, con ocasión de mi exposición en el Museo CajaGranada -en 2015-, vi que había interés, y posibilidades. Para mí, poner todo lo que tengo a disposición de mi ciudad no es sólo un honor, sino casi una obligación», comentó ayer.

 Para el artista, ya con el edificio de la Casa del Almirante limpio, «la mayor inversión será dar un entorno adecuado a las piezas: luces que evoquen misterio, plintos, vitrinas para exponer los objetos más pequeños, información audiovisual...». Con todo, espera de las administraciones la complicidad necesaria para conservar «una colección de arte africano que es única en el mundo». Ojalá que así sea.