Domingo de Piñata placetero

En “La Placeta” se concentró toda la actividad carnavalera desde media mañana.

 Mucha gente y ambiente en este Domingo de Piñata 2024, en donde a las cuatro comparsas de Alhama se le han unido grupos de máscaras venidas de fuera que hicieron multicolor y variado el día final del Carnaval, además de las máscaras alhameñas que, como siempre, volvieron a sorprender con las más disparatadas parodias.

 Y, como titulamos, el ambiente se concentró en la placeta, tiempo habrá de analizar los pros y los contras que ha tenido este año, que han sido muchos y variados, pero ahora es el momento de reconocer el trabajo de cuantos lo han hecho posible, así como el agradecimiento a los que nos han acompañado de fuera.

 A partir de las cinco de la tarde comenzaron las actuaciones en el Paseo del Cisne, dando prioridad a las tres que nos acompañaron de fuera, por aquello de que no se les hiciera demasiado tarde el regreso, y, sobre las siete de la tarde las locales, comenzando por “Las Mari Pilis”, extraordinarias, con un ánimo, un brío y un repertorio digno del mejor Carnaval, y no dejamos atrás su vestuario de “La Libertad”, del que imaginamos que, por rigidez y peso, el sol que nos iluminó en ese día haría sus efectos en este estupendo grupo que nos ha sorprendido en el 2024.

 “Sin ton ni son”, la muestra palpable de un esfuerzo en el interés de seguir con la tradición en un grupo de jóvenes que han estado a la altura de aplaudir su entusiasmo, es esencia misma de los Carnavales rurales de siempre, de los que en Andalucía sólo queda el nuestro y alguno más, pero ya está, en el escenario interpretaron una selección de sus temas más destacados, en lo que no faltó la picaresca y los lequillos tradiciones que Juan Antonio Martín se ha encargado de transmitir a este grupo de jóvenes entusiastas.

 “Los gorriones de Placeta”, (que no -de la Placeta-) numerosísimos y encantadores en ese retroceso a la época de los 90, un trabajo inconmensurable en el que Javi Castañeda se ha tenido que emplear a fondo para coordinar, preparar y trasmitir, a chavalitos de muy corta edad las figuras de la música de aquella época, así como darle un realismo carnavalero a un espectáculo que fue la delicia del cierre, con temas pegadizos coreados por los asistentes, así como los temas propios de los acontecimientos locales.

 “Las Nenas”, fuera de del circuito oficial, pero inmersos en lo mejor de un Carnaval tradicional, se ganaron el reconocimiento y las peticiones de la gente, que han sabido avalar con actuaciones a lo largo de todos estos días, tanto nuestras calles y plazas como en establecimientos, donde eran esperados para escuchar su repertorio no exento de crítica mordaz, como siempre ha sido nuestro Carnaval.

 Un buen Carnaval, aunque como decimos, habrá que analizar para que no quede en un espejismo.