
Ophelia Chicot, responsable del Bar La Joya, ha sido la encargada de devolver la vida a un kiosco que llevaba demasiado tiempo cerrado.

Desde comienzos de este mes de noviembre, el Paseo del Cisne —o La Placeta, como lo conocen los alhameños— ha recuperado parte de su dinamismo social gracias a la reapertura del kiosko a cargo de Ophelia. Ante la escasa actividad de la piscina municipal durante los meses de otoño e invierno, la regente de La Joya ha decidido trasladar allí su energía y su buen hacer.
En su nuevo establecimiento, Ophelia ofrece no solo las golosinas tradicionales de cualquier kiosko, sino también desayunos y meriendas con café y una amplia variedad de dulces. A la hora del aperitivo, los visitantes pueden disfrutar de cervezas, refrescos o vinos, acompañados por distintas conservas —de caballa, sardinas y muchas otras— que ella misma prepara con esmero.

Los turistas que llegan a nuestra ciudad encuentran además un punto donde adquirir un recuerdo auténtico del municipio. El kiosco cuenta con una cuidada selección de productos locales: dulces, aceite, la conocida Ginevia, así como un muestrario de artículos elaborados en el Centro Ocupacional El Lucero, perfectos para quien desee llevarse un souvenir con identidad alhameña.
El kiosco permanece cerrado los martes y los miércoles. El resto de la semana abre a partir de las diez de la mañana. Durante los fines de semana lo hace de manera ininterrumpida hasta la caída del sol; los jueves y viernes cierra un breve intervalo al mediodía, y los lunes funciona únicamente en horario de mañana. Además, dado que la oficina de turismo permanece cerrada los fines de semana, Ophelia ejerce de manera oficiosa esta labor atendiendo a los visitantes, ofreciendo mapas e información a quienes se acercan con curiosidad.
Vídeo-conversación con Ophelia
Desde Alhama Comunicación deseamos a Ophelia la mejor de las suertes en esta nueva iniciativa, que ya está contribuyendo a que La Placeta vuelva a sentirse un espacio vivo y acogedor.









