Deporte para padres, madres e hijos practicado de forma conjunta y gratuita en julio

Artes marciales



Dentro de las actividades y ofertas deportivas, con motivo del 25 aniversario del club Alhama-Ippon, se organiza esta actividad de deporte en familia.

 Se anima a los padres, cuyos hijos está dando clase de karate, a participar en esta experiencia que les reportará beneficios saludables, aprendizaje de técnica, conocimiento sobre el arbitraje cuando asistan a los campeonatos de sus hijos y la oportunidad de realizar una actividad conjunta.

 Para ello el gimnasio Ippon de Alhama organiza clases de Karate para padres y madres de los alumnos del club Alhama-Ippon, completamente gratis, durante el mes de julio, que se realizaran dos días a la semana; los martes y jueves de 20:00 a 21:00 horas.

El karate

 La práctica regular del KARATE implica un equilibrio psicofisiológico que es una de las mejores inversiones para los ciudadanos del siglo XXI, con la ventaja de que el KARATE se puede practicar a cualquier edad, en cualquier lugar o circunstancia, solo o acompañado.

 El KARATE tiene efectos antienvejecimiento, algunos estudios muestran como personas ancianas que han practicado KARATE a lo largo de su vida tienen los vasos sanguíneos más flexibles, mantienen al máximo la capacidad motriz y la articular.

 Estudios recientes llevados a cabo por psiconeurólogos muestran que el KARATE puede tener grandes efectos en la prevención de enfermedades neurodegenerativas como el Alzeimer. La dinámica del KARATE que incluye el trabajo corporal con numerosos movimientos coordinados y que nos obligan a mejorar el equilibrio provoca un crecimiento de las conexiones entre las neuronas, de este modo se fortalecen las redes neuronales del cerebelo, los ganglios básales y el hábeas callosum lo que implica una  revitalización de la memoria y un incremento de la capacidad para organizar información nueva. El entrenamiento en el tatami es fundamental para conservar la memoria y repara las conexiones cerebrales debilitadas con la edad, sobre todo a partir de los 50 años cuando empieza un lentificación generalizada que afecta a casi todo lo que podamos hacer, desde los tiempos de reacción a la rapidez con que aprendemos o recordamos. Esto es debido a que nuestro cuerpo se vuelve menos eficaz en la repartición de nutrientes al cerebro y una de las mejores ayudas para mejorar esto y evitar que el problema aumente es ponerse el karategui.

 Las mujeres que practican regularmente KARATE tienen un riesgo de padecer cáncer de mama y otros tumores malignos hasta un 37% menor que las mujeres sedentarias. El KARATE es un agente terapéutico de primer orden, aumenta nuestras defensas potenciando el sistema inmunológico, incrementa los niveles de células T, responsables de defender al organismo de distintos virus y bacterias. Aumenta la capacidad respiratoria, incrementando la actividad del diafragma, el tórax y los pulmones. Potencia el corazón y previene los problemas cardiovasculares.

 A nivel competitivo, la práctica del KARATE deportivo desarrolla en los competidores aspectos psicosociales genuinos que posibilitan rasgos exclusivos para los perfiles de selección de personal, de máximo interés para los cazatalentos empresariales y que no se pueden aprender ni entrenar se adquieren exclusivamente por la experiencia competitiva.

 En definitiva el KARATE es mucho más que un deporte, no sólo por su origen sino por los beneficiosos efectos a nivel educativo, social y sanitario que aporta. El KARATE es una excelente herramienta para el cuidado de nuestro cuerpo y nuestra mente, su práctica regular puede transformar completamente nuestra vida.
 
Amador Cernuda, psicólogo de la Federación Española de Karate.